Relais Termal - Balneario La Albotea — Hotel in Cervera del Río Alhama

El Balneario de la Albotea pertenece al Grupo Relais Termal, se trata de un complejo formado por un hotel y un balneario, NO de un balneario con un hotel anexo, que no es lo mismo. Ubicado en La Rioja oriental y muy bien situado en el Parque de Sendaviva y bien comunicado con poblaciones cercanas.|Tiene un gran potencial de desarrollo, que quizás no han visto aún sus gestores. Entendiendo que la calidad o idoneidad de un producto o servicio la marcan sus consumidores o clientes y al haber estado hospedado en dicho balneario acogido al Programa de Termalismo del IMSERSO este mes de septiembre me permito hacer las siguientes valoraciones, alejadas de cualquier subjetivismo:|Si tuviera que elegir cual ha sido lo más agradable y sorpresivo de dicha estancia me quedaría con su capital humano, el mayor activo del balneario; y en todas las áreas del mismo con profesionales como Elena, y también Raquel en la zona termal; Amparo y también Andrés y Alba en el comedor, o las housekeeping encargadas de las habitaciones.|Sin embargo, intuyo que hay un fuerte recorte de personal y de una probable precariedad en estos empleos. A modo de ejemplo, en el comedor suele haber 2 a 3 personas para servir mesas de huéspedes del programa del IMSERSO y también de otras personas externas, o también atender la barra simultáneamente. Esto provoca que, con platos ya ofertados, y por tanto conocidos del día anterior, tengan demoras de casi 30 minutos entre ellos. Yendo bien las cosas y sin sobresaltos puedes estar allí hasta un mínimo de 65 a 75 minutos. El régimen alimenticio es muy flojito, de un aprobado raspado. En algunas ocasiones determinados platos como la sopa, la perca, la carrillera o el secreto ibérico volvían a cocina tal como venían en 3 de cada cuatro (75%). Hay un elevado consumo de congelados y ultraprocesados en los menús. La fruta es muy escasa tanto en comida y cena (una pieza). La alternativa era un sólo yogur “natural” cero cero de Vitalínea, que parece eso mismo: cero cero. El desayuno tipo bufé es bueno y variado, probablemente lo mejor de las tres comidas principales, para un notable alto y con amplio horario de servicio. Las máquinas dispensadoras de “zumo de naranja” de Don Simón (100% de zumo exprimido) o bien de “zumo de piña”, son pura agua azucarada, nada saludables, En cuanto al café, el expresso que probé en una o dos ocasiones eran tipo americano, muy diluido.|El agua corriente de grifo es excelente, es un agua “tratada” que instaló el Grupo Culligan y que arrojó un análisis de TDS de 23 mg/litro, lo que me hace suponer que es agua proveniente de una ósmosis inversa (mejor que la embotellada del balneario en cuanto a grado de mineralización y sabor se refiere).|Las habitaciones son modernas, con superficies de hasta más de 30 m2 cuadrados y bien equipadas. La limpieza también muy buena con algunos “fallos” de coordinación por la rigidez horaria del comedor ( a piñón fijo a las 13.30 y a las 20.30, sí o sí tienes que estar allí.)|La zona de balneario es discreta en lo que a instalaciones y circuito se refiere, una vez más vimos como Elena estuvo sola varios días para llevar dicha área hasta que se incorporó su compañera Raquel. Nunca una mala cara ni un mal modo, todo lo contario: derroche de empatía, proximidad y sonrisa permanente. No hay vigilancia alguna ni seguridad mínimas porque no es posible que con una sola empleada (ni tan siquiera con dos)se pueda controlar el circuito, áreas de tratamiento, recepción, etc. Algunas máquinas y dispositivos son susceptibles de mejora o sustituibles. A saber: el cubo de agua fría que completa el final de circuito básico tiene un enchufe eléctrico a un palmo de distancia de la toma de agua, y otro casi en el suelo, un suelo lleno de agua con alto riesgo de electrocución, (fue comentado con el Director que me dijo que lo solucionaría de inmediato), cables eléctricos poco protegidos por el suelo y una caja de registro eléctrico debajo de las camas térmicas con balancín, sauna húmeda rota un día sí y otro también, no hay relojes de control ni temporizadores, no hay agua para tomar antes y después de entrar a las saunas, una de las dos camas de burbujas está estropeada varios meses, faltan señalizaciones en escalones de acceso a piscina. La “poza” de la instalación es magnífica con un agua dura (848 mg/litro o ppm), sulfurosa, fresquita y que te deja la piel suave como la de un bebé.|No participé en el programa de Animación pero a todas luces faltan espacios para cualquier actividad social, incluyendo el baile. De ahí lo de “un hotel con área termal” que no un balneario con hotel que comentaba...

