Filobobos Camp: Un Santuario de Aventura y Conservación en Tlapacoyan. Ubicado en la exuberante región de Tlapacoyan, Veracruz, Filobobos Camp. Se ha establecido como un destino emblemático para los amantes de la naturaleza y la aventura. Este campamento, enclavado en una zona ecológica protegida, no solo ofrece experiencias emocionantes al aire libre sino que también desempeña un papel crucial en la preservación del entorno natural. Filobobos Camp se encuentra en una de las áreas más biodiversas de México. Rodeado de selvas tropicales, ríos caudalosos y una increíble variedad de flora y fauna, el campamento ofrece un entorno único para quienes buscan desconectarse del bullicio de la vida urbana y reconectarse con la naturaleza. La región es hogar de diversas especies animales, como el jaguar, nutrias, pez bobo, acamayas, macaquines, carpas, lebranchas, guebinas, guapotes y múltiples especies de aves, lo que la convierte en un paraíso para los observadores de aves y los amantes de la vida silvestre. El campamento es conocido por su amplia oferta de actividades al aire libre. Entre las más populares se encuentran el rafting en los rápidos del río Filobobos, el kayak, el rappel, la tirolesa y las caminatas por la selva. Estas actividades no solo proporcionan una dosis de adrenalina sino que también permiten a los visitantes experimentar de primera mano la majestuosidad del entorno natural. El rafting, en particular, es una de las actividades estrella de Filobobos Camp. Los rápidos del río Filobobos ofrecen desafíos tanto para principiantes como para expertos, con niveles de dificultad que varían de II a IV. Guiados por instructores experimentados, los participantes pueden disfrutar de una aventura segura y emocionante mientras navegan por el río, rodeados de impresionantes paisajes naturales. Desde su fundación, Filobobos Camp. Ha sido pionero en la conservación del entorno natural de la región. Reconociendo la importancia de preservar este valioso ecosistema, el campamento ha implementado una serie de iniciativas para minimizar su impacto ambiental y promover la sostenibilidad. Una de las principales estrategias de conservación de Filobobos Camp. es la educación ambiental. A través de talleres y programas educativos, el campamento enseña a los visitantes sobre la importancia de proteger la biodiversidad y los ecosistemas locales. Estos programas no solo están dirigidos a turistas sino también a las comunidades locales, fomentando una cultura de conservación en la región. Además, Filobobos Camp trabaja en estrecha colaboración con organizaciones ambientales y autoridades locales para implementar prácticas sostenibles. Esto incluye el uso de energías renovables, la gestión adecuada de residuos y la conservación del agua. Gracias a estos esfuerzos, el campamento ha logrado reducir significativamente su huella ecológica, convirtiéndose en un modelo de turismo sostenible en la región. El impacto de Filobobos Camp va más allá de la conservación ambiental. El campamento también desempeña un papel importante en el desarrollo económico y social de Tlapacoyan y sus alrededores. Al emplear a residentes locales y colaborar con proveedores de la región, Filobobos Camp contribuye al bienestar económico de la comunidad. Además, a través de sus programas educativos y de sensibilización, el campamento promueve la participación activa de la comunidad en la conservación del entorno natural. Esto ha generado un mayor sentido de responsabilidad y orgullo entre los residentes locales, fortaleciendo el compromiso comunitario con la protección del medio ambiente. Filobobos Camp no es solo un destino de aventura; es un ejemplo inspirador de cómo el turismo puede coexistir armoniosamente con la conservación ambiental. Ubicado en el corazón de una zona ecológica protegida en Tlapacoyan, Veracruz, el campamento ofrece a los visitantes la oportunidad de experimentar la belleza natural de la región mientras contribuyen a su preparación. Consolidado como un líder en el la conservación, así como el compromiso con la protección del...
