Finca La Manchuria - Hotel — Hotel in Salgar

Finca La Manchuria and El Diamonte in Salgar delivered one of the most memorable experiences we have ever had in Colombia.

From the moment we arrived, the staff made us feel like family. Everyone was warm, attentive, and genuinely proud to share the history and beauty of the place. I want to give special recognition to Nicholas, our tour guide. He was incredible. His knowledge, his energy, his patience, and the way he walked us through the full coffee process turned a simple tour into something unforgettable. You could feel how much he loves what he does.

El Diamonte itself is a dream. The rooms are nothing short of amazing. Beautiful design, comfortable, peaceful, and surrounded by some of the best mountain views we have seen. You do not feel like you are staying at a hotel. You feel like you have been invited to stay at a private estate that was built just for you.

The entire experience at both La Manchuria and Diamonte left us wanting more. It is rare to find a place that gets the hospitality, the setting, the storytelling, and the comfort all right at the same time, but they did. We are already planning...

This farm is simply magical. The people working on the farm and in the hotel were the kindest and warmest people I've ever met. Tatiana explained to us the history of the farm and answered all of the odd questions I asked her in my poor spanish and she was so patient and earnest in teaching me and made a memorable impact on both my friend and myself. The views are absolutely breath taking, and the land is perfect for hiking and bird watching with Don Leo. It was a purrrfect escape for my cat as he was the only pet on the property and the hotel staff went above and beyond to make sure he and we were comfortable and safe in all scenarios. The room was perfect - spacious, and always impeccably clean thanks to Valentina. The soap they provided in the showers is made on the farm and smells amazing! I will absolutely return to buy more as another excuse to visit this slice of heaven again. Seriously, I cannot wait to go back and highly recommend it to anybody needing a relaxing holiday. Thank you, Finca...

Mi día en el tour por la Finca de Salgar en la Machuría del Café fue una inmersión cautivadora en el mundo del café, donde cada etapa del proceso, desde el cultivo hasta la degustación, se presentó como una celebración de la rica tradición cafetera de la región. La Finca de Salgar se reveló como un rincón especial donde la pasión por el café y la belleza natural se entrelazan de manera armoniosa.

La jornada comenzó con una cálida bienvenida en la finca, donde los aromas frescos de los campos de café envolvían el aire. Guiados por agricultores locales expertos, emprendimos un recorrido educativo por los campos de cultivo. Aquí, aprendí sobre las variedades de granos, las prácticas de cultivo sostenible y el arduo proceso de recolección manual que da vida a cada taza de café.

La experiencia se volvió aún más envolvente al participar activamente en la cosecha. Bajo la guía experta de los agricultores, pude recoger los granos maduros, apreciando la destreza necesaria para seleccionar los mejores frutos. Este contacto directo con el cultivo añadió un valor único a mi comprensión y aprecio por el arte del café.

Después de la cosecha, nos dirigimos a la zona de procesamiento, donde los granos pasan por el lavado, secado y descascarillado. Esta fase del tour brindó una visión profunda de la meticulosidad requerida para garantizar la calidad del café desde su origen hasta la taza.

La degustación de café fresco fue, sin duda, uno de los momentos culminantes. En un entorno tranquilo y acogedor, pude saborear las distintas notas y perfiles de los granos de la finca. La pasión y el conocimiento del barista local amplificaron la experiencia, permitiéndome explorar la complejidad y la riqueza de los cafés producidos en Salgar.

El tour concluyó con un toque de relax en medio de la naturaleza. En un entorno pintoresco, disfruté de un momento de calma mientras observaba los campos de café y absorbía la tranquilidad del entorno.

En resumen, el tour por la Finca de Salgar en la Machuría del Café fue una experiencia educativa y sensorial que profundizó mi conexión con el café desde su origen. Desde la cosecha hasta la degustación y la contemplación tranquila, cada momento resaltó la dedicación de la finca hacia la calidad y la tradición cafetera. Una jornada en la que el café no solo se convirtió en una bebida, sino en una historia viva que se puede saborear...