MASIA CAL GOTLLA — Hotel in l'Espunyola

Mi reciente estancia en la la Masia Cal Gotlla fue una auténtica pesadilla. Desde el momento en que llegamos, quedamos profundamente decepcionados por la falta de atención al detalle y la evidente falta de interés en proporcionar una experiencia agradable para los huéspedes. Permíteme detallar las numerosas deficiencias que encontramos durante nuestra estancia. Comenzando por la cocina, nos encontramos con una completa escasez de menaje. ¿Qué se supone que debemos hacer con solo 10 vasos para una casa de 19 personas? Cocinar se convirtió en una tarea extremadamente difícil y frustrante. Además, la calidad de los utensilios disponibles era tan pobre que ni siquiera pudimos cortar adecuadamente los ingredientes. Parecía que la cocina no había sido equipada en años, y no hay excusa para una negligencia tan evidente. Pero la cocina no fue el único aspecto decepcionante. Los colchones en las habitaciones eran incómodos e insufribles. Se hundían en el medio y nos despertábamos con dolor de espalda todas las mañanas. Parecía que los propietarios no se habían preocupado por reemplazar los colchones antiguos y gastados en años. Pasamos nuestras noches tratando de encontrar una posición cómoda para dormir, sin éxito. Otro aspecto destacable fue la falta de sofás cómodos para descansar. Después de un largo día de exploración en la zona, esperábamos poder relajarnos y descansar en un sofá acogedor. Sin embargo, los sofás de la masia eran rígidos y desgastados. No había lugar para descansar correctamente, lo que arruinó por completo nuestras posibilidades de relajarnos y disfrutar de nuestro tiempo libre. Además de estos problemas principales, también nos encontramos con otros inconvenientes menores que contribuyeron a nuestra experiencia general negativa. En resumen, nuestra estancia en la Masia Cal Gotlla fue una completa desilusión. La falta de menaje en la cocina, los colchones incómodos, los sofás poco acogedores y otros inconvenientes menores hicieron que nuestra experiencia fuera muy desagradable. No puedo recomendar esta casa a nadie y sugiero encarecidamente que busquen otras opciones en la zona. Es triste ver cómo un lugar con potencial arruina la experiencia de los huéspedes por su descuido y falta de atención a...

La masía está muy bien, es grande, cabe mucha gente, está muy bien situada. La vista es fantástica. Uno de los problemas que tiene es la cantidad terrible de moscas que hay, muchísimas.

Por otro lado La casa casi no tiene nada de ajuar de cocina. Faltan vasos, tazas de desayuno, no había ni una sola jarra donde poner el agua, muy pocas sartenes y lo necesario para cocinar. Hay que tener en cuenta que es un turismo rural pensado para mucha gente. Es imprescindible que los propietarios de la casa se gasten algo de dinero en ir al Ikea a comprar todo lo que falta de la casa. Hablamos de poco dinero.

Teniendo en cuenta que éramos 17, nos dejaron un poquitín de leña para la barbacoa, absolutamente insuficiente, tuvieron que venir a traer más. Estos pequeños detalles hacen que la estancia no sea perfecta, y hablamos de detalles de poco dinero.

Las camas de matrimonio son muy pero que muy pequeñas. Insisto en que la casa está muy bien, tienes mucho espacio vital, y las vistas son inmejorables,...

Pasamos un fin de semana con amigos . Y el lugar muy agradable .. aunque personalmente la casa no nos lleno como en las fotos . El suelo está ligeramente hundido y cuando transita mucha gente da la sensación que se cae . El comedor es muy oscuro y la cocina muy pequeña para un grupo . . Las habitaciones confortables y muy bien equipadas salvo que échate a buscarlas porque eso es un laberinto . Habitaciones dispersas pero dentro de todo bien. Pasamos un bonito momento . Pero a las que disfrutan de cocinar compartir e ir tomando una copa con la familia imposible con la pared de cristal que tiene la cocina que por cierto es preciosa pero resta espacio...