César. Mi esposa y yo hemos visitado hoy este lugar, del cuál ninguno de los dos teníamos prácticamente ninguna referencia, es decir, nuestras expectativas eran cero y nuestra apertura a la propuesta que pudiéramos recibir era máxima.
La visita guiada, de más de dos horas, nos la ha realizado el propio artista-dueño, al cuál estamos agradecidos de que nos haya regalado ese tiempo. Ha sido muy amable y educado. Además hemos realizado la visita en lunes, día en el que el museo está cerrado. Por lo cual estamos aún más agradecidos a d. Ricardo por su amabilidad.
El lugar es de gran valor arquitectónico e histórico y el mobiliario, una delicia, auténticas obras de arte, llenas de delicadeza, que gracias a los comentarios y conocimientos de Pecharroman hemos podido apreciar en todo su valor (las ruedas en las sillas isabelinas, los colores en las sillas traídas desde Dresde, …)
Respecto a la obra pictórica expuesta, Ricardo nos ha acercado de forma accesible para no entendidos de la evolución de las distintas corrientes del pasado siglo XX.
En definitiva, estamos agradecidos por la visita que hemos podido hacer de la mano del propio autor en un lugar bello y con gusto.
“La belleza salvará al mundo” Dostoyevski
Elena. Hoy mi marido y yo hemos descubierto una joya de la mano de D. Ricardo Pecharromán, dueño del museo del mismo nombre y autor de las obras pictóricas que en él se pueden admirar. Ha sido un placer conocer a D. Ricardo que muy amablementete nos ha guiado por la casa, contándonos su historia al tiempo que cada sala constituye un espacio de exposición de cuadros mobiliario y objetos, todos ellos de interés y ligados a la propia historia y biografía artística y profesional de D. Ricardo. Sin duda, una oportunidad fantástica para aprender y conocer, de la mano del pintor y arquitecto, su obra, así como muchos e interesantes detalles de su vida profesional en una charla distendida y repleta...
Read moreEl edificio en si, los muebles y detalles que se encuentra dentro de él, junto a las piezas del Sr. Pecharromán hacen de este museo un lugar interesante, con mucha historia y arte, además contando con la presencia del propio artista que te va explicando todo. Como detalles, hubiese agradecido que desde el primer momento se nos informase de que la visita conllevaba un coste, ya que el Sr. Pecharromán nos ofreció la visita desde unas calles previas al museo y en todo momento te hace creer que una experiencia excepcional ya que según él, no suele estar allí y que el hecho de que te haga de guía es una situación excepcional (al ver ahora los comentarios, ya veo que es más habitual de lo que el artista te hace creer en todo momento), por como te "capta" te intenta hacer creer en todo momento que es un hecho casi único y que es un artista que quiere compartir su arte y cuando ya estás despidiéndote es cuando te dice que conlleva un coste de 5€ por persona. Como podréis ver en gran parte de los comentarios no es un caso aislado, y como se lee en otros comentarios se te queda una sensación curiosa de que te acaban de estafar, yo creo que si el Sr. Pecharromán quiere evitar este tipo de comentarios (muy presente entre tanta reseña), no estaría de más que en la puerta de entrada ponga un cartel con el precio (conforme entras, no detrás de la puerta), o ya que va captando a visitantes por la calle, que informe de ello, lógicamente no está mal que cobre por ello, faltaría más, pero debería dejar bien claro dicha información. Quitando ese "detalle" a los seguidores del arte del Sr. Pecharromán (u otro arte en general) les hará sentirse en un auténtico paraíso, ya que allí podrán observar gran parte de sus obras, siendo guiado y recibiendo explicaciones del mismísimo Sr....
Read moreNo sólo una sorpresa, sino todo un gozoso descubrimiento
Reconozco mi ignorancia pero, a veces, las casualidades traen grandes sorpresas.
Durante el puente de vacaciones de Andalucía, estábamos mi señora y yo disfrutando de los pueblecitos de La Vera y en el Museo del Pimentón de Jaraíz, casualmente, preguntamos qué podíamos ver por los alrededores. Nos recomendaron acercarnos a “un museo que hay en Pasarón de la Vera”. Yo no estaba muy convencido (aunque mi señora sí ya que ella tiene más vena artística). Allí que nos plantamos por la tarde y cuál fue nuestra sorpresa de que pudimos ser atendidos profusamente por el mismo Director de la Fundación y autor de la obra pictórica Ricardo Pecharromán. Nos encantó su trato y pasión por todo lo que contenía el edificio (que ya de por sí es precioso) tanto de la obra pictórica como de la biblioteca o su peculiar y particular mobiliario. Nos contó infinidad de anécdotas y vivencias, la interpretación y simbología de algunos cuadros y la importancia de su trayectoria e influencias artísticas. ¡Qué gran memoria conserva y qué don de palabra! Pasaron más de dos horas en un santiamén y nos quedamos incluso un ratito más a puerta cerrada. Realmente no queríamos irnos porque cada frase, cada detalle, cada anécdota que compartía con nosotros era como un soplo de conocimiento y de belleza transmitido de un modo cariñoso y real. Personalmente, salí admirado del lugar y de la persona. Noté una mayor hambre de conocimiento sobre Ricardo y su espléndida obra. Fue toda una experiencia de aprendizaje y sabiduría.
Le enviamos un cálido abrazo a Ricardo de parte de un par de turistas granadinos. Celia RL y...
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