La "Ruta dos Muíños do Río Chanca" (ruta PR-G 172) transcurre por los municipios de Meaño y Meis recorriendo la parte más occidental de la comarca del Salnés. El itinerario asciende desde el nivel del mar por una suave y agradable subida siguiendo el curso del río Chanca hasta el Monasteiro de A Armenteira. Una senda que recorre un importante entorno natural dónde los vestigios de los viejos molinos, puentes, mobiliario y pasarelas de madera hacen del recorrido una alternativa óptima para la práctica del mejor senderismo. La senda cuenta con un desnivel de 316 m, un recorrido de 7,5 kms de longitud de dificultad baja, muy bien señalizada y calculada para ser practicada en 2h 30 minutos aproximadamente. Por el camino encontraremos más de 20 molinos, algunos completamente restaurados en los que se pueden ver el mecanismo utilizado para moler. Un caso singular es el molino de O Pontillón cuyo cubo (zona por la que entra el agua) de forma cilíndrica esta construido con aros de piedra superpuestos que son una muestra de la maestría de los antiguos canteiros. La primera mitad de la senda es muy apacible, entre viñedos que en algún tramo atraviesan el río Chanca de lado a lado. A medida que ascendemos nos adentramos en un espacio forestal, bajo la sombra de los árboles caducifolios a lo largo del río. Ya en la parte final, un muro de piedra de 4 m. de altura nos anunciará que llegamos a las posesiones del Monasterio de Armenteira, fin del trayecto o comienzo según por donde lo empecemos (yo hice la mitad, desde Lores hasta el cementerio de Simes) Es una ruta preciosa, fácil de andar, sombreada y con zonas donde descansar y reponer fuerzas. La recomiendo totalmente a los amantes del senderismo, la naturaleza y las "piedras con solera". NOTA: Si os gusta el senderismo descargaos la aplicación Sendegal de la Xunta. Es muy práctica, tiene registradas un montonazo de rutas de toda Galicia , con toda la información de cada ruta...
Read morePese a leer que la ruta no era adecuada para sillas de paseo, las fotos publicadas nos animaron a aventurarnos y nos plantamos con un bebé de mes y medio, una niña de 2 años y medio y un niño de 5.
Si bien es cierto que nos fuimos parando para hacer fotos y ver los molinos tranquilamente, la ruta es asequible para los niños. Estuvimos caminando algo más de 2h, y apenas necesitaron momentos de brazos, hombros o de descanso, aunque los hubo.
Es COMPLETAMENTE FACTIBLE llevar un CARRO DE BEBÉ en esta ruta. Apenas hay un tramo al principio de la misma en el que debes cargar el carro unos metros para superar unas escaleras de un molino, como se aprecia en las fotos, pero no hay muchos más tramos similares. Ahora bien, el carro debe estar PREPARADO PARA TERRENOS COMPLICADOS. Nosotros, por ejemplo, llevamos un Bugaboo Cameleon 3, y sin mayor problema, pero por supuesto hubiese sido más sencillo con un Bugaboo Fox.
Más allá de carros con ruedas grandes y anchas para terrenos irregulares, no recomiendo la ruta para otro tipo de carros o sillas más 'de acera', porque hay zonas más pedregosas o terrenos algo sueltos que hacen complicado el paso de ruedas pequeñas, como se puede apreciar en algunas fotos.
La ruta en sí, sin duda, merece la pena. Caminar rodeados por estos paisajes y escuchar de fondo el sonido del río Chanca permanentemente, te hace desconectar y olvidarte del bullicio del día a día.
Se puede recorrer también de noche, pues la mayoría del camino está iluminado por unas luces bastante potentes.
Muy recomendable también terminar la tarde de senderismo tomando algo en el Muiño de Daniel, una apuesta segura para...
Read moreUna ruta idílica en íntimo contacto con el ambiente rural gallego (campos de cultivo, de olivos, frutales, viñas, etc.) y con su naturaleza (arborícola de ribera, extensiones de fraga gallega con su vegetación característica).
Se asciende mediante un sendero (pendiente suave y asequible para todos los públicos) la ruta descendente que hace el agua contemplándose en el recorrido los distintos molinos de grano (algunos en un excelente estado de conservación) que en su tiempo sirvieron a los habitantes de la zona para la molienda de trigo, maíz, etc.
Algunos de estos molinos se han habilitado como lugares de restauración: un pequeño alto en el camino para tomar un descanso y tomar un refrigerio.
Otros molinos están desafortunadamente abandonados y en un mal estado de conservación pero manteniendo, no obstante, el espíritu de lo que antaño fueran.
Muy recomendable hacerla con niños y adolescentes. En algunos molinos se pueden observar aún los mecanismos (ruedas de palas, ejes, piedras de moler, etc) que hacían la función de molienda impulsados por la fuerza hidráulica cuyos canales se conservan.
Si se desea se puede llegar hasta el Mosteiro de Armenteira...
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