Our five night stay here was tremendous pretty much all down to Hans. The room was comfortable, really smart bathroom, private outside area looking over the vines. The air con was very efficient and the fridge in the room a nice touch. The breakfast buffet was plentiful and we ate at the restaurant twice, we hadn’t booked but Hans and his staff still fitted us in, the evening menu was very good value indeed. We hired the bikes and used the pool and met a number of other guests. I’m sure there are other wineries in the area with plush velvet furniture, Egyptian cotton bedding and uniformed concierges but I wouldn’t swap. Our bill was honestly too cheap. We had a minor problem on our holiday and Hans stepped in and sorted this for us. There are so many wineries close by for tastings and for meals and the nearby town is a bonus for picking up supplies. We...
Read moreCharming place, just a few rooms set in this small vineyard. The place is well kept and our room was large, with basic furnishings. The bathroom was good. Lovely having a terrace opening onto rows of vines. Their restaurant does a three course evening meal for 770 pesos. Reasonable quality, which is good since there is nowhere else nearby. They have a garden with a small pool, while is a most welcome sight at the end of a hot day. The Belgian owner speaks excellent English and is very helpful.|You can easily walk to number of bodega for wine tasting. You can borrow their bikes and cycle to many more on quiet roads or dedicated...
Read moreComo cada vez que uno llega a un nuevo lugar, lo hace lleno de expectativas y temores. Ni hablar cuando el lugar parece estar situado en un lugar remoto... alejado de la civilización. Nunca me alegré tanto de estar terriblemente equivocado. La primera vista de la Posada, desde el camino y a la carrera me gustó, simple pero bien cuidada. En cuanto un enorme pastor inglés (Tommy) me recibió con alegría y atención indicándome dónde debía estacionar supe que estaba en el lugar correcto. Un corto recorrido, cortesía del mismísimo dueño, Hans, fue suficiente para que nos enamoremos del lugar. Tres habitaciones de estilo campestre, limpias y bien arregladas conforman los dormitorios; un acogedor comedor y la cocina completan las comodidades del lugar. Ahora, cómo explicar sólo con palabras las virtudes de este sorprendente posada. Mientras escribo estas palabras, en el comedor junto a una estufa a leña, los sonidos lejanos de un tango envuelven mis sentidos y me acompaña una manzana al horno con dulce de leche, delicia recién preparada por Alina, la mujer de Hans. De más está decir que si todo esto ocurre después de haber comido un asado que raya lo sublime, acompañado por un vino de etiqueta propia, cómo olvidarlo y cómo no saludar tan sincera atención. Pero no es suficiente hablar de la primera impresión. Por lo general, todos necesitamos de una confirmación, como para asegurarnos de no haber sido demasiado optimistas con la evaluación inicial. Para nosotros, el desayuno cumplió las veces de certificación. Verlo entrar a Hans ni bien la luz se hace presente, con un pan casero en una mano y leche fresca en la otra es como surrealista. Su mujer, Alina entra unos segundos después y juntos preparan un desayuno digno de hoteles que no voy a nombrar, fresco, casero, abundante y exquisito. En resumen, Cavieres no sólo es un sitio para visitar. Es una experiencia...
Read more