elBulli1846 — Attraction in Roses

En un rincón pintoresco ubicado al borde de la Cala Montjoi en la Costa Brava, se encuentra el museo elBulli 1846. No se trata de una simple exposición, es un viaje inmersivo y cautivador a las mentes de grandes maestros, los bullianos, que permitieron la evolución de la cocina tradicional a partir de diferentes técnicas, como la esferificación. En este museo podrás observar como la creatividad culinaria va de la mano de la historia y el arte. Te sumerges en un mundo gastronómico lleno de imaginación y modernidad, pero cuestionando constantemente al visitante sobre el origen de la cocina. Por ejemplo, ¿qué es cocinar? ¿cómo empezó la cocina? ¿pelar y cortar una manzana es cocinar? Parecen preguntas sencillas, pero a lo largo de la visita descubrirás la complejidad y los diferentes matices sobre los principios de la cocina. El museo presenta un recorrido amplio, que permite a partir de fotografías, videos y textos, tener acceso a una parte de la mente e ideas innovadoras de Ferran Adrià, Juli Soler y su equipo. Nos presentan sus proyectos, entre ellos está la metodología Sapiens, que permitió desarrollar la Bullipedia, una enciclopedia específica para la gastronomía y la restauración. Cuando pensamos en el famoso plato, Pollo al curry, la primera imagen que nos viene a la mente es el trozo de pechuga embebido en un salsa amarillo fluorescente. Esa misma imagen es la que tenía cualquier comensal al pedir el pollo al curry de Ferran Adría, pista, acababan preguntando al camarero qué plato tenían delante, que a primera vista no se reconocía. Adrià disfrutaba jugando con la mente, los sentidos y el humor de los comensales. (si conoces los platos de Ferran Adrià, sabes el aspecto completamente desestructurado del “pollo al curry”). Toda esa imaginación a la hora de construir cada elaboración queda reflejada a través de un alfabeto culinario, sí, los has leído bien, los bullianos crearon un lenguaje universal específico para la cocina. Por otro lado, en el comedor, tienes la oportunidad de ver las meticulosas representaciones de los emblemáticos platos de elBulli. A través de la magistral técnica (japonesa) sampuru, que consigue reproducir a partir de resina elaboraciones antiguamente servidas. Tengo que admitir que estaban tan bien recreadas que se te hacía la boca agua. Ah! Y para agua, la que se repartía en aquella sala, Agua de Vilajuiga, a una temperatura óptima para disfrutar de su ligero gas. Todo aquel montaje conseguía que imaginase a los comensales degustando los platos o Marketta Schilling (la antigua dueña del restaurante elBulli) observando emocionada desde la terraza del restaurante el mar de la Cala Montjoi. El punto culminante de la visita es la parte en la cual se exponen vitrinas que albergan utensilios culinarios del restaurante elBulli, cuadernos de bocetos llenos de ideas revolucionarias dejando un legado indestructible a los futuros innovadores, ya que como bien indicó el crítico gastronómico Carlos Capel, “la revolución de Ferran marcó un camino y las siguientes generaciones han continuado esa línea” . El museo elBulli1846, es una oda a la innovación e imaginación gastronómica, consiguiendo diferenciarse del resto de los museos, donde persevera la marca de Ferran Adriá: “Crear es no copiar”. Salí de este museo con un sentimiento de nostalgia al pensar que nunca probaría un plato de elBulli. Pero al mismo tiempo pensé que había formado parte del nuevo proyecto de los bullianos, de la cantidad de información que había aprendido sobre la gastronomia, las ganas de innovar en el mundo gastronómico y nunca mejor dicho de “comerme el mundo”. Su visita es obligada, no sólo por lo que fue el Bulli en la historia de la cocina, sino como un nuevo y espectacular museo de arte contemporáneo, donde los alimentos esta vez se...

I absolutely loved this place, without a doubt my favorite museum ever!

2 critiques though: 1: The video at the end, The staff kept acting like there was going to be some big special surprise at the end of the tour and you are led into this weird dome building with a bunch of screens in it. But the only thing playing inside is a short video of an interview with the chef that doesn’t even scratch the surface of what was talked about in the other sections of the museum, very big let down. 2: For the love of god, give us something edible!! There are so many opportunities to do so at different exhibits but it just never happens, very disappointing. Even in the whole room dedicated to coffee and the story of how they made “solid coffee” through an experimental technique, they just give you regular espresso??? I thought that maybe at the end in the “big suprise” room that we would get to eat, but no,...

Experiencia decepcionante en el museo

Recientemente visité el museo y mi experiencia fue extremadamente decepcionante. Me encontré con varios problemas que afectaron negativamente mi visita.

En primer lugar, realicé una reserva en línea para visitar el museo un domingo, pero la visita no se puede efectuar este día . Lastimosamente me informaron que el día hábil solo va hasta el sábado. Tuve que pagar nuevamente por mi hotel y perder un día de reserva hotelera, lo que resultó en una pérdida económica inesperada. Es inaceptable que el sistema de reserva no informe claramente sobre los días hábiles y genere confusión en los clientes. Recomiendo encarecidamente que mejoren este aspecto para evitar situaciones similares en el futuro.

En segundo lugar, la información proporcionada sobre la ubicación del punto de encuentro del autobús hacia el museo Bulli resultó ser incorrecta. Seguí las indicaciones proporcionadas en el PDF, pero terminé en una ubicación completamente diferente. Esto generó confusión y retrasos innecesarios. Es esencial que verifiquen y actualicen la información de manera precisa para evitar que los visitantes pierdan tiempo y se sientan frustrados.

Por último, los servicios sanitarios en el museo dejaban mucho que desear. No había papel higiénico y el estado de limpieza era deficiente. Esto creó una experiencia incómoda y desagradable. Como visitante, esperaba que se brindara un adecuado mantenimiento y abastecimiento de los baños para garantizar la comodidad de los visitantes. Es decepcionante encontrarse con este nivel de descuido en un lugar público.

En resumen, mi visita al museo fue una experiencia frustrante debido a problemas con la reserva, la información incorrecta y la falta de atención a los servicios sanitarios. Espero que tomen medidas para mejorar estos aspectos y brindar un servicio de calidad a...