El Ensueño EcoHostal & Glamping — Hotel in Mocoa

Viaje a inicios de enero para vacacionar con mi novia y su familia. Tuve la fortuna de encontrar este hostal en internet y conseguir la reserva directamente con ellos. Desde que llegamos hasta que nos fuimos, sentí que era la mejor atención de mi vida.

Nos quedamos en la habitación Llave de luz —la cual recomiendo para parejas—. Recién estábamos acomodando nuestras pertenencias, cuando nos ofrecieron dos copas de vino, como forma de celebrar la llegada. Era un vino delicioso, a mí pareja y a mí nos encantó. También nos ofrecieron un recorrido por toda la propiedad, en el cual pudimos observar y escuchar de primera mano todas las posibilidades que ofrece El Ensueño.

En cuanto a la comida, la dueña siempre estuvo al tanto de ello, nos ayudó pidiendo a los restaurantes aledaños. En nuestro caso, no manejábamos dinero en efectivo y ella nos ayudó a gestionar los pagos.

Durante la primera noche, le comentamos que queríamos fríjoles —soy muy paisa como para ir a Mocoa y comer fríjoles, lo siento—. Lastimosamente, no los pudimos conseguir. Sin embargo, al día siguiente, ella nos vino a decir que en la propiedad harían esa misma comida para el almuerzo: todo estaba tan rico que apenas si podíamos decidir qué nos gustaba más. Fueron unos fríjoles riquísimos y tanto mi pareja como yo quedamos encantados.

Pero devolvámonos una comida, al desayuno. Este vino incluido con nuestra habitación para los dos días que reservamos. No tengo ni palabras para describir la experiencia: quizás, rico, fresco, bien presentado, porciones apropiadas —incluso, un poco más de lo que suelo comer habitualmente—, y, sobre todo, ameno. Creo que será una parte clave en su visita.

En el último día pudimos probar la semilla milagrosa, la cual sirve como reemplazo del azúcar. Espero que tengan esa oportunidad, por lo que no les dañaré la sorpresa. Además, nos enseñaron algunas aves y los primates que rondan por la finca. Una lástima que mi miopía no me dejara disfrutarlos, pero mi pareja los pudo observar plenamente. Ahí nos recomendó el dueño una aplicación para identificar aves, estuve probándola en la finca y es increíble.

El bar de la habitación también es bastante completo. Suelen reabastecerlo cada día luego de la limpieza. Los costos no son altos, como ocurre en muchos lugares. Nosotros comimos una cantidad ingente de mecato y aguas y la tarifa final fue de 22 000 pesos.

En la habitación hay champú y jabón, así como dos toallas para el cuerpo y una para secarse las manos. Nota para aquellos viajeros extranjeros: en Mocoa el agua no es potable, así que consideren eso al momento de llegar a la zona, sea en el Ensueño o en otro lugar.

También les recomiendo el sendero ecológico, a través del cual podrán conocer zonas maravillosas cerca al hostal y maravillarse con cascadas y paisajes maravillosos. Vayan con ropa cómoda, es probable que se caigan o se mojen todo en cuerpo, sobre todo si ingresan a los ríos en los cuales están las cascadas. A nosotros nos acompañó el dueño, quien nos iba contando detallitos durante el trayecto.

La piscina es hermosa. En ella, el agua es natural, por lo que puede resultar un poco fría. Nada que no mejore con el pasar de los minutos. Les recomiendo aprovecharla durante las noches, ya que suelen encender las luces y la experiencia se vuelve muy bonita y agradable. Eso sí, durante el día pega fuerte el sol. No cometan nuestro error: consigan un buen protector solar y estén repasándolo, si no se van a quemar.

No tuvimos tiempo para disfrutar de la fogata ni de la zona de juegos en el salón social, pero si tienen la forma, aprovéchenlas, seguro no los va a decepcionar.

Creo que con eso resumo todo lo vivido. Y eso que apenas estuvimos durante dos noches. Vayan, disfruten y déjense atender de personas que en verdad saben lo que es...

Si pudiera le pondría 6 estrellas. Es un lugar maravilloso, realmente de ensueño. Es lo mejor de Mocoa, si van tienen que hospedarse allí. El alojamiento tiene piscina de agua natural que baja de la montaña, lago de pesca, fogata, hidromasaje, gimnasio, cabañas, se pueden ver los micos y pájaros. Realmente lo tiene todo, incluyendo una calificación de 10 en Booking. La atención de Manuel y Reina es excelente, simplemente son extraordinarias personas. El desayuno fue absurdamente rico con frutas recogidas de la misma finca, porque claro toda la finca es autosostenible. Y por si quieres una razón más para reservar: Podrás probar la fruta milagrosa (un lujo en Europa y Asia, difícil de conseguir...

Disfrute de un fin de semana espectacular en el Eco Hostal y no puedo dejar de recomendarlo. Desde el primer momento, la atención fue cálida, amable. Siempre estuvieron atentos a cada detalle para que nuestra estancia fuera perfecta.

El lugar es hermoso, con espacios muy bien cuidados, cómodos y con un ambiente que invita al descanso y la desconexión. Las instalaciones están impecables y se nota el esmero con el que mantienen cada rincón.

Sin duda, fue una experiencia para repetir. Si estás buscando un sitio donde relajarte, sentirte bien atendido y disfrutar de un entorno encantador, este hostal es la...