Cabañas Trudy — Hotel in Tandil

Nuestra experiencia en esta cabaña fue realmente decepcionante. Al llegar, nos encontramos con un espacio sucio, lleno de telarañas en el techo y polvo acumulado en todos lados. Cuando intentamos hablar con la dueña sobre estos problemas, se limitó a justificarlo diciendo que era "nuestra perspectiva" y que en las sierras era "normal" encontrar bichos y polvo. Incluso nos sugirió que, si no queríamos lidiar con estas condiciones, deberíamos alquilar un departamento en la ciudad.

Además, los cubiertos estaban claramente usados, con restos visibles, las vajillas estaban sucias, y no había utensilios básicos para cocinar. Desde el primer momento tuvimos que ponernos a limpiar y sacudir las sábanas para poder pasar la noche. Las toallas no se pudieron usar porque tenían un olor desagradable.

Faltaban cosas esenciales para poder estar cómodos, lo que nos obligó a salir a comprar artículos básicos. A pesar de manifestar nuestros problemas, la dueña no ofreció ninguna solución y dejó claro que no devolvería el dinero.

Finalmente, decidimos irnos de la cabaña tanto por el mal estado del lugar como por la actitud grosera de la dueña, además del temor de que algún bicho entrara por el hueco visible en la puerta principal.

Estos son detalles que deberían tomarse en cuenta al ofrecer un hospedaje. Yo vivo en una montaña y sé perfectamente que eso no justifica tener un lugar sucio. Si la dueña no puede mantener la cabaña limpia, debería contratar a alguien que lo haga. Por el precio que cobra, esta cabaña no vale la pena. En Tandil hay opciones mucho mejores, más limpias y...

Fui con la intención de disfrutar unas vacaciones relajantes, pero la experiencia estuvo lejos de ser placentera. Según Trudy, la cabaña había sido limpiada, pero era evidente que no era así. La suciedad era visible en varios lugares, y me vi obligada a limpiar los espacios que iba a utilizar, algo totalmente injusto considerando que estaba pagando para descansar, no para hacer limpieza.

Las vajillas estaban cubiertas de polvo, el polvorín por toda la casa, las telarañas, retos de bichos, el olor de las toallas, cuando le comenté esto a Trudy, su única respuesta fue que era "parte de la experiencia de las sierras". Este comentario es inaceptable. Vivo en una zona montañosa y sé perfectamente que esto no justifica la falta de higiene.

Por otro lado, las condiciones de la cabaña reflejaban una falta de inversión por parte de la propietaria. Si va a cobrar por el alojamiento, lo mínimo que debería hacer es garantizar un espacio limpio y bien cuidado.

No recomendaría esta cabaña a nadie que busque una estancia cómoda...

Es una cabaña alejada del centro. La vista es excepcional, bosque de un lado, sierras del otro. Trudy, la anfitriona nos esperó con un budín casero riquísimo. Tengan en cuenta que no es un apart hotel, no tiene servicio de limpieza ni desayuno incluido. La cabaña es de una sola habitación amplia. El jardín es hermoso, con frutales y mucho lugar. Fuimos con nuestras dos perras medianas, la anfitriona no tuvo ningún problema en aceptarnos con las perras que pudieron disfrutar corriendo y jugando mientras nosotros desayunamos en el jardín. La casa estaba limpia, pero recuerden que está al pie de las sierras, durante el día entra tierra. Está bien calefaccionada y con agua caliente para ducharse. Sin dudas volveríamos porque nos recibieron muy bien y la...