Una experiencia bastante agridulce. Quiero ser objetivo, y exponerlo de la manera más educada posible, aunque por lo vivido, me resulta complicado.

Para empezar, pese a ser un “balneario”, los servicios básicos relacionados, hay que pagarlos a parte. Entiendo que tratamientos concretos o masajes no se incluyan en la estancia, pero un circuito de spa, y por mi experiencia en este tipo de recintos, siempre viene incluido.

Para ser un lugar de desconexión, te imponen constantemente un horario. Tanto para el circuito de spa, como para algo tan simple como tomarte un combinado. Los horarios muy reducidos, al parecer por la falta de personal en las instalaciones.

Respecto al servicio de desayuno, parece que van atendiendo las peticiones de los huéspedes: había varios tipos de leche, pero la variedad del buffet, escasa. Había, por ejemplo, unas migas, las cuales estaban frías y secas, no por negligencia, si no, porque ese tipo de producto está hecho para consumir al instante, y es una pena ofrecer un producto así en estas condiciones. Los vasos, todos sucios, con marcas de cal, y un par de ellos, con restos de alimentos pegados, por mi parte, esto no tiene justificación alguna. Si no existe un tratamiento antical, hay que secar los vasos uno a uno, como se hace habitualmente, quienes conocemos el funcionamiento del sector de restauración.

El café, intomable. Malísimo.

Tras leer reseñas relacionadas con el servicio de restauración, decidimos anular la cena e irnos a cenar a Cervera del Río Alhama, una localidad cercana, la cual tenía mucha oferta gastronómica y de ocio.

En cuanto a las habitaciones, el lugar parece nuevo a estrenar, pese a tener 17 años, algo que hace visible el deterioro de elementos. Son bastante escuetas, hay una mesa con una silla, en la cual no te puedes sentar, pues pega con la cama.

Te advierten que no se hacen responsables si te falta algo que no esté dentro de la caja fuerte, pero la misma no funciona.

La ducha, o te abrasas o te hielas, no hay punto medio.

El vaso de cortesía, de cartón envuelto en plástico.

Telarañas en cada lugar que mirases, pelusas por el suelo y pelusas por la cama. Pelos de otros huéspedes en sillas y mesas, algo que denota falta de limpieza, o que quienes realizan las mismas, carecen de formación para realizarla.

Hablamos de un alojamiento de 4 estrellas, de las que, bajo mi parecer, le sobran más de una.

Tanto la parte exterior de las instalaciones, como el interior, se nota que no han mantenido mucho: todo lleno de maleza, zarzas, hierba seca. La piscina exterior de aguas sulfurosas, alrededor lleno de hierva seca y maleza, que te pincha los pies y hace que la experiencia no sea confortable.

Veo dejadez, en general.

Tras llamar a recepción para solicitar unos tratamientos adicionales, la chica me dijo que me lo pensara rápido, que si no no podía garantizarme que se pudiesen hacer esa tarde. Como comento, todo el rato con cronómetro.

A las 6, decidimos tomar algo mientras esperabamos nuestro horario de spa, pero resulta que el servicio de cafetería no estaba operativo, y la chica de recepción no sabe servir un café de máquina o un combinado. Para mi, esto en un hospedaje de 4 estrellas, es incomprensible.

Luego no funcionaban las cabinas de bañeras, tuvimos que esperar, el chico de mantenimiento dijo que no se podían usar mientras llenaban la piscina, algo que tampoco fué problema, pero deja ver la falta de organización del equipo.

El personal del spa, amable, pero falta más, y que estén cualificados.

Tras regresar de la cena, fuera del local, nos sentamos en una terraza externa a tomarnos un combinado, y creo que fué el momento más gratificante, pues conocimos a Andrés, un muchacho muy educado, con formación, profesional, simpático y con michísimo amor por su trabajo.

