Sushisun — Restaurant in Armilla

Cualquier parecido de la carta con la realidad es pura coincidencia.

Resumen: Nos sentamos y más de 30 min para que el propio camarero nos atendiera de muy mala manera. Muy maleducado y con gorra dentro del local como si estuviéramos en una pandilla de barrio. Me llamó pobre porque quería pedirme un vaso de agua y me discutió que tenía que pedirme una consumición obligatoria de bebida (cuando eso es ilegal) aunque podían haberme echado del local por el derecho de acceso.

La comida: todo muy tarde y lento. Platos que deberían de estar calientes llegaban fríos o templados. NADA se parece a la presentación de la carta. Productos baratos y abuso de mayonesa de la marca Chovi (por favor mirad la foto adjunta). Lomos de salmón con un sabor extraño a cítricos en todas las piezas para enmascarar un sabor agrio. A excepción de las Gyozas de carne poco se salva de la carta.

Situación: El local tiene una pésima localización que lo único que lo salva es tener la autovía cerca. Durante el día es un auténtico horno ya que todas las "paredes" esteriores son cristaleras con unas persianas puestas para evitar asarte directamente. De noche aún se mantiene el calor de todo el día a pesar de estar con aires acondicionados. Ventilación pésima o nula. Lo único gracioso es que tienen un proyector en la entrada como si fuera una pecera que cada poco cambian el vídeo y se vé cómo manejan Windows 10 en chino.

Carta: Al ser una franquicia supongo que estarán obligados a cumplir unos requisitos de presentación, calidad etc... Pues me gustaría saber dónde puedo encontrarlos. He visto fotos de otros locales de la misma franquicia y nada que ver con lo que yo he visto en este lugar. A pesar de que soy un amante del sushi y de la cocina oriental, no puedo decir que haya comido un buen sushi en cuanto a calidad y tampoco había una variedad excesiva. Solo dos o tres piezas se salían de lo habitual y pescaban de exceso de mayonesa.

Servicio y Camareros: Esto sin duda lo peor de todo. Tras llegar y esperar 10 min en la puerta a que nos atendieran con la sala prácticamente vacía. Me encanta el elenco de camareros de diferentes nacionalidades y países hasta que nuestro camarero se presenta con gorra (el único en todo el local) como un pandillero. Nos sentaron rápido y tuvimos que esperar otros 30 min para que se acercara el chico a explicarnos de forma bastante desconcertante como teníamos que apuntar todo en un papelito. Aquí empieza el chico a darnos voces y a llámame pobre porque no quiero pedirme una consumición de primeras y pedirle un vaso de agua (no tengo que explicar que he estado todo el día fuera de casa haciendo de guía). Cuando rellenamos el papelito me avisa igualmente que tengo la obligación de consumir bebida para entrar y que está escrito en la puerta de muy malas maneras y le pido que llame al jefe (después de esto tuvieron que acercarse otros camareros, muy simpaticos, porque este nos desatendió para el resto de la cena).

No creo que duren mucho, sobretodo por la localización y por la calor en verano. Ojalá se hubiera parecido más al resto de locales de...

Caótico y lento.

Éramos un grupo de diecipico personas.

Hay que pedirles que te cojan la comanda porque si no no se acerca nadie.

Los platos tardan en llegar, traen platos repetidos y otros directamente no los traen. Si les preguntas te dicen con cierto victimismo y altanería que el personal es nuevo y que hay que tener paciencia y que si trabajáramos en hostelería lo entenderíamos ( De toda nuestra mesa quizás los dos o tres más jóvenes son los únicos que no hayan trabajado en hostelería).

Tienen muy poca comunicación entre ellos porque teníamos que preguntar/ pedir las cosas varias veces para que nos llegasen a traer algo.

Los alérgenos no están claros porque los platos no son como figuran en la carta, un ejemplo los makis de pepino y aguacate que pedí para mi hija de tres años, tardaron dos horas en traerlos, vinieron juntos en el mismo plato, los de pepino tenían un pegote de queso que no aparecían en la carta, mi hija es alérgica a la proteína de la leche, lo cual significa que no puede tomar ningún lácteo. De ese plato solo se salvaron dos makis que le pude dar. Pedí que me trajesen otro sin queso y me trajeron media hora más tarde 4 piezas de aguacate nada más. Por estas 6 piezas nos cobraron 7'50.

Nosotros no volveremos porque tardamos en comer más de 3 horas, hubo muchas cosas que no nos trajeron y otras que por más que les decíamos que ya nos lo habíamos comido nos lo seguían trayendo ( nos trajeron tres platos de cerdo agridulce en total y solo habíamos pedido uno, esto tiene su importancia porque se supone que lo que no te comes te lo cobran aparte). Al final, se veía salir a los camareros y descubrir que los de las mesas se habían ido cansados de esperar( vimos como más clientes discutían con la encargada). En ese momento empezaron, curiosamente, a traernos montones de cosas, al final les dijimos que pararan porque de la espera se nos había cortado el hambre.

Si no te importa lo que comes y que tarde, no eres alérgico a nada y no te importa que te respondan mal, este es tu sitio.

Ah y el ramen es de los paquetes esos de los chinos a los que han añadido medio huevo cocido y dos trozos de ternera que le han sobrado en algún lado, incluso usan los mismos aliños de los sobres que vienen en el paquete y dejan los tallarines con la forma en que viene...

Hablaré con conocimiento de causa, ya que he probado todos los buffets libres de comida japonesa de Granada capital y puedo decir que, con diferencia, es el mejor de toda Granada (en cuanto a buffet de comida, recalco). No iba a escribir esta reseña hasta no haber probado el nuevo Kaisen, en el CC Granaita. Y habiendolos probado todos diré que, en relación Calidad-Precio, gana de calle. Si bien Kaisen tiene una variedad un poco más vanguardista de algunos platos y algunas combinaciones, es cierto que Kaisen parte de un precio por persona bastante más elevado que Sushisun, ademas de que Kaisen tiene platos distintos que solo puedes pedir por la noche (+7€ respecto a medio día) y otros que solo puedes pedir los fines de semana (+14€ respecto a medio día entre semana), cuya diferencia de precio no justifica en absoluto la variedad de platos y sin entrar a valorar los suplementos de otros platos. Por ello y porque las comparaciones son odiosas, Sushisun ofrece una variedad bastante amplia de platos, servidos en un plazo de tiempo muy corto (ya que tienen a muchas personas trabajando en una cocina abierta y los puedes ver directamente manipulado el producto) y no tienen límite de platos por pedido y comensal. Puedes pedir todo lo que quieras (con un sobrecoste por cada artículo pedido que no te comas) de una vez y poder disfrutar de toda la comida de golpe. El sobreprecio de estos sitios lo pagas con la bebida, pero tampoco son excesivos. A veces, si tienes suerte (o desgracia) te atiende un simpático robot que te trae tu comida a la mesa (hace que niños y adultos alucinen por igual si no estas acostumbrado a que un Iron Man de marca blanca te sirva Makis). Muy recomendable por la calidad de la comida, preparada en el acto delante de ti, materias primas frescas, precio mas que razonable, aparcamiento en la puerta (trasera) y un ambiente que invita a relajarte y disfrutar...