Museo interactivo, que abarca campos diversos, como geología, oceanografía, química, etcétera. Perfecto para familias, aunque puede ser demasiado denso para niños menores de cuatro o cinco años. Aunque parece orientado al público infantil, es más adecuado para adultos. Tiene opción de visita guiada, que incluye varios talleres; de geología, con serpientes y en el planetario. Demasiado técnicos si acudes con niños muy pequeños, que de seguro se aburrirán con las charlas. A todo ésto contribuye la falta de especialización del personal, quienes a pesar de su empeño, se nota que carecen de la formación y las habilidades necesarias para hacer la visita accesible y entretenida a todos los públicos. La cantidad y calidad de información que abarca es muy interesante y entretenida, especialmente las muestras reales que tienen en exposición, desde minerales a fauna marina. Sin embargo, el mantenimiento de las instalaciones es muy mejorable, pues hay zonas bastante sucias o descuidadas, como la falta de jabón en los baños, por ejemplo. Como aspecto muy negativo que empañó nuestra visita y la de otros, el encargado del taller de serpientes. Éste individuo llamó la atención durante su charla a una familia, porque su niña de aproximadamente tres años ocasionalmente hablaba durante su discurso, llegando al punto de obligarles a abandonar la sala. Como profesional de la formación, con más de 10 años de experiencia a mis espaldas, jamás he tratado así a nadie. Menos aún se me ocurriría expulsar a alguien de una de mis clases o charlas, recurso propio de modelos educativos ya desfasados. Me parece una actitud deplorable, fuera de lugar en un museo familiar, propia de una persona con un ego desmedido, que disfruta con el olor de sus propios pedos. Trató de justificar su falta de paciencia y dotes divulgativas en que advertían de ello cuando haces la reserva. En mi caso, nadie nos avisó de nada, y mucho menos, de que partes del museo o de la visita implicasen que los niños no puedan hablar. Debe quedar claro que no me refiero montar jaleo. Nadie se comportaba de forma inadecuada, tan sólo hablaban ocasionalmente. Considero que su actitud queda más en evidencia cuando el resto de personal que se ocupó de la visita guiada, fueron pacientes y trataron de manejar la situación y mantener la atención y el interés de los...
Read moreUn viaje mágico….
Desde el primer instante en que cruzamos las puertas del Parque de la Vida, sentimos que nos embarcábamos en un viaje único, un relato que nos conecta con el universo mismo. Todo comienza con la idea de que alguna vez fuimos polvo de estrellas, una chispa de materia en el vasto cosmos, y poco a poco nos adentramos en la historia de la Tierra, desde sus primeros instantes hasta la majestuosa era jurásica. La inmersión en el pasado es fascinante: fósiles, dinosaurios y criaturas que alguna vez dominaron el planeta nos hacen reflexionar sobre la inmensidad del tiempo y la fragilidad de la existencia.
Sin embargo, el parque no se detiene en el pasado. Nos guía a través de la evolución, de la aparición de la humanidad y, sobre todo, de nuestra responsabilidad con el mundo natural. La ecología cobra vida en cada rincón, mostrándonos la belleza y complejidad de los ecosistemas, el impacto del ser humano y la necesidad de proteger nuestro hogar. Mis hijos estaban completamente cautivados, con los ojos brillando de asombro ante cada descubrimiento.
Y cuando creíamos haberlo visto todo, llegó el momento más especial: la visita del dueño del parque. Un hombre sabio, apasionado y con una visión de la vida que nos dejó sin palabras. Sus enseñanzas fueron mucho más que una simple charla; nos tocó el alma. Habría podido escucharlo durante horas, reflexionando sobre la naturaleza, la vida y nuestra conexión con todo lo que nos rodea. Fue un instante de aprendizaje profundo, que sin duda dejó una huella imborrable en todos nosotros.
Pero la gran guinda del pastel llegó al final, cuando nos sorprendieron con algo totalmente inesperado: serpientes utilizadas en terapias para tratar fobias. Fue un momento mágico ver la reacción de mis hijos, la fascinación y el respeto con el que se acercaban a estos animales, rompiendo miedos, aprendiendo y explorando sin prejuicios. Ver cómo la educación y la experiencia pueden transformar la percepción del mundo en los más pequeños fue algo que me conmovió profundamente.
Me fui con el corazón lleno, con la certeza de que este lugar no es solo un parque, sino un portal hacia el conocimiento, el respeto por la vida y la conexión con nuestro entorno. Necesito volver. Porque experiencias como esta no solo se viven, se...
Read moreEl recinto es casi completamente al aire libre,ideal porque puedes ir con tu mascota. Cuando llegamos ponía que había que reservar,llamamos a un número de teléfono y nos abrieron la puerta y sin problema nos hicieron la visita guiada una hora después. Para los niños puede que se les haga un pelín larga pero es que hay mucho que ver allí. Respecto a la visita libre: Es un sitio bastante peculiar, todo marcado con flechas para seguir el camino e inciden mucho en que no se puede salir del camino.Al estar al aire libre pues se nota que la climatología hace mella en algunas cosas que exponen. La visita guiada fue muy didáctica,ibas recorriendo diferentes salas,el guía lo hace excepcionalmente bien,aparenta que disfruta de su trabajo y eso es un plus.Incluso tienen un planetario. Ves desde como se creó la tierra,la vida en ella,la evolución de los animales,la evolución del ser humano,hasta el espacio,incluso tienen una réplica de un cohete a la que accedes en la visita guiada. Hasta aquí muy bien pero... Lo peor:al finalizar la visita te meten en una sala donde lo que te encuentras es a un señor hablando sobre salud mental con frases bastante inapropiadas queriendo imponer su verdad,todo esto te lo tragas para poder ver unas serpientes que te sacan para poder tocarlas y al finalizar regalan un fósil a los niños. Sinceramente creo que de lo que no se sabe no se puede opinar y menos dar una charla sin pies ni cabeza,una persona que no está especializada en ello. No se puede hablar de salud mental a la ligera,y menos hacer comentarios sobre el público que se levanta y se va a mitad de la charla obviamente porque no les apetece aguantar lo que esté señor expulsa por su boca. Te llevarás muy bien con astronautas,políticos,científicos o familia de...pero no creo que les muestres la cara que vimos el otro día en la charla. Si no llega a estar este señor tranquilamente se le pueden poner...
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