Hotel l'Alguer — Hotel in l'Ametlla de Mar

What a wonderful hotel. I stayed here for 4 nights with my mother whilst selling a local property so was in need of a stress-free stay. On arrival we were welcomed by the lovely staff at reception who immediately allowed us to store out large luggage there rather than drag them to our room. The hotel itself was spotless. All communal areas were thoroughly cleaned and our room was cleaned every day with fresh towels & sheets. I would have liked a kettle but they don't come supplied in many Catalonian hotels so if you need an early morning cup of tea then take a personal one. Also, there were just two tiny sachets of soap/shower gel provided so take a quick trip to the local spar. The room included a continental breakfast which was perfectly adequate and well set out. Again the breakfast staff were so professional and polite and really made us welcome. The hotel was situated near the beach and I could hear the waves lapping on the shore in the morning which was an added bonus and the general location was perfect with bars and cafes within a short walk. I absolutely loved this hotel and will...

Caro, para lo que ofrecen. Por este precio he estado en grandes ciudades europeas, en hoteles de 4 estrellas Lo mejor de este hotel, es la ubicación. En frente de la playa. Accesible bajando la rampa o escaleras. Está muy limpio Nada mas llegar, después de 2 horas de viaje acalorado en tren, estaban sin luz, y no podiamos coger el ascensor, ni teniamos aire en la habitación, aunque duró poco. El aire acondicionado, no es un aire acondicionado con splits. Es una máquina a ras de suelo en la pared del recibidor, con el baño en frente, por lo que no llega el frio a las camas. A parte, es bien sabido que el aire frio baja, no sube. El baño es con bañera, aunque todo muy nuevo y liempo. Nuestra taza de wc, se movía como un balancín. Todavía van con las pastillas de jabon que te resecan para el cuerpo y un sobrecito por persona de gel de baño, que cuando estás dentro de la bañera, no sabes como abrir. Todos los hoteles tienen ya dispensadores. Nuestras camas, eran individuales y no se podían juntar, no sabelos el motivo, y no hay enchufes para el mobil, cerca de la cama.El segundo día, nos hicieron la cama y cambiaron toallas, pero no repusieron los jabones, por lo que tuvimos que reclamar, y nos dijeron que cuando vinieramos de cenar, lo tendriamos en recepción. Cuando llegamos, el chico que había, no se enteraba de donde estaban los jabones y delante nuestro se puso a echarle la culpa a su compañera, super apurado. tuvo que llamar a otra compañera. Las llaves del hotel no son con targeta, como en la mayoría de hoteles. Son la típica llave con una bola metálica, que te hacen dejar en recepción. Los armarios son antiquisimos. Nos dejaron la ventana de la habitación abierta, con el fin de semana que hizo, que estabamos a 34 grados. El desayuno, otro chasco......Pagamos 35 euros, por una máquina de café (muy bueno), zumos y bollería industrial del Mercadona y Area de Guissona, que iban abriendo y poniendo, 4 lonchas de jamón del mismo supermercado, y poca cosa mas...Mermelada y mantequilla. Nada caliente. para desayunar. Pan tostado lo único.La guinda del pastel, fué el último dia, que ya estabamos en la estación a 20 min que saliera el tren, y nos llaman que nos habiamos dejado los dnis....El dia que llegamos, al no haber luz, se los quedaron para hacer el check in mas tarde, y nadie nos...

En general el hotel cumple con las espectativas de un hotel de dos estrellas, la limpieza correcta, el primer día parecía muy desinfectavo con olor a lejía aunque el resto de días era una limpieza muy superficial. El personal de limpieza así como la recepcionista de la mañana fueron muy agradables, no así la recepcionista de la tarde, ya que durante nuestra estancia (del 19 al 23 de agosto del 2021) no fue nada simpática, al contrario, el día 22 a las 5 de la tarde al ir a dejar las llaves (ya que es norma del hotel dejar la llave en recepción) no estaba, en su lugar había un letrero escrito a mano pidiendo que se picara al timbre. Picamos una vez y traz unos minutos volvimos a picar. Cuál fue nuestra sorpresa que salió como si viniera de dormir y con malas formas, sin saludar y con malas caras nos agarró la llave murmurando despectivamente. La cosa no quedó ahí ya que a la vuelta nos recriminó, nada más vernos y sin saludarnos que hubiéramos picado al timbre, echándonos la bronca y de muy malas maneras, mintiendo al decir que habíamos picado insistentemente tres o cuatro veces, algo que era mentira, y diciéndonos que en otra ocasión dejáramos la llave en el mostrador y nos fuéramos. Obviamente es algo que le dijimos que no haríamos por la seguridad de nuestras pertenencias. Y aún así siguíó riñiéndonos como si fuéramos unos críos, hasta que la tuvimos que parar y nos fuimos para no discutir. En definitiva no volveremos a este hotel por culpa de una persona que no sabe estar de cara al público y que tan mala imagen da a un hotel que de no ser por ella hubiéramos valorado de manera muy diferente. La verdad es que nadie se merece que le traten de esta manera pero cuando uno es educado le pretenden...