Las primeras noticias de Segura de León datan del último tercio del siglo XIII, enseguida sirve de sede a una Encomienda de la Orden de Santiago, luego elevada a rango de Encomienda Mayor. Posiblemente los elementos más antiguos se remonten al siglo XIV, pero no será hasta el siguiente cuando aparezcan los primeros datos documentales precisos, concretamente correspondientes al tercer cuarto del siglo XV cuando el entonces Comendador Mayor Don Alonso de Cárdenas acomete la construcción de una nueva barrera, la torre redonda del ángulo nororiental y el baluarte de la puerta principal, obras que continúa en el último cuarto del siglo Don Cutierre de Cárdenas, que le sucede en el cargo. El castillo es un volumen de grandes proporciones que adopta la planta irregular a que obligan los accidentes topograficos del terreno en que se asienta, reforzándose algunos de sus lienzos con cubos semicilíndricos y con torres prismaticas y otras redondas. La puerta principal se abre en el flanco meridional, protegiéndose en lo alto con un matacán y en los lados con la torre de los Alcaides, prismática, y la de Miramontes, cilíndrica y algo alejada. El volumen más prominente lo constituye la torre del homenaje que se eleva en el ángulo noroeste, realizada según su aspecto actual a partir de 1515, aprovechado los restos de la primitiva torre medieval. En el interior del recinto murado se construyeron sucesivos edificios para atender a las necesidades residenciales, administrativas y domésticas del castillo, algunos de ellos ya desaparecidos, manteniéndose aún adosado en el lado de poniente, tras diversas restauraciones y obras de consolidación, el llamado cuarto de Garcilaso, construido durante los primeros años del siglo XVI, en tiempos del comendador García Laso de la Vega, de quien recibe el nombre. Aquí manifiesta su atractivo y su vinculación con artífices mudéjares la galería porticada, recientemente rehecha, y la capilla, en la que todavía se ve su bóveda de crucería estrellada y plementeria de ladrillo, así como dos ventanas geminadas enmarcadas en alfiz, con arcos túmidos y fino mainel...
Read moreCastillo roquero típico: se encuentra en lo alto de un monte, rematando una gran roca que se encuentra en la parte más alta del mismo. Carece de barbacana, aunque en algún momento se construyó un pequeño muro que protegía en cierta manera el flanco norte, del que ya solo queda la base de la cimentación. El resto del conjunto se mantiene en un estado francamente bueno. Nada más entrar a la izquierda están las llamadas mazmorras, aunque más bien imagino que su uso real sería el de almacén, debido a su forma irregular y a la ausencia por lo general, de mazmorras en la mayor parte de castillos medievales. El interior consta de un gran patio de armas en desnivel y dos edificios relativamente modernos en el flanco oeste (el antiguo colegio, ahora cerrado tanto a este fin como al turismo, y el otro contiene una pequeña capilla y un museo de arte local). Dentro de la pared este, se pueden apreciar dentro del propio paño tres balconadas con asientos en su interior a las cuales no se puede acceder (resulta que se edificaron viviendas justo sobre los antiguos establos, y estos al no tener la estructura para sostener otro piso, se vinieron abajo junto con la edificación superior). En el patio, cerca de una puerta que da paso a una especie de mirador, se encuentra el aljibe, totalmente sellado por una tapa de metraquilato. Cerca está la torre del homenaje, cuya planta inferior cuenta con una exposición de losas con epigrafías medievales. La el nivel 1 de la torre se ha musealizado como despacho del comendador y la planta superior o terraza, es accesible, dando las mejores vistas del castillo. Así mismo se puede pasear por toda la longitud del adarve o paseo de ronda (curioso que algunas torres menores tengan lo que parecen tiros de chimeneas). La mayor parte de las zonas de interés tienen código QR con audioguía tanto en español com en inglés. La chica de la puerta muy amable y predispuesta a responder a cualquier duda o pregunta. Merece una segunda visita, esta vez con guía. Editado por fallos...
Read moreMUY BIEN CONSERVADO, Y A DESTACAR SUS VISTAS...!!!
Castillo de planta irregular, muy bien conservado,construido por la orden de Santiago entre los siglos XII-XVII, con varias remodelaciones. Destaca su patio mudéjar en el que encuentras dos aljibes,y torre del homenaje...
La subida a la torre tiene inicialmente unos perdaños muy grandes, con una contrahuella muy alta y un poco complicados de subir, aunque te puedes ayudar de una cuerda colocada en el lateral como pasamanos...merece la pena subir para contemplar las vistas. Como curiosidad, en la torre del homenaje encontrarás un vértice geodésico...
La visita es libre, y en la entrada te dan explicación de la historia del castillo. El horario es de 12:00-14:00 los sábados y domingos.
Junto a la entrada, encuentras la capilla y mazmorra.
Tiene una leyenda de una dama berberiscas encantada, que tiene que contar todas las estrellas cada noche para romper el encantamiento, y al no poder terminar de contarlas, sigue rondando las almenas del castillo.
Otra curiosidad, es que el padre de Garsi Lasso de la Vega, fue comendador mayor en este castillo, y mando construir instalaciones entre 1504-1512.
El castillo ha tenido varios usos, entre ellos colegio.
Si tienes suerte, puedes aparcar en la misma entrada del castillo, hay unos cuatro aparcamientos, y en la calle que llega al castillo, normalmente encuentras aparcamiento, si no en la plaza que es bastante más complicado....
La entrada es gratuita...
Volveremos, sin duda...
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