Bed and Breakfast Campestre El Estoril — Hotel in Fusagasugá

La atención fue muy buena, súper atentos siempre. Las instalaciones son campestres y amplias, punto positivo ya que las conversaciones o ruido de unos no interfiere con otros. Me encanta la idea de poder asar masmelos. La comida es rica, las porciones son muy generosas y considero que el precio de la comida es acorde con el tamaño del plato y el sabor… (hummm la rellena no es muy rica). algo que deben mejorar es el tema de los baños, solo hay uno para damas y generalmente está ocupado siempre… el lavamanos está dentro del baño y por eso tampoco se puede usar. Por lo demás lo recomiendo. Nos ayudaron con la decoración de cumple, el precio fue extra pero nos pareció muy cómodo a comparación de otros negocios en los que cobraban más y no tenían torta… aquí la decoración + torta para 7 personas costó 78.000 pesos. El presupuesto por persona es de...

Lastimosamente los anfitriones se quedaron mentalmente atendiendo un hogar geriátrico y no lo que es ahora que es un hotel. La hora del desayuno muy restringida tanto en horario como en variedad. No hay opcion de almuerzo ni de cena y el servicio de snacks y bebidas cierra temprano. El check out de la mayoría de hoteles es a la 1pm, en este hotel fue a las 11am, aduciendo que les llegaría un grupo de personas mas grande por lo que necesitaban las habitaciones (como si el dinero el tiempo de uno no valiera). Los baños de las habitaciones con fugas y adicional sin agua caliente. En cuanto al servicio al cliente, sugiero un poco más de amabilidad y carisma pues en algunos momentos los anfitriones lucían disgustados en...

Pésimo. Este es el término más apropiado para describir la atención y la presentación de este lugar. Las personas con que logré establecer contacto se mostraron groseras y desatentas, sin el menor interés por atender al cliente. No sé cómo puede funcionar un negocio con personas que no no muestran interés por el otro. Además, las instalaciones están descuidadas. En resumen, si necesitan alojarse en Fusagasugá, nunca se les ocurra...