Santuario de las luciernagas Canto del Bosque — Hotel in Tlaxcala

We had a mixed experience at Canto del Bosque. Our main objective was to see the fireflies during our last night of a 2+ week trip through Mexico. Seeing them on an after dark hike was pretty cool and our guide did a great job of educating about them. What was very annoying was that on arrival we were told they couldn't take our credit card for our remaining balance for the 1 night stay, that we'd have to drive back into town 20 minutes away, AND that they were " having trouble" with the signal in the office in town so maybe we'll have to go to an ATM and pay in cash. I said well we can even get a signal out here so they surely can there. Lo and behold when we did get to town they magically found a signal and ran my card rather than continuing to push for cash, but it kind of tainted the start of our visit. For dinner the "restaurant" consists of a few different booths where you can order different foods cooked in front of you. It is not too expensive (40 pesos for a big sope) and the vendors are nice, but you'll need cash and I see how it could be exoensive feeding a whole family. We were in a "couples cabin" & while it hsd the basics & hot water it is very, very small, particularly for the price. The view of the mountains & forested hillsides in the morning is very nice. We don't regret coming and it is still the most comfortable option in the area, but they should either increase the level of service/hospitality to match the price, or lower the price...

Esta va a ser una reseña muy completa, probablemente la mejor que vean por acá, si les sirve, pónganle me gusta.

Yo estuve investigando un bueeeen rato antes de ir al santuario para ver qué compañía de camping y avistamiento me gustaba más. La verdad es que todo desde el sitio web y sus fotos hasta las reseñas indicaban que este era la mejor opción a pesar de tener menos reviews aquí que otros estos eran de mejor calidad y las fotos del sitio eran agradables, por ello los elegí.

Lo bueno:

1. La organización es muy buena, desde que llegas en la entrada te reciben algunas personas con un uniforme de chaleco rojo bordado con el logo del lugar, en una casetita estilo cabaña de madera dando una apariencia muy buena.

Al ingresar te percatas de la gran cantidad de personal que tienen en el lugar. De verdad son muchos, todos uniformados y fáciles de identificar. Sientes que lo que pagaste se está llendo a dónde tiene que irse en una comunidad tan pequeña como nanacamilpa, a las mesas de las familias que dependen del turismo. Se ve que se reparte bien.

2. El servicio: Siempre te atienden con una sonrisa y de la mejor manera, felicidades a todos. Muy buena actitud de servicio.

3. Las instalaciones: La verdad es que todo está muy bien, tienen una cafetería central de buen tamaño que ofrece un servicio rápido a pesar de la demanda. Eso sí, $40 pesos el taco, pero bien servido y llenador. Con una orden de 3 tienes.

4. La higiene: los baños siempre limpios a pesar de que la lluvia y la tierra generan lodo, siempre estuvieron impecables. Incluso tomando en cuenta que en el caso del baño de hombres eran 3 retretes y 3 mingitorios para un montón de gente (estimo éramos unas 250 personas), la verdad es que nunca que fuí tuve que hacer fila y siempre estuvo muy limpio. No hay regaderas.

La verdad todo bien.

Lo malo:

1. Al momento de reservar nosotros queríamos llevar nuestra casa de campaña y nuestras cosas, es un camping básico peeeero nos indicaron que ya estaba lleno y solo quedaban "campings fresas" que básicamente incluyen la casita, colchones y cobijas además del asador con carbón. Obviamente cuesta casi el doble. Y realmente no era algo que necesitaramos, pero como queríamos ir pues lo pagamos y ya no llevamos nuestras cosas, solo el sleeping. Lo único que si fue molesto fué ver qué había muchísimo campo libre en las áreas de camping básico. Literalmente no perdían nada en dejarnos acampar con nuestras cosas, pero se entiende que intenten aprovechar al máximo sus recursos y generar más dinero.

2. Podrían limpiar mejor las casitas, la nuestra tenía un poquito de lodo y agua. Nada exagerado pero definitivamente no lo que esperas por $2600 la noche.

