El Horno de Don Juan — Restaurant in Adrada de Pirón

En un pequeño pueblo de la provincia de Segovia llamado Adrada de Pirón encontramos un pequeño restaurante llamado el horno de Don Juan un lugar de cuento para disfrutar de una buena cocina nada más llegar nos atiende Raúl qué es el dueño el cocinero el jefe de sala y todo hoy en día para tener un negocio hay que llevarlo uno como lo hace él nos pasa a la sala y estamos en un lugar acogedor rodeado de aperos de labranza de bonitos cuadros , una vez ya sentados en la mesa repasamos su carta viendo qué es lo que vamos a pedir su carta no es muy extensa pero sí te ofrece mucho producto de la zona. Su riquísimos judiones con oreja, el morro de cerdo guisado una exquisitez y cómo no vamos a probar esa riquísima sopa de ajo receta de la tía Nati qué con el frío que estaba haciendo nos apetecía mucho. Todos estos entrantes estaban riquísimos, pero claro nos habían hablado tanto del cochinillo que no tuvimos otra opción que probarlo. Un cochinillo hecho en el horno de leña de casi 100 años que luego nos enseñó muy amablemente . Qué podemos decir , el cochinillo jugoso con una corteçita muy crujiente algo delicioso bien elaborado con una simple receta de un buen saber hacer un poco de agua y sal, la verdad es que nos pusimos las botas. Para terminar nos ofreció la carta de postres. Y como estábamos por la zona estaría mal no pedir un típico ponche segoviano, y tampoco podíamos perdernos la riquísima tarta de queso y naranja. Al final Raúl nos trajo unos licores buenísimos. Lo que sí puedo decir es que pronto volveremos para probar el cordero que también es una de las especialidades en el horno de Don Juan. Gracias a Raúl y a su equipo por haber sido tan atentos...

Un rincóncito muy especial donde compartir momentos inolvidables. Me parecen muy poco correctas,poco creíbles y de falta de respeto las críticas al precio de la comida. Habría que ver que han comido ustedes y que han bebido porque para llegar a esos 45 euros por cabeza habrá tomado primero, segundo, postre y café acompañado de unas copas de buen vino. Los asados son por encargo, lo cual garantiza productos frescos y de calidad, las croquetas y los pimientos rellenos de infarto, los postres caseros irresistibles y de chuparse los dedos , los licores de la sobremesa variados y deliciosos, tiene una carta de vinos buena y con precios ajustados. Y lo dice una persona a la que no le sobran los duros pero que no cree en duros a pesetas. El local es único y con un trato familiar muy correcto, ya quisieran muchos restaurantes con medallas ofrecer la calidad y el trato de Juan y Esperanza, no podía ser más cercano. Este sitio funciona con el boca boca porque el sitio no podía estar más escondido. Y eso después de los años que lleva funcionando dice mucho de lo que ofrece y de cómo la gente se fideliza a ellos. Ojalá lo podamos disfrutar por muchos años. Nosotros los tenemos en nuestro corazón, celebramos nuestra boda con ellos y no podemos estar más...

El sábado me pase por Horno de Don Juan sin saber que me iba a encontrar. De entrada el rincón donde se ubica no puede ser más acogedor. Para los que vamos de Madrid, solo el sentarte en esa terraza a degustar un cervecita fresquita escuchando la tranquilidad del sitio, es un auténtico placer. Para continuar, pasar a uno de los salones de una casa restaurada con un cantidad de detalles que la han convertido en un lugar acogedor, donde se aprecia el cariño que han puesto en conseguir un lugar que conserva lo tradicional rural y a la vez interesante y bonito de visitar. Yo no sabía que pedir pero Raúl me saco de dudas. Como no reserve (ERROR!!!) no pude degustar los asados. Pero me comí unas croquetas (no os podéis ir sin probarlas) y unas carrilleras en salsa, que cosa más rica, madre!!! Con un buen vino, simplemente delicioso!!! Y para rematar el postre. Tarta de queso con sabor a naranja. De los quitan de verdad el sentido, que bueno!!! Todo amenizado por una buena conversación y el trato cariñoso de Raúl y Yoli, que también tenía que conocer antes de irme. Luego la sobremesa en la terraza con mi whiskito en copa de balón. Por la noche tiene que ser un escándalo. Muchas gracias Raúl y Yoli por una jornada fantástica. Volveremos...