Posada del Páramo — Hotel in Cundinamarca

Si están buscando un lugar para desconectarse de la ciudad, del caos y de la cotidianidad sin duda es más que acertado. Al llegar es posible escuchar los sonidos de la fauna característica del bosque alto andino y muy próximo si el objetivo es realizar una caminata hacia el sendero lagunas de siecha en Chingaza.

La atención desde antes de llegar es más que buena, puesto que, están pendientes de cada detalle.

La comida tiene un sabor y una cocción excepcional, solo quizá el tamaño puede ser justo si es una persona que consume porciones grandes, pero nada que agregar a la variedad en el menú de comidas, la hospitalidad de la señora Mercedes quien de manera personalizada verifica que todas las necesidades estén en orden.

Tener en consideración que la conectividad no es muy buena y gran parte de ello sucede por factores climáticos que pueden estar fuera de control de las instalaciones.

Sin duda volvería y lo recomiendo.

Pdta: el estado de la vía puede verse deteriorado si las precipitaciones son muy elevadas por la fecha, de lo contrario es transitable pero no recomendaría...

Habitaciones: nos tocó una habitación muy amplia y cómoda, con una especie de balcón cerrado con una vista preciosa. La posada tiene mucho carácter y espacios muy confortables. Solo anotaría que la conexión a internet no funciona bien en la habitación. Servicio: Aunque la anfitriona no tuvo ayuda mientras estuvimos allí, el servicio fue impecable. Ella es una persona muy culta y con buen sentido del hosting. Muy buen desayuno, buena comida en general. Como característica especial, hay una biblioteca en la posada. Ubicación: Queda en zona rural y hay que subir a unos 3.200 metros. Por supuesto la vía es destapada pues se trata de una reserva natural. La zona aledaña es bosque andino. Muy bello. Con senderos para caminar y una corriente de agua. Pude ver muchas aves y animales...

Lo bueno: la atención por Ana la dueña es excelente, la casa es realmente hermosa junto con todo lo que hay al rededor. Muy cuidada, limpia y caliente para el frío de la zona. La comida es muy, muy buena con opciones para vegetarianos si es que alguien lo es. Las habitaciones preciosas, amplias, cómodas. Lo malo: la via desde Guasca son 12 kilómetros no paviemntados, aunque la vía tiene un estado aceptable para carros bajos. No tendría inconveniente para camionetas. Lo feo: el trayecto desde Guasca puede ser un poco incierto ya que hasta que no estás cerca al hotel no hay señalización de cómo llegar al hotel, el Google maps puede fallar un poco. Bueno todo tiene solución que es preguntar muy bien como llegar a Ana o preguntar por el camino como...