Casa Rosalia — Hotel in Lobios

Staying at the Casa Rosalia in Lobios is one of my best memories of walking the Caminho da Geira e Arrieiros. My room was cozy, clean, and well-furnished. The best part was meeting Alber, the owner. Alber is a superb host. He spoke to me about Galicia, his family, the history of the home, and Galician cooking. I felt like I was talking to an old friend. He is a trained cook and prepared an outstanding bacalao with potatoes and homemade bread. I wish I could have that again! Alber gave me some more homemade bread for the long walk the next day. I definitely recommend the Casa Rosalia in Lobios for an authentic...

Pésimo, pintaba bien desde fuera, pero deja mucho que desear la atención y la espera, tanto para sentarnos como para empezar a atendernos. Les faltaba hasta agua, "si no la tenemos fria te la traemos del tiempo" me dicen y al final nos la traen en una garrafa de cristal de 3 litros diciendo que era agua embotellada pero la cambiaban para esa porque quedaba mas bonita. Mesa sin mantel y no nos daban atendido despues de estar esperando en la mesa 15 minutos, cuando nos dicen el menu que quedaba, que eran 2 cosas nos fuimos. Una decepción total. Como no se pude contestar a la reseña pues edito esta, lo unico que le veo justificacion es a los menus que quedabana, que entiendo que se acabe el producto, del resto no tiene justificacion, la lentitud del servicio no se justifica, una pareja que entro bastante antes que nosotros la atendieron al mismo tiempo que a nosotros y atendieron por decir algo, que para pedir la bebida tardamos bastante y luego porque le pedí que me dijera lo que habia de menú porque no paraba de andar de un lado para otro sin atender, me ponen en agua del grifo, la galeria al lado de la que nos sentamos estaba bastante sucia y la terraza de fuera parecia un almacen, el mostrador de la entrada tambien parecia un trastero donde estaba la cefetera melita allí recalentando el café, no dudo que la calidad del producto sea buena, ya que no pude probarlo, pero cuando pago por algo pago por su conjunto, y mas a esos precios, por ese motivo nos levantamos y nos fuimos, no me pareció un buen restaurante, a falta de haber probado la comida, pero si voy a un sitio tengo que estar agusto y aqui estaba incomodo desde el momento que me senté, y que conste qebes el primer restaurante en mi vida en el que me levanto y me...

Lástima no haber prestado atención a las malas críticas. Tras lo leído, llevábamos buenas expectativas, pero la realidad es muy diferente. Lo de las habitaciones ruidosas hasta las 23:00 y el chorro de grasa cayendo desde el techo, no me parecen cosas tan graves como las que nos encontramos y que veo que le ha pasado a más gente:. - Es imposible ducharte con agua caliente. Fuimos en enero, -1 grados y el agua sale del grifo en intervalos de 20 segundos caliente y 3 min fría (de nevera). Por suerte lo comprobamos a tiempo al oir a las chicas de la habitación de al lado gritando. - La habitación estaba absolutamente fría y la calefacción es de acumulador, lo que hace que y por más que regules los radiadores no hagan nada porque se ha gastado lo poco que le ponen de carga el día anterior . Parecía que estuviésemos en la calle hasta las 5 de la mañana que empezó a cargar y notarse un poquito. - Quedamos con el dueño en desayunar a las 9:00 y no había nadie hasta las 10:30. Al bajar a las 9:20 nos encontramos otros huéspedes enfadados por el mismo tema llamando al dueño por teléfono. No llegó hasta una hora y pico más tarde. - ¿Desayuno bueno y abundante? No en nuestro caso. 1 bollo del tamaño de una galleta con una única porción de mantequilla, un café y galletas, servidas por el dueño, muy listo y sonriente, que de nuevo se quitó de enmedio hasta que nos fuimos, por si le pedíamos algo más. Las chicas de al lado tuvieron más suerte y a ellas sí que les pusieron fruta y agua. - No había ningún tipo de jabón en la habitacion, nos lo trajeron casi 1 hora más tarde, aunque nos sirvió de poco, debido a las condiciones del agua... Vosotros sabréis si os...