Casa Dondela — Hotel in Rialp

Bonita casa rural de piedra muy bien acondicionada para disfrutar al máximo de la estancia y muy bien restaurada al igual que decorada a conciencia y buen gusto. La casa es espaciosa y tiene de todo. Es muy difícil encontrar una casa que reúna todas las características que te hagan sentir como en casa y esta lo logra. Muy buena ropa de cama, toallas, vajilla, menaje..., buenos colchones y electrodomésticos , ducha, wifi y mención especial l rincón de la chimenea muy acogedora. Todo súper limpio, calidad precio fantástica y los dueños, Belén y David muy atentos y amables Hay un montón de detalles en la cocina y en el baño Muy cerquita de las pistas de esquí de Portaine Sólo un pero, se nos hizo muy corta nuestra estancia. No tenemos dudas que volveremos aquí a pasar algunos días cuando volvamos al Pallars Totalmente...

Casa Dondela es un lugar excepcional. David y Belén, los dueños, son encantadores y hacen que te sientas acogido desde el primer momento. La casa está cuidada hasta el más mínimo detalle: huele fenomenal, todo está impecable y en perfectas condiciones, es muy fácil sentirse como en casa nada más entrar.

La cocina está completamente equipada y, además, te dejan disponible leche, café y algunos dulces, un detalle que marca la diferencia. Me quedé con las ganas de ver la chimenea encendida, ¡ojalá pueda volver en invierno para disfrutarla!

La ubicación es inmejorable, en un entorno mágico y tranquilo. Sin duda, siempre que vuelva a dormir por la zona, elegiré...

Tuvimos la suerte de alojarnos en la casa rural Dondela, en Roní, y la experiencia no pudo ser mejor. Desde el primer momento nos sentimos como en casa gracias a Belén, la dueña del apartamento, que cuida cada detalle con muchísimo cariño. La decoración, la limpieza y la comodidad del alojamiento son excelentes, pero lo que realmente hace especial la estancia es su amabilidad y trato cercano. Siempre pendiente de que no nos faltara nada, nos dio recomendaciones muy útiles para disfrutar de la zona.

Sin duda, un lugar con encanto en un entorno precioso, ideal para desconectar y sentirse acogido. ¡Gracias, Belén, por todo! Repetiremos...