Casa Rural Palomar — Hotel in el Palomar

Estuvimos en julio de este año (2024) y teníamos pendiente publicar la reseña. La verdad es que las reseñas de Google de hace 3 y más años no tienen nada que ver con el estado actual de la casa, que obtiene un aprobado raspado. La casa se encuentra en un estado de abandono importante en cuanto a mantenimiento y además por cosas que cuestan bien poco. Empezando por la puerta de entrada a la casa, que la llave no hay quien consiga cerrarla: si te vas de la casa tienes que cerrarla de portazo con la esperanza de que nadie entre a robar durante la ausencia. Según el propietario, no hace falta más porque en la localidad hay poca gente y no hay robos ¿? 30 euros o menos vale un bombín nuevo. Después, el anunciado futbolín, los juegos de mesa y el ping pong. Los jugadores del futbolín parece que vengan de la guerra de Vietnam, el 80% rotos y pegados ¡con cinta aislante! Es decir, el futbolín como si no estuviera. A los juegos de mesa le faltan la mitad de las piezas y cartas. La mesa de ping pong que comentan en las reseñas, ¿donde está? Hay una red y palas (en estado lamentable) del decathlon que lo único que puedes hacer es ponerlas en una mesa de cerámica (con la cerámica despegada por una esquina) de la mitad de dimensiones de una mesa de ping pong. Es decir, tampoco hay ping pong. Si pasamos al estado de los colchones, que deben tener 20 años de antigüedad, también podemos dedicar un capítulo: colchones blandos que dañan la espalda. Al colchón donde durmió mi hija en la habitación con terraza, se le salen los muelles rotos por debajo, lo puede comprobar cualquiera que vaya a la casa. Sólo dos colchones de toda la casa están en un estado aceptable que permiten dormir más de una noche. Hay colchones de espuma en ikea y por Internet por menos de 70 euros y que para una casa rural son más que suficientes. El jacuzzi de la habitación con terraza tampoco funciona, imagino que por falta de mantenimiento y por la cal. La nevera apenas enfría, hay que ponerla a tope y tirar mucho de congelador para tener bebida fría. La documentación que te envían con información de la zona, está desactualizada: se anuncian tiendas en el pueblo que están cerradas desde hace meses, contrastado con la gente del pueblo. No hay ninguna carnicería, tienes que ir a Albaida. La zona de la piscina y barbacoa, que es lo que salva la casa con un aprobado, no tiene apenas luz. Si quieres cenar en la terraza, compra velas porque cenarás a oscuras. El mobiliario de la terraza pequeña encima de la piscina, roto e inutilizable. En fin, una larga lista que demuestra que hace falta ponerse al día con la casa para que esté en condiciones. Como cosas positivas, la piscina que aunque es pequeña, está al lado de la barbacoa y es donde haces vida en la casa. La barbacoa disponía de carbón y algo de leña, así como aro de paellas y gas, pudimos hacer una fideuá. Los propietarios también muy disponibles aunque poco resolutivos (lo que es una lástima), ya que trasladábamos algunos de estas cuestiones pero caen en saco roto por lo que hemos podido comprobar. Una casa para no pasar más de una noche y depende del colchón donde duermas. El resto de días es tirar el dinero con el estado actual de la casa, que espero que mejoren. La casa tiene muchas posibilidades pero necesita una inversión de mantenimiento (tampoco excesiva) para mejorar muchos servicios...

La casa es bastante acogedora, diseñada para mas de 10 personas. Cuenta con piscina, barbacoa, aire acondicionado en algunas habitaciones, lavavajillas, productos de limipeza... Detalles que hacen más sencilla la convivencia y se agradece.

Cuenta con dos terrazas y hamacas para relajarse, también cuenta con mesa de ping pong y futbolín para pasar el rato.

Nosotros éramos un grupo de 9 personas, y estuvimos durante 4 días y 3 noches, la chica que nos atendió de 10, no hemos tenido ningún problema con ella, cualquer duda contesta rápidamente al móvil, y muy simpática.

Sin duda una experiencia inolvidable, y 100% recomendable para pasar con...

Hemos estado unos días en junio para recomponernos de esta pesadilla de la pandemia. Debo decir que no es la primera vez que nos hemos alojado en esta casa, el pasado año también estuvimos unos días. Está a una hora escasa desde Alicante y es ideal para una escapada de fin de semana o cualquier otro plan con amigos. Para nosotros siempre todo ha estado correcto, nuestra casera Chelo es muy amable y dispuesta. Encuentro la casa acogedora, ideal para descansar y desconectar. La piscina está dentro de la casa, te da privacidad y con buen tiempo siempre apetece estar a remojo y después de una barbacoa, mejor que mejor!! No le encuentro...