El castillo de Sora, asentado en el monte Guarizo, domina el paisaje de las bajas Cinco Villas. Su construcción responde al concepto de «nidos de águilas», referido a fortalezas situadas en lo alto de cerros escarpados y casi inaccesibles. A lo largo de los siglos, esta atalaya de origen musulmán, ubicada en una posición ideal desde el punto de vista estratégico, desempeñó un papel crucial en la defensa de la Marca Superior de Al-Ándalus, formando parte del territorio gobernado por los Banu Qasi, hasta su toma por Alfonso I el Batallador a comienzos del siglo XII. Tras la toma cristiana la fortaleza quedó en manos de tenentes reales que erigieron nuevas construcciones, entre ellas una iglesia dedicada a san Miguel, quedando bajo la dependencia del monasterio de Santa Cristina de Somport. A mediados de la centuria siguiente, la fortaleza pasaría a manos de la familia Luna, que siglos más tarde se integraría en el linaje de los Duques de Villahermosa, bajo cuya posesión continúa la construcción hasta la actualidad.
En época medieval siguió ostentando un papel de gran trascendencia en los conflictos fronterizos entre Aragón y Navarra, así como en las revueltas nobiliarias contra la monarquía aragonesa. Especialmente conocido es el episodio protagonizado por Antón de Luna, quien se levantaría en defensa del derecho al trono de Jaime de Urgell frente al candidato finalmente electo, Fernando de Antequera, lo cual acabó derivando en un intenso enfrentamiento. Además de la rebelión, Antón de Luna es recordado por su relación amorosa con Violante de Luna, prima suya y sobrina del papa Benedicto XIII (el «Papa Luna»). Esta, siendo abadesa del monasterio de Trasobares (Zaragoza), se fugó y refugió en Loarre junto a su amado. No obstante, con Antón de Luna huido a Francia y tras un largo asedio, Violante de Luna se vio obligada a capitular y fue hecha prisionera en la fortaleza de Sora, siendo liberada escaso tiempo después.
El castillo fue reformado durante el siglo XVI, por don Martín de Gurrea y Aragón, quien le dotaría de una torre del Homenaje de estética renacentista. Con el paso del tiempo fue cayendo en el olvido y deteriorándose lentamente, entre otros motivos por emplearse como refugio de tropas o bandas de contrabandistas y ladrones.
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Read moreRuinas de un castillo destacado de la historia de Aragón pero en avanzado estado de ruina, sin restaurar y sin ningún tipo de acondicionamiento. Se sitúa en lo alto de un cerro sobre la carretera autonómica, regalando una visión espectacular. Solo se puede acceder por un camino serpenteante del lado norte, en una subida breve de entre 10-20 minutos, asequible en bicicleta además de a pie. Ya en el castillo, se puede acceder a la torre del homenaje, la última construída en Aragón, y visitar casi todos los restos. Cuidado con el aljibe, actualmente es un pozo...
Read moreAmazing place, you need to see if you are in the area. Drive down the track for a short distance and walk the path up. Views are...
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