Me lo habían recomendado mucho, sobretodo por los chacinados, así que decidimos ir.
En sus redes siempre recomiendan reservar, pero vimos gente que fue sin reserva y le dieron mesa.
Llegamos temprano por la noche, había solo una mesa ocupada. Nos atendieron rápido y muy cordialmente, y nos dejaron elegir cualquier mesa. La ambientación del lugar hermosa. Bien de campo, y con adornos de productos antiguos. Por la ventana se veía todo verde con las luces de noche. Hermoso.
Yo ya había visto su carta online, así que el proceso de elección fue muy rápido.
Decimos pedir la picada tradicional para ambos, y unas empanadas. A lo que el mozo nos dijo que la picada se solía recomendar para uno. Entonces pedimos unas papas fritas más. Y para tomar, una limonada de litro.
Sin decir nada, nos traen la bebida, 2 bandejas de pan, y un cuenco con lengua a la vinagreta bien casera. Hacía años que no comía. La verdad que riquísima.
Después nos llegaron las empanadas de cabrito que habiamos pedido, y la picada. La verdad, no era para uno la picada. Dos personas comían muy bien.
Las empanadas a la vista se veían muy bien, pero al comerlas, medias insulsas. El sabor era rico, pero parecia que se hubiesen olvidado de ponerle sal al relleno, porque no sabía a nada. Y la masa no estaba muy crocante que digamos.
La picada era toda de productos artesanales. Desde salame, hasta morcilla, pasando hasta por pickles. Muy pero muy rica. Lo único que no me terminó cerrando mucho fue una de las variedades de queso (había solo 4 variedades para las aprox 10 de fiambre) y que los quesos estaban a temperatura ambiente.
Por último llegaron las papas fritas. SUBLIMES! De corte tradicional. Bien crocantes y super sabrosas. Posteriormente cuando le agradecimos al mozo, nos comentó que las papas las fríen en grasa. Por eso su sabor tan rico.
Ya casi sin poder respirar, nos volvieron a traer la carta y pedimos postre.
Mi señora pidió flan casero mixto, y yo 2 brochas de helado. Aunque a mí me trajeron la copa helada, que es lo mismo pero con fruta. Pequeño error, pero sin inconvenientes.
Cómo pocos lugares, salimos de ahí rodando, y felices.
Lugar: 9/10.
Servicio: 10/10.
Comida: 8/10.
Bebida: 8/10.
Precio: Normal/Caro
Volvería? Sin dudarlo. Quiero probar su parrilla...
Read moreEl lugar es lindo, alejado pero de rápido acceso, cuando llegamos estaba lleno, se recomienda reservar ya que esperamos cerca de 40 minutos para sentarnos.
Pedimos una parrilla y una tabla de achuras, de entrada nos dieron una cazuela de cheddar con verdeo y una tabla de fiambres caseros cortesía de la casa, el pan es casero pero se lo notaba medio congelado.
La demora para comer no fue corta pero para la cantidad de gente que había en el salón tampoco estuvo fuera de lugar, bastante aceptable.
Con respecto a la comida es todo de primera calidad y muy rico, se nota que quién la hace le pone onda.
Las 3 estrellas corresponden a:
La tabla de achuras le faltaba la molleja, (nos avisaron que no había y que lo cambiaban por otra cosa pero no sé notó que le hubieran agregado algo a la tabla). Sacando la entrada donde si nos trajeron pan (semicongelado), cuando llegó la carne ya no tenían más. La mesa que nos dieron estaba cercana a la puerta y como no cerraba bien cada vez que salía alguien me tenía que levantar a cerrarla (estamos en invierno), considero que en un lugar donde le dan de comer a unas 100 personas aproximadamente al mismo tiempo pueden o poner una puerta decente o alguien que te reciba y la mantenga cerrada. Me levanté más de 10 veces sin contar las veces que la cerraban personas de otras mesas.
Por lo demás todo excelente, buena atención, precios acordes, comida fresca y muy rica.
El lugar es muy recomendable solo que mi experiencia en particular no fue lo que esperaba
Voy a volver y espero llevarme una mejor...
Read moreRenovando mi opinión, debo decir que el lugar es muy hermoso, como siempre. Pero el sistema de atención es diferente -desconozco si cambió de dueño o una parte fue alquilada por otra gente con fines comerciales/mismo rubro-. En conclusión: bajó muchísimo la calidad de la comida. Desde hace muchos años compro el locro en el lugar, porque -aunque más caro- siempre fue el de mejor calidad y nunca me importó pagar lo que fuere por buena comida; pero tiene que ser realmente buena y el Nono siempre se caracterizó por ello. Esta vez el locro no tenía casi nada de cerdo -2 micro-pedacitos nadando- y el 95% de los diminutos trocitos que tenía eran grasa. Encontré 1 sólo trocito menor a 1/2 cm. de panceta y 3 rodajitas de chorizo -finitas-. Un poco de huesos -obvio, sin carne: sólo el hueso- y lo demás eran los porotos. Aclaro que compré 3 porciones para llevar. Lo pedí con la salsa y me metieron la salsa dentro del locro, cuando no debe ser así; la salsa se debe presentar aparte para que el cliente decida si se la quiere agregar a su plato, o no y en la medida de su agrado. En todo caso, deberían de aclarar que se debe llevar un recipiente aparte para llevarse la salsa, en caso de quererla. Pero volviendo al tema del locro en sí, la verdad me decepcioné de la calidad a la que estaba acostumbrada en el pasado glorioso del Nono Chichín. Para comer este locro, me hubiera hecho un guiso de porotos a lo pobre -sin...
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