Read moreAntes que nada, este lugar se encuentra ubicado en Camino a El Encanto, Tlapacoyán, 93650 Piedra Pinta, Veracruz. Plena reserva de Filobobos. Tiene una excelente ubicación más que estratégica que da vista al valle y al río. Las instalaciones son dignas de cualquier amante del ecoturismo, si buscas un cuarto de hotel tipo Holiday inn o City express, este no es tu sitio. Pequeñas cabañas muy rusticas, donde la única de "lujo" es la número 1, el resto solo son de madera y catres, algunas con literas, en este punto hago énfasis en, deberían cambiar sus colchones y recubrimiento de las cabañas, pues su material ya no da para más, repito, si te gusta lo extremo, no tendrás broncas en estev aspecto 😂 Cuenta con alberca, estacionamiento, baños, regaderas, temazcal, tirolesa, salón de usos múltiples, pista comando, (principalmente para niños)... Y un restaurante donde si, mis respetos al cheff y el trato, fantástica comida y el servicio de lujo, me sentí en casa, platillos básicos pero deliciosos, quesadillas, sopes, frijoles, arroz, unas salsas muy buenas y café con pan de dulce muy rico. Las noches con fogata, son requisito indispensable a disfrutar. Respecto a las actividades, son varias y variadas. La tirolesa, está ubicada en la azotea del edificio principal y su acceso, aparte de peligroso, deja bastante que desear, se ve muy improvisada, pero recorriendo la primera parte y llegando a la arboleda y el tramo de regreso, la cosa mejora bastante. La alberca es pequeña pero divertida, usualmente llena de niños, enfrente del restaurante y con vista al valle. Tienen una actividad de senderismo, dentro de los mismos terrenos del campamento, lleno de exuberante vegetación, árboles frutales (café, platano, mango, naranja,etc) y petroglifos, el único defecto, es que es muy corto y no hay un camino trazado, (a los amantes de lo rústico, esto no debe tener importancia) por lo que no se recomienda para gente sin experiencia en terreno agreste, muy niños, muy ancianos o gente con niños en brazos. Los rápidos son geniales, desde la cascada que es hermosa, el trayecto en río, que inicia desde la cascada de El Encanto, pasando por las cuevas del acantilado, el puente colgante de la palmilla y termina en el poblado de Martínez de la Torre. En el trayecto se pueden observar tortugas, águilas, zopilotes, perro de agüa (nutrias) y bastante vegetación, también aquí se encuentra el mágico y carísimo "barro verde" ideal para mascarillas. Los rápidos son nivel 2 máximo 3, muy relajados pero peligrosos o sorpresivos para inexpertos o principiantes, pero muy divertidos y también hay de nivel 4 y 5, ya para conocedores y experimentados.
También el campamento cuenta con viajes guiados a zona arqueológica del Tajín, El Cuajilote y Vega de la Peña.
Muy recomendable la visita con Filobobos Camp, no me puedo quejar. se la van a pasar increíble. Pregunten por sus paquetes y diversas actividades. Me falta espacio para mencionarle todas.
Si lo que buscan es un lugar para relajarse, turistear y chapotear, libre de insectos y cualquier esfuerzo, que todo sea nuevo y bonito, este no es su sitio, de verdad abstenganse, esto es para las personas que le encanta el ecoturismo, explorar, ensuciarse, mojarse, subir, bajar y estar en contacto con la naturaleza SIN DAÑARLA.
Di 4 estrellas por que no hay 4 y media, solo por los colchones, (recomiendo catres, más económicos y fáciles de instalar y limpiar) la tirolesa que no es mala pero repito, se ve muy forzada y el cortisimo recorrido "arqueológico" Lo...
Read moreFuimos hace una semana, el lugar tiene un potencial increíble, tiene vista maravillosa el lugar en si es hermoso, sin embargo la atención es pésima, el paquete incluía desayuno y comida, el desayuno salado todo a destiempo, no firmamos responsivas, no nos dieron platica de seguridad, no llevamos un kayaquista de seguridad, las unidades en las que nos transportaron súper viejas y en mal estado, el guía no tenía la ropa de seguridad adecuada incluso nos comentó que el era el de mantenimiento del lugar, el río subterráneo por el que se pago un costo más alto fue una burla ya que ni equipo para ingresar se tenía, al salir se este el guía se tomó un líquido que traía en su botella y se puso en un estado de ebriedad bastante mal, ya que se golpeo varias veces, cuando nos atoramos en una piedra en en rio le pidió a mi hija de 10 años que se sentará en sus piernas, sin embargo intervine y le dije que no, se le comentó al dueño y el solo se disculpo y nos regreso el supuesto sueldo del muchacho 700 pesos de los 4500 que nos cobro, y nos pidió que que nos quedáramos a comer comida por cierto pésima el agua de naranja era más azúcar que agua, mi caldo de camarón con dos camarones y el caldo crudo, la mojarra de mi esposo que era frita estaba recalentado y la cecina de mi hija recalentada y dura, creo que sus disculpas y sus 700 pesos no reparan la mala experiencia que tuvimos en su negocio, espero y me lean varios para que vean que no sólo por tener un lugar bonito lo es todo, es la atención, la organización para llevar un negocio!!! Yo a la fecha sigo muy molesta por la atención recibida en...
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