HOTEL Restaurante El Relojero — Restaurant in A Gudiña

Do not stay at this hotel. My worst experience ever. After 7 hours of hiking, I booked a toom in this hotel. When I arrived, hotel was closed. I called several timea, nobody answered. I tried to connect through booking.com- someone answered we are closed. You can get your money back, cancel a booking. It is not possible, I will loose my money because this deal was unrefundable. I waited for 3.5 hours. Then came taxi with apr.8 people and they had a party in a hotel. Nobody came to me, I was trying to get in before the doors were closed. Pitty that there are not others places but I would...

El Relojero de A Gudiña es, sin duda, un tesoro escondido que merece ser destacado. Desde el momento en que pones un pie en el restaurante, te envuelve una atmósfera acogedora y encantadora. El entorno es cálido y bien decorado, creando un ambiente perfecto para disfrutar de una buena comida.

El trato del personal es excepcional. Cada empleado se muestra amable y atento, haciendo que te sientas como en casa. Su disposición para atender cualquier solicitud y su conocimiento sobre el menú hacen que la experiencia sea aún más placentera. Es evidente que están comprometidos con ofrecer un servicio de alta calidad.

La comida es otro aspecto que brilla en El Relojero. Los platos son preparados con esmero y presentan una fusión de sabores que deleitan al paladar. Cada bocado es un viaje gastronómico que refleja la tradición y la pasión por la cocina.

En resumen, El Relojero de A Gudiña es una experiencia que no te puedes perder. Con empleados que dan un 10 en amabilidad y un entorno encantador, este restaurante se convierte en un lugar ideal para disfrutar de momentos especiales. ¡Altamente...

Veníamos de regreso a casa desde Sevilla con nuestra perrita (6kg). Eran las 15:30h de la tarde. Estábamos buscando un sitio para comer, pero con estacionamiento en la sombra por nuestra perrita, ya que normalmente no te la dejan pasar en los restaurantes. Encontramos este sitio que tenía estacionamiento con sombra pero solo para clientes. No nos importó ya que queríamos comer. Tenían a esa hora todavía la cocina abierta con un menú del día muy variado y muy rico. Pero lo mejor, en la entrada ponía que admitían la entrada de tu mascota. Llevamos a nuestra perrita también para el comedor y sin problema. La camarera que nos atendió de diez. Le trajo un cuenqito de pienso extra para razas pequeñas a nuestra perrita. Nos atendió en todo momento con rapidez y mucha amabilidad. El sitio es amplio y muy limpio. Muy recomendables para todo el mundo pero sobre todo para viajeros con sus mascotas (lógicamente siempre que tu mascota se sepa comportar). Nosotros volveremos seguramente otravez porque admiten a nuestra perrita y porque se come muy bien. Ah,...