CRITICA SINCERA, nos alojamos 2 noches.
Lugar y propuesta muy original, emprendimiento familiar. Solemos visitar muchos lugares por la zona y vemos que este lugar que se propone para alojamiento de adultos y parejas deja bastante que desear en varias cuestiones que tienen que ver con justamente el alojamiento de gente grande....
Los utensilios de los apart son breves, no hay sacacorchos, ensaladeras, tablita para asado, cuchara sopera o copas. Es bien básico y si te los prestan pero hay que ir a pedirlos...no te ofrecen, No es cómodo eso...
Si se quiere cocinar un huevo hervido no se puede porque no hay anafe, tampoco microondas. Si querés hacer un asado, no hay nada, ni cuchillo, nosotros tuvimos que pedir, Pero tampoco se avisa que la modalidad es estar pidiendo estás cosas...
La habitación impecable de limpieza y la decoración con buen gusto, realmente un 10!
Cuando subimos a la terraza para hacer el asado mediante la escalera caracol del faro (algo peligrosa para personas mayores, tener en cuenta eso) el abastecimiento del asador se reduce a una mesa tipo tablón y dos bancos largos, hay sillas con el respaldo quebrado...es decir que si uno quiere contemplar la hermosa vista (soñada) no estás muy cómodo como para permanecer...
Igualmente vimos que si de las 6 habitaciones un par coincidíamos en hacer asado, alguien se quedaba sin mesa... No hay Bacha ni elementos para poder estar cómodos realmente....
Otra sugerencia que no costaría nada y sumaria un montón, sería dejar en cada habitación/apart detalles simples por ej. Un poco de azúcar/edulcorante te y café.
Relación precio-calidad : Alto para lo ofrecido
Ojalá que está crítica constructiva sea bien recibida ya que esa es nuestra intención, en un lugar evidentemente pensado y hecho familiarmente con mucho amor y que esperamos que prospere...
Sería bueno tener en cuenta a los clientes, no es cómodo estar subiendo y bajando el faro por un sacacorchos que al parecer solo tienen uno y el dueño te manda a buscar..., un poco raro ese momento...
Para venir máximo 2 noches y que haya...
Read moreBellísimo el lugar. El paisaje es maravilloso. Los departamentos son muy cómodos. Faltarían pequeños detalles que si vas varios días son necesarios, como algunas cositas de la cocina, si no querés gastar en el comedor y prepararte algo en el dpto. La tv. Es un plasma hermoso pero no tienen cable. No ves más que canal religioso, canal encuentro, tv. Publica, y Paka Paka. Los que vamos con niños, estaría bueno algunos juegos de plaza, hay lugar para ellos, sin molestar a los demás huéspedes. La comida del comedor es muy buena. Los desayunos, están buenos, pero, quizas, por innovar en ellos no cuentan con lo que suele consumir uno en desayuno, como chocolatada, o mate cocido. En la cocina del dpto te dejan un poco de café instantáneo, y te común o de sabores, personalmente, yo no consumo te, prefiero el mate cocido. El desayuno es un vasito ,(por persona,obvio) como el de soda que acompaña al café en bares, con jugo natural, y otro de yogur, o, como nos pasó a nosotros, nos llevaron el jugo natural y un vasito de igual tamaño al jugó con un colchón de frutas y yogur natural, esto último no lo consumimos porque no nos gustaba. El caso es que pagas el hospedaje con desayuno, y quizás estaría bueno, preguntar las preferencias de los clientes,para que estos disfruten del desayuno completo y sin desperdiciar nada que no es de su agrado. Lo bueno es que en el, te sirven citas saladas y dulces para comer y una excelente presentación. Es atendido por sus propios dueños, y eso es meritorio. María es divina. Resumiendo, lo recomiendo para parejitas solas, o parejas con hijos grandes. Es más bien un lugar pensado para más grandes, no para parejas con niños, porque puede que sean odiosos algunos comentarios, y como que te tiene los ojos en la nuca cuando vas con menores, que no son adolescentes. Si van con la idea de disfrutar de la paz de las sierras, se encontrarán con un lugar bello. Si van con planes de pareja que quieren tomarse un tiempo para ellos...
Read moreA Lighthouse Stay Full of Soul Truly One of a Kind
This family-run hotel, set in a lighthouse in the middle of Argentina (yes, over 1,000 kilometers from the nearest sea), is without a doubt one of the most unusual and unforgettable places I’ve ever stayed.
The views are stunning, the rooms are spotless, and the food is excellent and fresh, homemade, and full of heart. The warmth and hospitality of the family who runs it make all the difference.
If you’re in search of somewhere special...something far from the generic, soulless hotel experience....stay here. It’s a place with character, comfort, and a story you’ll...
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