Casa Verata (Casa Rural) — Hotel in Losar de la Vera

Estuvimos utilizando la casa en su máxima ocupación, 10 personas. En total, 4 habitaciones dobles y dos camas supletorias. Las habitaciones están perfectamente equipadas con colchones prácticamente a estrenar, o eso daba la impresión. Lo mismo ocurría con las zonas comunes, con sus dos sofás y mobiliario prácticamente a estrenar.

Desde casa verata son muy detallistas, y como sabíamos que íbamos a gastar muchas calorías en nuestra concentración ciclista, nos dejaron un panettone, membrillo casero y bollos de pan en el congelador para nuestro uso y disfrute.

Además, como es habitual en muchas casas rurales, se preocupan para que podamos descubrir tan maravilloso entorno con multitud de guías y sugerencias turísticas, además de aconsejar distintos servicios y/o establecimientos que existen en Losar y alrededor para disfrutar su gastronomía y optimizar al máximo nuestra estancia en la Vera.

Un lugar y entorno para disfrutarlo los 365 días del...

Muy buena comunicación desde el principio, el recibimiento a la casa fue muy agradable, fuimos mi pareja y yo con nuestro perrete y todo fueron facilidades, nos recomendó un montón de sitios (a los que fuimos nos encantaron) y estos cuatro días no han podido ser más gratificantes, el trato tanto con Óliver como con su madre impecable y hemos estado súper a gusto, han estado muy atentos a nosotros. La habitación muy bonita, amplia, buenas calidades, cama muy cómoda, todo a estrenar y además tiene aire acondicionado. La sala común con sofás y cocina nueva, todos los utensilios necesarios y además de las cosas comunes nos han dejado tomates y ciruelas de su huerto. Nos han dado una bolsa de tomates al irnos, espectaculares. Y El barrio muy tranquilo. En general lo recomendamos 100% y si volvemos a ir unos días por la zona...

Nuestra estancia en Casa Verata ha sido estupenda. Paqui, es servicial, atenta y muy cercana, no sólo en temas de la casa sino a la hora de aconsejar lugares y actividades. Las habitaciones son estupendas y están limpias. Las duchas son estupendas y no le falta detalle. Por la noche, en la oscuridad había una luz que daba destellos y quizás era lo más incómodo de la estancia ya que eso a mucha gente le puede molestar pero era la alarma contra incendios. Te hacen la habitación diariamente pero nosotras les dijimos que no ya que eran dos días y no lo veíamos necesario. El desayuno es de mucho valor. Paqui se encarga de mimarnos con pan reciente, todo tipo de alimentos e incluso con bizcochos hechos por ella. Nuestra perrita, ya mayor se sintió muy bien. Volveremos sin...