En las habitaciones se permiten animales, y en nuestra planta, hubo un perro que se pasó toda la noche ladrando, algo que, en un sitio donde vas a relajarte, no concibo de ninguna de las maneras.

Nos marchamos con mala experiencia, sin ganas de volver ni...

El Balneario de la Albotea está ubicado en La Rioja, en el diseminado de Alhama del Río Cervera y bien comunicado con poblaciones cercanas de la propia autonomía y de Navarra. De gran potencial de desarrollo, que quizás no han visto aún sus gestores. He estado acogido por el Programa de Termalismo del IMSERSO este mes de septiembre me permito hacer las siguientes valoraciones, alejadas de cualquier subjetivismo: Lo más agradable y sorpresivo de mi estancia ha sido su capital humano, el mayor activo del balneario; y en todas las áreas del mismo con profesionales como Elena y Raquel en la zona termal; Amparo, Alba y Andrés en comedor. Sin embargo, intuyo que hay un fuerte recorte de personal. A modo de ejemplo, en el comedor suele haber 2 a 3 personas para servir mesas de huéspedes del programa del IMSERSO y también de otras personas externas, o también atender la barra simultáneamente. Esto provoca que, con platos ya ofertados, y por tanto conocidos del día anterior, tengan demoras de casi 30 minutos entre ellos. Yendo bien las cosas y sin sobresaltos puedes estar allí hasta un mínimo de 65 a 75 minutos. El régimen alimenticio es flojito, de un aprobado raspado. En algunas ocasiones determinados platos como la sopa, la perca, la carrillera o el secreto ibérico volvían a cocina tal como venían en 3 de cada cuatro (75%). Elevado consumo de congelados y ultraprocesados en los menús. La fruta es muy escasa tanto en comida y cena (una pieza). La alternativa era un sólo yogur “natural” cero-cero de Vitalínea, que parece eso mismo: cero-cero. El desayuno, tipo bufé es bueno y variado, lo mejor de las tres comidas principales, con amplio horario de servicio. Las máquinas dispensadoras de “zumo de naranja” de Don Simón (100% de zumo exprimido) o bien de “zumo de piña”, son pura agua azucarada, nada saludables, En cuanto al café, el expresso que probé en una o dos ocasiones eran tipo americano, muy diluido. El vino ofrecido curiosamente es vasco pese a encontrarnos rodeados de vides. No consumir en caso de patologías digestivas (gastritis, ulcus gástrico, hernia hiatal, etc.) o lo lamentarán. El agua corriente de grifo es excelente, es un agua arrojó un análisis de TDS de 23 mg/litro lo que me hace suponer que es agua proveniente de una ósmosis inversa. Las habitaciones son modernas, con superficies amplias y bien equipadas. La limpieza también muy buena con algunos “fallos” de coordinación por la rigidez horaria del comedor ( a piñón fijo: a las 13.30 y a las 20.30, sí o sí tienes que estar allí.) La zona de balneario es discreta en lo que a instalaciones y circuito se refiere. No hay vigilancia alguna ni seguridad mínima porque no es posible que con una sola empleada (ni tan siquiera con dos) se pueda controlar todo el recinto. Algunas máquinas y dispositivos son susceptibles de mejora o sustituibles y también la higiene. A saber: el cubo de agua fría que completa el final de circuito básico tiene un enchufe eléctrico a un palmo de distancia de la toma de agua, y otro enchufe casi en el suelo, con alto riesgo de electrocución, (fue comentado con el Director que me dijo que lo solucionaría de inmediato), cables eléctricos poco protegidos por el suelo mojado y una caja de registro eléctrico debajo de las camas térmicas con balancín, sauna húmeda rota un día sí, y otro también, no hay relojes de control ni temporizadores, no hay agua para tomar antes y después de entrar a las saunas, una de las dos camas de burbujas seguía estropeada varios meses, no hay señalizaciones en escalones de acceso a piscina ni a la “poza” de la instalación, que es es magnífica con un agua dura como corresponde de 848 mg/litro, sulfurosa. Recomendable. No participé en el programa de Animación, pero a todas luces faltan espacios para cualquier actividad social,...