Ni bueno ni malo, a considerar:

1)Yo revisé bien cuáles tours eran mejores con mejores avistamientos. Parecía que este era bueno. En general si vimos luciérnagas y fue bonito pero yo esperaba que hubiera muchísimas más. Se veía una que otra ocasionalmente, sin embargo se vieron a lo largo de todo el Camino. Los guías nos explicaron cómo funcionaba el ciclo de vida de las Luciérnagas y nos explicaron que si bien es necesario que llueva un poco para que salgan, ese día llovió mucho e hizo mucho frío por lo que se inhiben y salen menos.

No es culpa de Canto del Bosque, porque no pueden controlar el clima ni a los bichitos pero si es algo a considerar.

Personalmente salí un poco desilusionado pero tengo claro que es cuestión de suerte y que me gustaría volver para intentarlo nuevamente.

2. El tour requiere de cierta condición física, nada extraordinario. Pero si se recorren pendientes inclinadas y resbalosas hacia abajo y la subida puede ser pesada.

Conclusiones: Gran experiencia, volvería y lo recomiendo...

Ver a las luciérnagas en su estado natural, es una experiencia única. El camino desde Nanacamilpa, no está muy señalizado, por lo que hay que llevar muy buenas instrucciones en qué calles tomar las vueltas o programar el GPS, desde el pueblo, pues en la montaña no hay señal. Los últimos 2 km para llegar al campamento, son de terracería en suelo boscoso, por lo que se entiende completamente que hay baches e imperfecciones en el camino, por lo que hay considerar el tipo de vehículo con el que llegarás. Te reciben con el check in del tipo de hospedaje que contrataste y aunque en la página mencionan que el costo del 50% del mismo se hará en automático a tu tarjeta cuando llegues, no fue así y nos cobraron en efectivo, para que vayan preparados. El staff te acompaña hasta asignarte tu hospedaje y despejar cualquier duda. El restaurante, aunque parece espacioso, apenas da cabida para alrededor de 120 personas sentadas, capacidad que es rebasada los fines de semana. El que fui, había cerca a 450-480 personas, de acuerdo a los grupos de avistamiento asignados, 24 grupos ese día, de un promedio de 20 personas cada uno. La comida es rica y tienen buena variedad. Quesadillas con chicharrón, altamente recomendadas. Los baños parecen un poco insuficientes, dada la cantidad de visitantes que hay en temporada alta. Esa tarde cayó una lluvia moderada antes de la hora de reunión, 6:45 PM. Este hecho ayudó a que el avistamiento fuera muy numeroso. Hay que llevar poncho para lluvia y zapatos que no se mojen o cubre zapatos, para evitar lodo y que se te empape el calzado. La guía que nos tocó, Diana S, muy atenta y simpática por cierto, está bien preparada para el recorrido. Nos dio la información justa y resolvió las dudas que hicimos. El recorrido en sí, es lo que vale la pena. Es una bajada a un sendero del bosque de unos 750 metros y el avistamiento fue muy numeroso. Luego de caminar varios minutos, nos detuvimos en un paraje en el bosque para contemplar el espectáculo. Valió cada segundo del recorrido! Luego la subida al campamento ya con el sendero muy obscuro, solo viendo lo que tus ojos ven a 30 cm, obscuridad total, pero en todo momento te sientes muy seguro. Luego del recorrido, a las 9.30 PM, prenden tu fogata y disfrutas de la noche. Si escoges tienda de campaña para quedarte, ve preparado con cobijas extras,pues el campamento se encuentra sobre los 2600 MSNM. Al día siguiente, la mañana estaba despejada y se pudo observar los volcanes en todo su esplendor, fue el segundo momento que valió la pena el viaje. El check out es a las 12 PM. El desayuno es tipo buffet, por $180 MXN, y está rico y variado. En resumen, vale mucho la pena la experiencia, aunque dependerá de las condiciones climáticas y otros factores el avistamiento. Ir preparados para disfrutar la naturaleza sin la comodidades del día a día (luz eléctrica apenas suficiente, no señal celular y...