Casa Rural Finca Charco la Olla — Hotel in La Nava

Fue muy fácil dar con el sitio y para nada me esperaba la maravilla que me encontré. La casa estaba muy limpia y muy bien decorada. Nos hizo el tiempo perfecto para tomar unos baños en la piscina y disfrutar comiendo en la terraza. No se escucha nada de noche y puedes ver los amaneceres y la luna desde la habitación por la noche, la cuál consta de un espléndido ventanal. Se duerme con comodidad y tranquilidad. Además, la zona exterior es amplia y cuenta con columpios. Se tarda pocos minutos en salir y visitar, recomiendo que vayáis al Puente medieval de la Nava y sigáis un poquito el río, es precioso y está al lado. En los alrededores de la finca, tienes mucho espacio para recorrer las montañas, lo cual sirve para contemplar el paisaje y ejercitarte un poco, por lo que es ideal para pasear. Es un sitio para volver y despejar tu mente alejada de todo. Muchas gracias a los propietarios,...

Hemos pasado unos días en la casa rural la Olla, en la sierra de Aracena en Huelva, y solo tengo cosas buenas que decir, es un sitio tranquilo y de paz en plena naturaleza, donde te puedes alejar del estrés y ruidos de la ciudad. La casa es más que perfecta cuidando de cada detalle y muy limpia y acogedora, tiene todo lo necesario que puedas necesitar en tu día a día. La habitación principal tiene un ventanal de lado a lado de la pared , quedarte dormido mirando las estrellas y despertarte con esos amaneceres es un auténtico placer. También pudimos disfrutar de unos buenos baños en la piscina y unas cenas en el porche con unas luces que lo hacen un lugar mágico. El coche lo puedes dejar en la misma entrada . La única pega es que los días pasaron muy rápido, jejej. Los propietarios son encantadores, pendientes de que todo estuviera bien a nuestra llegada, muchas...

Estuve con mi familia 5 días en el puente de todos los santos y la experiencia no ha podido ser más gratificante. La casa está genial, cómoda, acogedora y con todo los enseres que necesites, el entorno es maravilloso, rodeado de naturaleza, en mitad del monte, ideal para desconectar y recargar pilas, con unas vistas espectaculares. Antonio, el anfitrión, muy amable y atento en todo momento, siempre dispuesto a resolverte cualquier duda. Sin duda es un alojamiento al que no descarto volver en un futuro. La experiencia...