Cerca de Cudillero y se llega por carreteras nacionales muy pintorescas. Increíbles vistas panorámicas, provoca quedarse horas y horas viendo y oyendo al mar, si va con tiempo y tiene buenas piernas, camine sus alrededores (mucha cautela) , lleve su cámara de fotos/video para poder llevarse a casa estos bellos escenarios. Es un paseo familiar. Me quedé asombrado cuando vi el paisaje. Es espectacular el entorno verde típico de los países Asturianos combinado con los acantilados que rodean al faro. Las visitas son espectaculares durante todo el trayecto y luego cuando llegue y vi las los acantilados me fascinó. Al ir caminando vimos el barco colocado como una escultura ( mi hijo se quedó alucinado y estuvo jugando un rato en el) q me parece original y creo que es algo tipo de zona por lo q me pareció fabuloso q lo colocaría allí puesto que describe muy bien la zona pesquera en la q estábamos. RECOMEDABLE 100X100 Me he pasado dos meses preparando rutas "en coche", para ver toda la cornisa cantábrica hacia Galicia. . . . .y el 80% de los rincones apuntados, o no los he encontrado, o los he visto mal, PORQUE NO HAY INDICADORES, eso sí, para los senderistas, caminantes de la ruta de Santiago, etc. si que dicen "cosillas", pero para ir en coche, pones el GPS, miras tus mapas, y de pronto las carreteras te dejan en un cruce sin un sólo cartel, y ya te apañas. . .¡ de pena ¡. Por ej, antes de llegar aquí, que es de 10, MIRADORES, CARTELES, TODO PERFECTO, fuimos al cabo Vidrias, isla de Deba y si no te matas, te caes, no hay miradores, no hay "na de na". Y así en 8-10 sitios mas. Lo dicho, no se merece esta maravilla de zona lo mal indicado que está todo. . .igual se hace para "proteger". ??????. Pero esta zona, es espectacular, lo normal, miradores,zona de parquing, y lo ves todo maravillosamente bien. Relajante y brutal.
Lo malo : a) 1 km aprox. antes de llegar al Faro, empieza una carretera de tierra en malas condiciones. b) No hay facilidades de baños / bebidas / alimentos. c) Si va con alguien en Silla de Ruedas, este, solo podrá ver el sitio desde las áreas de Parking. d) Es PELIGROSISIMO, hay muchas partes sin Cercas protectoras. e) Vigilancia ESPECIAL a sus...
Read moreCabo Vidio es, sin duda, uno de los tesoros más espectaculares y menos masificados de la costa asturiana. Situado en el concejo de Cudillero, este promontorio se alza imponente sobre el mar Cantábrico, regalando a los visitantes unas vistas de vértigo y una conexión profunda con la naturaleza más salvaje y auténtica del norte de España.
Lo que hace único a Cabo Vidio no es solo su impresionante acantilado, que se eleva a más de 100 metros sobre el mar, sino la sensación de serenidad que se respira en cada rincón. Desde su emblemático faro, que vigila la costa desde 1950, se puede disfrutar de panorámicas que quitan el aliento: al oeste, se dibuja el contorno del Cabo Peñas en los días despejados, mientras que al este se intuye la ría de Avilés. El contraste entre el azul profundo del Cantábrico y el verde intenso de los prados asturianos es simplemente hipnótico.
Uno de los mayores atractivos del cabo es su autenticidad. A diferencia de otros lugares más explotados turísticamente, Cabo Vidio conserva una atmósfera virgen y tranquila, ideal para quienes buscan desconectar y reencontrarse con la naturaleza. Las caminatas por los senderos que bordean los acantilados son una experiencia inolvidable, sobre todo al atardecer, cuando el sol se sumerge en el horizonte y pinta el cielo de tonos naranjas, rosados y violetas.
Además, es común ver aves marinas planeando sobre el abismo o escuchar el rugido de las olas golpeando las cuevas marinas, como la famosa Iglesiona, una gruta natural accesible solo en marea baja para los más aventureros.
En resumen, Cabo Vidio es una joya natural que combina belleza paisajística, tranquilidad y una energía muy especial. Es un lugar perfecto tanto para amantes de la fotografía como para viajeros en busca de inspiración o simplemente un rincón de paz lejos del bullicio. Visitarlo es enamorarse de Asturias...
Read moreEl Faro de Cabo Vidio, cerca de Cudillero, Asturias, es un lugar donde la naturaleza y la humanidad se encuentran en una armonía perfecta. Perchado sobre acantilados vertiginosos, este faro es un icono de belleza serena que parece sacado de una postal. Los acantilados, auténticos protagonistas, se alzan como titanes esculpidos por el mar y el viento, con sus paredes rugosas cayendo en picado hacia un Cantábrico que ruge con fuerza. Sus tonos ocres y verdes, salpicados de espuma, crean un espectáculo visual que corta la respiración.
La inmensidad del paisaje es abrumadora. Desde el faro, el horizonte se extiende sin fin, invitando a perderse en la contemplación. El faro en sí, blanco y solitario, añade un toque idílico al escenario. Su silueta contra el cielo, ya sea bajo un sol radiante o nubes dramáticas, evoca una sensación de calma y eternidad. Es un lugar para detenerse, respirar hondo y dejar que la brisa marina limpie el alma.
La tranquilidad aquí es casi tangible. Lejos del bullicio, solo se escucha el rumor de las olas y el graznido de las gaviotas. Pasear por los senderos cercanos, con vistas a los acantilados y calas escondidas, es una experiencia que conecta con lo esencial. Visitar el Faro de Cabo Vidio es descubrir un rincón donde la belleza indómita de la naturaleza y la simplicidad del faro crean un refugio...
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