Bosque de Perlillas — Hotel in State of Mexico

Empezaré diciendo que no recomiendo en absoluto este lugar, y a continuación explico el por que de esto. Podría ser una buena experiencia, y personas en redes sociales recomiendan este lugar, sin embargo les explicaré el por qué no es un lugar como para relajarse o descansar. Este lugar está a unos 100 metros de la autopista, y lo que será el paso del tren México - Toluca está a 50 metros, por lo que el ruido de los camiones y de los autos que transitan está concurrida autopista no permiten sentirse en un bosque. Lo manejan como si fuera un bosque, pero no hay más que una docena de estos en este lugar. Los alimentos son pésimos, pareciera que estamos en un puesto cualquiera de la marquesa (pero de mala calidad - he probado alimentos en varios puestos de la marquesa y desafortunadamente en ninguno llega a ser bueno, tal vez haya alguno bueno, pero no lo conozco hasta la fecha -) Los precios de los alimentos se me hacían razonables de acuerdo a lo que había leído en los comentarios en redes sociales, pero no entendí si se ensañaron con las personas que estábamos ese par de días y no fue la persona que prepara y emplata los alimentos, o quiénes los han alabado y dado comentarios positivos son mediocres y se conforman con alimentos mal preparados y mal presentados. Las cabañas, si todas están como en la que me rentaron, estaba muy polvosa, las camas al sacudirlas se formaba una capa de polvo, en el piso a simple vista se le veía la capa de polvo, las camas por lo tanto tienen olor a polvo. Las mesas y sillas que tienen en el exterior no están en buen estado, no tienen sombrillas como para poder comer al aire libre.

Y si llegan a ir, por ningún motivo lleven mascotas, pues regresarán con garrapatas.

También si les gustaría pedir servicio de alimentos afuera del restaurante, ni lo intenten, pues nadie saldrá a preguntar si desean algo, y si son más arriesgados y llegan a pedir la carta y mencionar que quieren que se les tome la orden, tampoco nadie les hará caso, y si aún así, deciden pedir algo, se los llevarán hasta que vuelvan a ir a la cocina y pregunten si ya les pueden llevar sus alimentos, pero esto con cada cosa que pidieron, si no se los entregan quemados, es posible que no se los lleven, pero en la cuenta si aparecerá que consumieron todo... Y al hacer su reservación soliciten un comprobante de pago y en donde se especifique el servicio, de otra manera van a querer cobrar de más. (Después de 3 semanas recibí una llamada para cobrarme lo que ya había pagado... Pues "el chef le comentó que no se había pagado el consumo de alimentos" y Pamela (la persona de operaciones del lugar no tenía los comprobantes de pago y no sabía si se había pagado) Afortunadamente guardé la factura, los Bouchers y los comprobantes en donde se especificaban los pagos de los servicios.) Los costos de las cabañas son equivalentes a un hotel GT ( o no se si me vieron la cara) Una experiencia que suena muy agradable, resulta ser una pesadilla, y que lástima.

Antes de abrir un lugar de este tipo, los propietarios bien podrían dedicarle tiempo y dinero en capacitación del personal, así como explicarles y darles a conocer la importancia de la atención al cliente, a menos que realmente a los propietarios no les interese dar un servicio de calidad y desear que su inversión aumente, aunque si así es, los propietarios solo se están ahorcando y quedando mal con todos...

Está bonito para pasar la tarde y hacer carne asada, pero como servicio de hospedaje ya es otra cosa.

El lugar está a un costado de la carretera México-Toluca y el sonido de los coches se mantiene presente. No tiene bosque, es un terreno, si intentas caminar hacia los bosques que están cerca, estará cercado; lo demás es propiedad privada aparte.

Cabañas se sienten polvorosas y las ventanas sucias no nos brindaron la experiencia que esperábamos por las redes sociales.

Parte de las sillas y mesas de afuera están en mal estado, dobladas. Nos encontramos con asadores oxidados y hamacas rotas. Para lo que se paga, se esperaría que las cosas estén en buen estado.

Durante mi estadía no estuvo en el lugar la persona que nos atendió por instagram. Los que estaban no sabían nada de lo que pedimos. Aún así se mostraron serviciales, pero no daban respuestas a nuestras dudas. Antes de irnos llegó una chica que fue mucho más atenta y se involucró más con nosotros, pero ya estábamos de salida.

La gota que colmó el vaso fue que agendamos una caminata en la mañana, el horario que ellos mismos nos dieron fue a las 7am, se hicieron las 9am y nadie salió ni siquiera para darnos explicación de por qué nunca llegó el guía. No había NADIE con quién hablar sobre lo ocurrido. Teniendo en cuenta que en el lugar solo están las cabañas y el restaurante, contábamos con esa atracción para darle a la estadía un poco de sabor.

La seguridad es nula y cualquiera puede entrar, no se queda nadie haciendo guardia o vigilancia de noche.

El chocolate caliente es bueno.

En conclusión, lugar lindo, pero no vale lo que se paga, el precio es mucho mayor a lo que...

El camino para llegar está fatal, si lo intentas con un auto bajo seguro no pasas por las piedras tan altas y sueltas. Todo el personal del lugar no usa cubrebocas.||La cabaña se le mete el frío por puertas y ventanas. La puerta no está sellada y deja entrar todo el aire frío además de que la chapa no funciona y tienes que estar sacando el pasador para poder medio cerrar, el baño olía a vómito, la puerta del baño (es un acrílico) no cierra, ya que no tiene chapa, no nos dejaron jabón de manos. La mesa, la parte de arriba se movía, no se puede usar para comer, literal se tambalea de lado a lado.||Nos compartieron el menú y pedimos de comer y de todo lo que pedimos no tenían nada, terminaron trayendo lo que tenían un espagueti literal sin crema, sin queso y frío, una arrachera cruda y con una ensalada pobre, pedimos la cambiaran y nos regresaron la misma pero quemada por fuera y cruda por dentro, una cesina muy pequeña y llena de nervios igual con su ensalada pobre y una sopa azteca, que solo tenía tortillas y jitomate, no tenía caldo, no tenía crema, no tenía nada más, solo tortillas. Comenzó a llover y toda el agua se metía de la puerta, pedimos mínimo un trapeador pero eso no detuvo que se siguiera metiendo el agua, así que tuvimos que dejarla.||Eran las 7pm y ya nos queríamos ir, sin embargo por la lluvia nos esperamos.||No es hotel boutique para nada, el lugar en general está descuidado, su espejo de agua totalmente estancado y no hay...