Restaurant El Firpo — Restaurant in Tandil

Fuimos a comer el feriado largo, fuimos recibidos por el dueño, el cual nos designó una mesa enseguida pero se olvidó de seguir atendiendonos,y eso que el local no estaba lleno,ni mucho menos,nos tomo unos 20 minutos que nos dieran el menu. No te dan ningún dip,y a disposición en la mesa no hay más que un salero y servilletas. Tienen un menú de 4 páginas en el cual está la comida y bebidas a disposición,no había prácticamente nada disponible,según ellos porque se les agotó la comida durante el feriado, sin embargo estaba abierto el local, y el dueño no te advertía que no había comida lo cual te hacía perder tiempo intentando adivinar que había o no,lo que te hacía perder la posibilidad de ir a otro local,ya que ya habías perdido tiempo ahí. Rabas $8900 ,literalmente las rabas solas sin condimento,ni provenzal, ni salsa para mojar. Con 1/4 de limón cortado que no alcanzaba para las rabas. Tuvimos que preguntar que se podia pedir porque lo que pedías no había. Nos dijeron que quedaba 1 bife de chorizo a la criolla(7 mil y algo salia), y una bondiola a la mostaza(6 mil y algo),esto termino siendo a medias asi. El bife estaba duro con papas pasadas de frito, sin huevo o alguna verdura,como abejas, que suelen ser comunes en la versión criolla. Si tenía morrón rojo y verde con cebolla ,todo en tiras(7 tiras aprox)pasado de aceite quemando en los bordes,pero duro de lo crudo; La bondiola, que eran dos bifes,no vino a la mostaza,vino con un puré de zapallo que con suerte eran dos cucharadas,junto con las mismas tiritas de morrón crudo y aceitado. Ninguno de los dos platos estaban condimentados con algo más que sal. La verdad no es un lugar recomendable para ir ni como turista ni como vecinos,los precios altos para lo que ofrecen,tenés que hacer señales de humo para que te atiendan,no miran a los clientes ninguno de los empleados,ni el dueño te mira y eso que el está sentado de cara al cliente. Lo único rescatable es que el lugar visualmente es lindo y hay ricos tragos ,por lo menos así lo fue el atardecer y sex on the beach($3300).La noche salio $27700 para...

Es la primera vez que vamos y la verdad la atención por parte de los/as mozos/as fue excelente y muy agradable, de verdad fue una experiencia confortable, muy atenta en todo momento. De bienvenida nos trajo una bandeja de diferentes pancitos (todos muy sabrosos) acompañado de una especie de salmón al escabeche o similar, que nos voló la cabeza tanto de sabor como de sorpresa (ya que no es usual). Luego pedimos las 3 sugerencias del chef: Calabaza rellena tenia champigñones, choclo, y más verduras (abundante y delicioso), una bondiola braseada con verduras y de guarnición papas fritas (se puede elegir puré, entre otros), y bife de chorizo a la antigua (que se cocina entre verduras y vino) también las pedí con fritas. Los 3 platos un manjar de sabores, el emplatado espectacular con una hermosa presentación, los sabores de cada ingrediente increíbles. Nos pedimos un vino Chacabuco Malbec, lo recomiendo es muy rico. Y de postre (que no ibamos a pedir, pero vimos a los de atrás que lo pidieron y lo quisimos probar) una bandeja de debustacion de todos los postres, (pera con vino, brownie, flan con crema y dll, bananas con crema y tiramisú); todo muy delicioso! Hermosa experiencia, y el lugar es muy cálido, tanto para ir en familia, en pareja o amigos. Super...

Acabamos de cenar con mi pareja; la mesera nos recibió muy bien. Pedimos una picada caliente de 14 platos para degustar. Enviaron 9. Modificaron arbitrariamente lo ofrecido en la carta (y lo que aparece promocionado en su Instagtram) por lo que les había quedado en la cocina -según explicó la mesera-, SIN PREVIO AVISO. Cada porción se presentó quemada y/o recalentada. Algunas tenían un gusto absolutamente dudoso y, por supuesto, decidimos no consumirlas. Claramente, hicieron un rejunte de sobras al verse sobrepasados de trabajo y el azar terminó perjudicando a nuestra mesa. Ante el reclamo, todo fue acompañado por un sentido pedido de disculpas por parte de la mesera, e inmediatamente procedieron a cobrar cada centavo como si hubiesen realizado un buen trabajo. Por supuesto, pagamos el valor indicado en la carta (nosotros cumplimos con nuestra parte) y dejamos una buena propina a la mesera. Realmente una pena -por usar un eufemismo- porque el lugar parece agradable e inspira ganas de quedarse. Tal vez, no siempre sea así, pero esta fue nuestra experiencia. Por supuesto, ya no volveremos a visitar el restaurante. Mucha suerte a quien...