Simplemente espectacular.
Una visita obligada en Asturias. El paisaje es de una belleza espectacular, para llegar hasta la primera cascada que es la mas visitada no hace falta nada mas que llevar un calzado cómodo, pues está a escasos cinco minutos caminando desde el pueblo donde aparcar el coche, es una ruta corta y sin dificultad, para llegar hasta la segunda cascada, que por cierto no está señalizada, hay que bajar una zona empinada y bastante resbaladiza así que que recomiendo ir un poco mejor equipado aunque supone solo unos 10 minutos mas de caminata, merece la pena ya que es aún mas bonita que la primera.. En el pueblo hay un par de bares donde tomar algo. Para llegar desde Navia tardaremos unos 25 minutos, cogemos dirección Villayón, todo el camino es carretera de curvas y no hay señalización de las cascadas, es la carretera AS-25 y pasando Arbón a un par de km desviarse en una carretera empinada a la izquierda hacia Villartorey, encontramos una señal de Oneta, desde ahí la siguiente a la derecha y llegamos al pueblo donde ya está el panel de la senda. Es una senda tranquila y nada peligrosa, así que ideal para ir con niños y mascotas. Visitamos la primera cascada y comimos al lado del río mientras mirábamos y oíamos el agua de la cascada caer. Un verdadero lujo.
En el Pueblo de Villayón sale esta sencilla ruta lineal, podemos encontrar un parking para dejar el coche y a la vuelta tomar una merecida cerveza muy cerquita del parking.
La ruta nos puede llevar desde una hora hasta el tiempo que deseemos invertir en disfrutar del paisaje o hacer fotos
Es de dificultad baja, si bien la bajada hacia la segunda cascada puede complicarse con algún resbalón en días en los que el terreno esté mojado por la lluvia.
En días de calor llevar y dejar en el coche una prenda superior de repuesto, por la sudada debido a la humedad Impresionante cascada la primera. Las otras dos son más normales. El acceso no es fácil ya que hay que subir y bajar por unos estrechos caminos en pendiente pero merece la pena el esfuerzo. Mejorar algo los accesos estaría bien y no dejar todo a la madre naturaleza. El aparcamiento en el pueblo de Oneta también necesita una buena adaptación. Se echa en falta un bar abierto en el pueblo para descansar y tomar algo. Existe un llamado Albergue pero no siquiera estaba abierto en las horas de fin de semana que decía el cartel de la puerta. Tantos años oyendo hablar de estas cascadas y por fin decidimos india visitarlas la verdad que si mucha gana. Cual fue nuestra sorpresa cuando la ruta hasta llegar a ellas además de ser muy corta es de muy fácil acceso. Las primera de las cascadas está muy cerquita del inicio de la ruta mide aproximadamente unos 20 m y tiene una caída impresionante , En el fondo se forma un pozo donde nos mojamos los pies. Si hubiésemos llevado ropa apropiada, nos hubiésemos dado un buen chapuzón. Continuamos descendiendo y llegamos a la segunda de las cascadas. No menos impresionante que la primera. Eso sí, algo más escondida. intentamos llegar hasta la tercera pero fue imposible. Tras cruzar varias veces el río vimos que el camino se complicaba y una culebra se nos puso por delante decidimos entonces...
Read moreThe first and the second waterfall are very beautiful and very high, the first one is easy to reach, the second is still fine. We tried getting to the third cascade mentioned but after a while we gave up and we are not sure if there is any or if it is just a myth. Ponds are not good for swimming since they are not very deep.
Edit: the very nice lady in the local restaurant said that there is a third one, about 1.5 km after the second cascade, but...
Read moreComenzamos nuestra ruta en la localidad de Oneta, en el concejo de Villayón. Desde Oneta el camino que nos lleva valle abajo hacia la zona de las cascadas está perfectamente señalizado. Pronto empezaremos a escuchar el río Oneta, que discurre paralelo al camino hasta las tres cascadas. Cerca de los restos de un molino podemos ver la parte alta de la cascada de Firbia. Si nos acercamos que sea con mucha precaución.
Poco después, la ruta se transforma en un camino que poco a poco se adentra en el bosque de castaños, abedules, alisos y robles. Pronto llegaremos a la primera cascada, la de Firbia algo más de 20 m de caída, un espectáculo para nuestros ojos. Seguimos la ruta de las cascadas pasando ahora por uno de los molinos, el Molín de Abaxo, data de 1820. Poco después de dejar la Firbia vemos el cartel indicador de la cascada Ulloa. Aumentativo de Olla: lugar donde se precipita el agua. El último tramo es algo más complicado pero se hace sin esfuerzo. Es algo más pequeña pero igual de bonita, su entorno está repleto de musgo, fresnos y alisos. Un lugar ideal para relajarse escuchando el sonido del agua y la naturaleza. Aunque son tres cascadas la tercera, Maiserúa, no la realizamos por su dificultad para encontrarla. Distancia 3,66km ida y vuelta. Tiempo, 1 h aunque se puede alargar hasta las dos por lo entretenida que...
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