El Gringo De La Ripa — Restaurant in Rosario

Lindo lugar, acogedor, no lujoso.buena atención. Estuve de paso por Rosario y fui a cenar con unos matrimonios amigos. Ellos ya conocen el lugar y van habitualmente.La carta es variada, Pedimos unas Pizzanesas , vienen con papas fritas como guarnición, Me sorprendió la cantidad, es para que coman 2 personas , bien comidas. La carne de las Pizzanesas es tierna y alta. Muy recomendable. Pedimos de 3 tipos diferentes, una con rúcula, la otra a 3 quesos y la otra especial . La verdad, que muy recomendable. El lugar se llena rápidamente, por allí si tienen programado ir varias personas conviene reservar antes, eso hicimos nosotros. El precio, no me pareció caro. El ambiente, pareciera ser una lomiteria, una hamburguesería, pizzería,esa es la impresión que me dió cuando conocí el lugar, mi experiencia fue muy positiva, cuando ande nuevamente por Rosario, voy a ir nuevamente. Lo...

El lugar sigue siendo muy bueno, los platos exquisitos, bien elaborados y sobretodo abundantes, el único detalle y que nunca nos había pasado con ni familia es esperar mucho para la preparación de un plato sencillo como es un entrecot con guarnición de papas, pero es entendible es un lugar muy concurrido, pero lo que es muy reprochable la mala atención de una de las mozas, en ningún momento se acercó a la mesa para ver si necesitábamos algo, sólo lo hizo para traer la carta y cobrar, el resto del tiempo debimos estar a puros manotazos para que desde lejos le pidamos postre, al final me resigne y después de más de 30 minutos esperando in café pedí la cuenta y me.retire, de igual modo lo recomiendo es un sitio muy ameno, la mayoría de las veces que hemos ido nos atendió Cintia, ella es muy cordial y atenta y hace...

Gringo de la Ripa se despacha con empanadas que parecen hechas en la cocina de una abuela. Masa casera, suave, con repulgue canchero. Probamos la de verdura con morrón rojo: húmeda, sabrosa, con gusto a hogar. La de carne tiene ese dulzón clásico que hace juego con la cebolla, y el hojaldre no empalaga. Todo llega calentito y en su punto justo. El tostado es una locura: pan dorado, crujiente, con jamón, queso, tomate y huevo, servido en porciones XL para compartir o mandarse una solo en modo ‘me lo merezco’. Comida simple pero hecha con alma y contundencia, sin vueltas. Perfecto para una cena de entrecasa con calor de bodegón y sabor de puesto callejero bien hecho. El lugar no busca ser fancy: busca llenarte, gustarte y hacerte...