Hotel Finca Eslava — Hotel in Antequera

We stayed for four nights. The room was spacious and furnished with typically Spanish dark wood. The bed was comfortable to sleep on, but the bedding was heavy when we used the extra blanket. It would be more comfortable with a duvet option. The hotel was reasonably quiet and sleep quality was good. Our room was overlooking the courtyard garden rather than the road. The bathroom was standard and the shower had superb water pressure. Only Spanish TV is provided and no tea or coffee making facilities in the room. Breakfast was interesting. There was a fair selection on offer and ample food to satisfy us. The service however was amusing. On our first breakfast there was no one around and a waiter who occasionally popped into the room and left again. The following day it improved slightly and the same waiter popped in and out a few times. However, on the last two days, the waiter was brilliant and even cooked tasty, eggs and bacon. We used the restaurant once as it lacked atmosphere, was pricey and did not offer a huge selection. What we did choose, was tasty and the service sufficed. We chose this hotel based on the advertising of a hydrothermal pool. However, it was a great disappointment. It was very tired and grim looking and most of the high powered jets did not work. We only used it once and...

Greeted by the charming Nani in reception & made to feel welcome. Room large & comfortable & bathroom immaculate. The Finca is a delightful old fashioned hotel with a courtyard, two floors, lovely lounge, restaurant & bar. The family also own the spa complex & as a client of the hotel you have free access & use of it.( swimming caps obligatory as in France). The Finca also caters for weddings.|We had a light meal in the restaurant of a big salad & Black foot Serrano ham with a bottle of wine in the conservatory attached to the restaurant : price reasonable & food good.|The breakfast arrangement is buffet style & simple /continental style but adequate (8€ as opposed to 16€ at the Parador.)|All staff were helpful & polite: try even a basic hello/thank you in spanish to get results.|Met the owner Don Antonio who works with his son on the premises at all hours: charming gentleman who helps to support financially all sorts of activities in the area.|Hope to visit again. Taxis cheap to town as parking...

Estoy alojado con mi pareja en el hotel Finca Eslava de Antequera. Desde que llegamos ayer por la tarde la experiencia es mala, sin paliativos. Nos dieron la habitación 108. Entramos y la habitación habían limpiado menos que como el que dice lo que ve la suegra. Pelos por el suelo, por el baño, una sábana manchada con orines o algo amarillento. Suciedad en el minibar; si hay polvo en un sitio, no hay desinfección, y estamos con el COVID-19 en pleno apogeo... Y paro por no seguir. Nos quejamos y llega una señora de la limpieza. Nos dice que le va a dar un poquito y que mañana le dará mejor. Le decimos que no, que limpie la habitación en condiciones ya que antes no lo habían hecho. Nos vamos al SPA que tiene el hotel, y sigue la experiencia negativa. Hay que salir fuera e ir a unos 150 o 200 metros por el aparcamiento para entrar a una especie de polideportivo. Ahora hace buen tiempo, pero en pleno invierno no es lo mejor para relajarse que es a lo que se viene a un hotel con spa. Al entrar hay una alfombra que desde luego las suelas de los zapatos, creo que te los deja peor que antes de pisarla. Entramos y en la recepción nos dice que solo tienenun candado para las taquillas, y que lo compartamos, con lo que tuve que darle las cosas de valor a mi pareja, para que las guardara. Surrealista, pero cierto. Nos venden unos gorros para el SPA al """"""""""módico"""""""" precio de 4'50 cada uno. Así que le recomiendo a quien vaya que se lleve uno de su casa. En los vestuarios la limpieza brilla por su ausencia. En la zona de SPA no hay dónde dejar las toallas, y se van dejando por donde cada uno puede. El suelo por varias zonas estaba ennegrecido y para andar descalzo no es el mejor aspecto. Volvemos a la habitación y vemos que habían pasado de lo que le dijimos. Sólo limpiaron los dos o tres puntos que más reseñamos, y el resto lo deja igual. La sábana la cambio ya que insistimos al decírselo. LAMENTABLE. Nos levantamos y vamos a desayunar. Cuando llevamos unos diez minutos para que el camarero nos atienda, se lo decimos y nos contesta que va por orden de llegada y que cuando nos toque nos atiende. Lo hace y le pedimos leche desnatada. Nos dice que no tienen, y que las quejas a recepción que él no puede hacer nada. (El desayuno por lo demás estaba bueno). Vamos a recepción, como ya fuimos la tarde anterior, y nos dicen que sí tienen leche desnatada... Le decimos que estaremos teniendo mala suerte, pero que la estancia está siendo muy mejorable, y que hagan el favor de que limpien la habitación en condiciones, que no pedíamos más. Al escuchar las quejas sale un señor que no sabemos quién es, ya que no se presentó, y no nos ofrece soluciones, sino que nos pregunta que si trabajamos en el gremio, en qué hotel era. Totalmente fuera de lugar preguntar eso a un cliente. Vamos a seguir viendo el bonito pueblo de Antequera, y esperemos que cuando volvamos al hotel, las cosas hayan mejorado. Nos queda...