Museo Pachamama — Attraction in Municipio de Amaicha del Valle

☸️¡Hola 🙋🏼‍♀️el 1 de agosto, el día de La Pachamama. ¿Sabían que en la localidad tucumana de Amaicha del Valle se encuentra el Museo Pachamama? También conocido como La Casa de Piedra, este lugar es simplemente impresionante.

El Museo Pachamama exhibe los rasgos característicos de los Valles Calchaquíes, y déjenme decirles que es una experiencia única. El museo fue diseñado por Héctor Cruz, un talentoso pintor, escultor y artesano autodidacta. ¡Imagínense la pasión y dedicación que se refleja en cada rincón!

Cuando entras al museo, te sumerges en la cultura y tradiciones de la Pachamama. A través de las diferentes salas, podrás conocer la historia de los pueblos originarios de la región y su relación con la Madre Tierra. Es fascinante ver cómo se entrelazan la espiritualidad, la naturaleza y el arte en este lugar.

Imaginen poder caminar entre piezas arqueológicas, esculturas y obras de arte que representan la cosmovisión andina. Es como si estuvieras tocando la historia con tus propias manos. ¡Es realmente emocionante!

Las imágenes en el patio del museo de La Pachamama en Amaicha Del Valle nos hablan de la conexión profunda que existe entre la naturaleza y nosotros. Nos recuerdan que somos parte de un todo más grande y que nuestras acciones tienen un impacto en el mundo que nos rodea. A través de los dioses, los gatos y las lagartijas serpiente, aprendemos valiosas lecciones sobre el respeto, la protección y la transformación.

Así que si alguna vez tienen la oportunidad de visitar Amaicha del Valle, no pueden perderse el Museo Pachamama. Es un lugar mágico donde la cultura y la naturaleza se fusionan de una manera increíble. Además, les aseguro que saldrán con una nueva perspectiva y un profundo respeto por nuestra...

Tengo una sensación rara con la visita al museo. Si bien se ve que hay una gran infraestructura, que esta todo cuidado, y organizado, no me sentía cómoda en el museo. Creo que no representa lo que fui a buscar. Al pensar en la Pachamama, imagino un lugar espiritual, de reflexión, de aprendizaje, de encuentro y respeto por las culturas originarias. Sin embargo me encontré con un espacio cementista, recargado de detalles que lejos de parecerme interesante, me resultaron invasivos. Las esculturas exteriores rodeadas de otras representaciones sobrecargada de detalles en el suelo y en la pared,. No hay guíe que te explique nada, ni te cuente los significados de tales obras, ni el origen de esa espiritualidad, Te dan una especie de pequeño libro con las figuras que encontrarás en el paseo y la explicación muy breve y escueta. La sensación que tengo es que no representa al pueblo originario nii a sus culturas. Tampoco entendí el.objetivo del museo, ni su finalidad ya que nadie lo explica. Parece un lugar donde vender cosas caras, imdustrializadas ni siquiera son artesanías reales. Los objetos mostrados en el museo interno, no son reales, sino recreaciones. Es mi apreciación personal, me quede vacía y desconcertada luego...

Sorprendente lugar, poco difundido, al que llegamos un poco de casualidad , una obra de muchos años del artista local Héctor Cruz, donde se involucró a la comunidad. Que expresa la cultura de los pueblos andinos de una forma preciosa y sublime. Las piedras y La Paz del lugar permite hacer volar la imaginación a una época desconocida. Al salir compramos un libro del museo y nos llevamos la grata sorpresa que él mismo Héctor estaba atendiendo el museo, con una humildad digna de los grandes. Una obra que vale la pena conocer y hacer conocer y que según nos contó el mismo autor le llevó “toda una vida” Cierro con un frase de Héctor que encontré perdida en el recorrido:

Hacer de esta obra exigió de Cruz volver a esos credos antiguos como lo hicieron sus creadores “Me puse la piel del Chamán, empuñé las armas de los guerreros de la luna, me senté en medio del consejo de ancianos de las tribus, volé con alas de águila y repté con la piel de la serpiente sagrada de la lluvia. Penetré hasta la dura piel de las piedras y me di cuenta que son inmortales, como si fueran centinelas de la eternidad, aunque rescato la protección de...