Primero que nada, quiero felicitarles porque sus platillos están muy bien servidos, son atractivos y con buen sabor. Se nota el trabajo que hay en la cocina.
Sin embargo, como cliente, me gustaría compartir una observación que creo podría mejorar mucho la experiencia en general: al entrar, el piso se ve sucio, las plantas están secas o descuidadas, y eso le quita un poco de la atmósfera. Incluso me tocó ver una cucaracha en mi última visita.
Creo que con una buena limpieza profunda y algunas plantas bonitas y bien cuidadas, el lugar se vería mucho más acogedor y fresco, sin que esto implique una gran inversión de tiempo o dinero. Estoy segura de que, con esos detalles, el ambiente y la experiencia serían todavía más memorables, porque la comida ya la tienen muy bien lograda.
También supongo que el chef es el dueño y al entrar la gente veo que no saluda, que no recibe con sonrisa, tal vez solo a quien conozca pero ayuda mucho la sonrisa.
Lo comento con toda la intención de aportar y porque me encantaría seguir viniendo y ver cómo este lugar crece todavía más.
En lo particular yo no regresaría, a mi me gusta que me atiendan bien y no sentí que éste fuera el caso.
¡Les deseo...
Read moreDesde hace tiempo quería probar su cocina y definitivamente no decepcionó. El lugar es pequeño, acogedor, su cocina es el corazón y todo gira en torno a ella. La cecina de atún es un primer acto delicioso , el salmon y la terrina espectaculares y el flan es como los de antaño, todo buenísimo. Pero me dejo mucho que desear la atención del mesero, no nos sugirió vinos para maridar nuestros platillos (cosa que hubiera sumado muchísimo a la experiencia) no nos dijo que habia platillos fuera de carta, vimos como revolvió una copa de vino con una botella empezada y otra recién destapada (grave error) no estuvo al pendiente de nuestra mesa cuando si lo hizo con otros comensales. Creo que un lugar tan cuidadoso en sus sabores debería de poner mas atención en el servicio para generar una...
Read moreMi visita a Marchante Cocina de un Mexicano fue realmente decepcionante. Quería probar auténtica comida mexicana, pero lo que encontré fue todo lo contrario.
El servicio fue lento y poco atento, lo que hizo la experiencia frustrante desde el inicio. Sin embargo, el verdadero problema fue la comida. El salmón mamón era insípido, pero lo inaceptable fue el pollito en su almendro, que venía crudo. Esto no solo arruinó el plato, sino que me hizo dudar de la calidad y el cuidado en la cocina.
El ambiente tampoco ayudó, pues se sentía descuidado.
En resumen, Marchante no cumplió con las expectativas. Si buscas verdadera cocina mexicana o, más importante aún, comida bien cocinada, te sugiero buscar en otro lugar....
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