A wonderful local place in a beautiful area known for its rice dishes. Today we had the Chapadillos, that is, a tapa of smoked eel on bread with tomato. Also the Ortiguillas de Mar, a sort of delicious fried algae. Main course Rice with artichoke, squid and squilla mantis, a sort of mantis shrimp which is fantastic to add a strong seafood flavor to the rice. All dishes accompanied by a Llagrimas de la Terra white wine. Service was good although kitchen was a little slow due to the...
Read moreSituado en el corazón del Delta del Ebro, "La Barraca del Delta" es un restaurante que captura la esencia de la cocina local con un toque moderno, ofreciendo a sus visitantes una experiencia gastronómica inolvidable junto a unas vistas espectaculares de la naturaleza que rodea el delta. Este encantador establecimiento destaca por su compromiso con la sostenibilidad y la promoción de los productos de la región, lo que garantiza platos frescos y de la más alta calidad.
La atmósfera de "La Barraca del Delta" combina perfectamente con el paisaje, ofreciendo un ambiente tranquilo y acogedor donde los comensales pueden relajarse y disfrutar de su comida. La decoración, inspirada en las tradicionales barracas del delta, añade un toque auténtico que enriquece la experiencia culinaria.
Una particularidad del restaurante es su política en cuanto al menú: para pedir el menú del día, es necesario que todos los comensales de la mesa lo elijan. Aunque esto puede ser visto como una limitación, también es una ofensa a la libertad de poder pedir lo que quieras, máxime si eres el que va a pagar. Quizás lo cambien en un futuro. Precio calidad adecuado.
En resumen, "La Barraca del Delta" es mucho más que un restaurante; es una celebración de la cultura y la gastronomía del Delta del Ebro. A pesar de la política del menú, la calidad de la comida, y sobretodo de sus arroces junto con el entorno sereno y la hospitalidad del personal hacen que cualquier visita sea una experiencia memorable y...
Read moreLlegamos con mi pareja muy pronto. Restaurante casi sin gente y terraza absolutamente vacía .Tenemos reserva dentro y pedimos que mientras esperamos el arroz (20 minutos/media hora) nos dejen tomar algo rápido en una de las 15 mesas vacías de la terraza y dicen que no además con chulería y prepotencia. Supongo que tiene miedo que en aquellos 20 minutos se les llene toda la terraza de golpe o no quieren perder esos 20 segundos desinfectando otra vez una mesa. Empatía cero y amabilidad cero con los clientes que les vamos a ayudar a salir de esta crisis. La comida buena y el servicio correcto, todo hay que decirlo. Pero lo mejor está por llegar; tras irnos de allí a los 50 km nos damos cuenta de que nos olvidamos el móvil en el restaurante. Volvemos acalorados tras 100 km con aquel calor y en la terraza aún hay una mesa grande ocupada de un grupo de bastante gente aun comiendo. Todas las demás mesas vacías. Les pedimos por favor poder tomar un refresco rápido de 5 minutos antes de seguir camino y su respuesta es esta: "no". He leído otros comentarios acerca de la amabilidad de esa gente y ya me cuadra un poco más. He organizado muchas comidas allí para grupos de moteros a los que pertenezco y eso se ha acabado; no volveremos nunca más ni vamos a enviar a nadie allí jamás. A la gente se la trata con cariño señores. Lo que ha quedado claro es que a ellos les sobran los clientes y a nosotros los restaurantes. Seguro que nos esperan en otros sitios...
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