San Macario Restaurante — Restaurant in Andorra

Fuimos la semana pasada un grupo de cinco amigos a comer con reserva previa. Tienen dos opciones de menú: 35€ o 13€. Nosotros elegimos el de 13€, había 3 primeros y 3 segundos a elegir más el postre. También había otros 3 primeros y 3 segundos con suplemento. De beber pedimos agua y vino rosado, nos sirvieron Glarima (muy agradable). De primero pedimos: salmorejo, penca de acelga rellena de bacon con queso y crema de espinacas y también arroz con cebolla caramelizada y longaniza. De segundo: piquillos rellenos de huevos fritos, calamares con salsa tártara y además solomillo de cerdo con salsa de piquillo ( este plato tenía suplemento de 5€). De postre: vasito de chocolate con almendras y tarta de oreo. Todos los platos estaban muy buenos y bien presentados. Además todas las opciones son cosas que se nota que tienen trabajo detrás y no te preparas en casa habitualmente. El restaurante es muy bonito, con una decoración moderna y agradable en el que el personal ofrece una atención excelente. Pero sobretodo es un lugar que merece la pena visitar por las vistas tan buenas que tiene. También se puede ir a tomar algo a la terraza desde la que se ve todo el pueblo. En el restaurante tienen llave para ver la iglesia de San Macario. Creo que es un lugar especialmente adecuado para personas que son nuevos en la zona y para familias con niños ya que hay un parquecito en el que pueden jugar sin peligro mientras los padres toman algo. Respecto a la actual situación COVID19: nosotros comimos dentro del restaurante pero fuera hay mesas en la terraza en las que no sé si se puede comer o solo tomar algo, sería cuestión de preguntar. Pero dentro del restaurante las mesas están bastante separadas. Recomiendo ir...

Hoy hemos estado comiendo en este restaurante tan laureado por tanta gente. Bueno realmente no hemos comido, hemos sufrido de principio a fin. Para empezar no funcionaba el aire condicionado. Unos ventiladores giratorios daban aire a varias mesas de manera insuficiente. Por ser sábado el menú era de 20 € con vino y agua. Pedimos arroz con bogavante que llebaba un suplemento de 5 €. Imposible de comer. El arroz totalmente pasado. Sin mediar palabra me lo cambian por una triste y exigua tartaleta de ensaladilla rusa rodeada de pan tostado ¿? Otros acompañabtes piden un insignificante carpaccio de bacalao que parece una tapa de bar. De postre solo dos opciones de una tarta de cereza y chocolate que me recordaban a los postres de gelatina Royal. ¡Qué avergonzados estaban que querian invitarnos a comer aunque no hemos querido! Estoy pensando en los novios e invitados a una boda que esta tarde celebraban alli el enlace. Habran terminado recocidos por el calor. Menos mal que alli en lo alto del cerro correrá el aire esta noche... Ya veo que sigue siendo muy dificil comer con calidad en Andorra. En otra...

He tenido la oportunidad de visitar este establecimiento en varias ocasiones anteriormente por trabajo y siempre he quedado satisfecho con la calidad de la comida. Sin embargo, me preocupa el bienestar de los empleados que hacen posible esta experiencia. Un equipo de trabajo motivado y valorado es esencial para brindar un servicio de excelencia. Horarios excesivos, tareas fuera de las competencias de cada puesto, horas extras y festivos jamás recuperados o remunerados un ambiente de trabajo tenso son solo algunos de los problemas que he escuchado de quienes trabajan o han trabajado allí. Esta situación no solo afecta la moral de los empleados, sino que también se refleja en la calidad del servicio. Un camarero estresado y desmotivado no puede brindar la misma atención que uno que se siente valorado. Es fundamental que a quien corresponda tome medidas para mejorar las condiciones laborales de su equipo, como reducir las horas de trabajo, ofrecer salarios justos y fomentar un ambiente de colaboración. Solo así podrán garantizar la satisfacción tanto de sus clientes como de...