A Spanish "stonehenge" has reemerged amid the country's devastating drought, officials said. The Iberian peninsula where the dolman lives is at its driest in 1,200 years, as of August 2022, with winter rains expected to diminish further, a study published by the Nature Geoscience journal stated. The historic marvel, officially called the Dolmen of Guadalperal, has only been visible four times, according to officials. Experts believe the striking circle of dozens of megalithic stones has existed since 5000 BC. However, it was first discovered by German archaeologist Hugo Obermaier in 1926 before it became flooded in 1963 due to a rural development project under Francisco Franco's...
Read moreNo suelo escribir reseñas, pero en este caso considero necesario que cualquier persona que quiera visitar este conjunto declarado Bien de Interés Cultural (BIC), debe de conocer con antelación cuáles son las condiciones de visita actuales. En mi caso, ha sido una mala experiencia, debido a la falta de información y de gestión a la que se somete el monumento. Sin duda, es muy difícil acceder, en principio, el GPS te desplaza hasta Peraleda de la Mata, sin embargo, desde ahí no es posible acceder de manera sencilla si no dispones de facilidades para hacerlo, debido a que, tienes que ir a pie unos kilómetros, además del camino de piedra, y a todo ello se suman las fincas privadas. Desde "El Gordo" no hay ninguna señal que te indique el camino para llegar al dolmen, y, es necesario reservar con antelación para poder acceder mediante un barco, de cuyo contacto tampoco se conoce un teléfono móvil, un email... En definitiva, ha sido una mala experiencia, soy una gran amante del patrimonio extremeño, pero esto es sin duda un ejemplo de mala gestión. Ojalá esta...
Read moreEste monumento es uno de los dólmenes más antiguos del mundo, con una antigüedad probable de 7.000 años. Se encuentra sumergido en las aguas del embalse de Valdecañas pero últimamente con las sequías y desembalses suele re-emerger todos los veranos. Para llegar a él sólo hay una forma sensata, ir a la orilla de enfrente (cerca de Berrocalejo) y coger un pase para ir al dolmen en barca desde una de las dos empresas que en estos momentos llevan pasajeros allí. Cruzar fincas privadas es un delito y puede haber perros vigilando. Bordear la orilla del pantano es una temeridad, buena parte del terreno son pendientes pronunciadas cubiertas de rollos de cuarcita, y el sol del verano en la zona puede freir los sesos de los imprudentes sin remedio. Pero la visita merece la pena, sobre todo para quienes sepan apreciar el inmenso valor de uno de los habitáculos más antiguos construidos por el hombre. Lástima que las subidas y bajadas de las aguas estén destrozando...
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