Asador María Eugenia — Restaurant in Baiona

Me encanta cuando voy a un restaurante y este supera mis expectativas. Tenía ganas de probar la cocina del asador María Eugenia, pero además de muy buenos platos me he llevado un atención maravillosa.

De primeros, la pizzeta de pulpo es un parada obligatoria. Recién hecha y muy sabrosa. La mezcla de la crema de patatas, el queso, el propio pulpo y el pimentón es perfecta. Las gyozas de gambas también están muy buenas y la salsa de soja que las acompaña es muy suave.

De platos principales, destacar que se merece el nombre de asador. Ese sabor ahumado está presente en cada bocado. Salmón, picaña, churrasco... Todo jugoso y en el punto que le pedimos. Señalar aquí el buen servicio, ya que nos sirvieron a cada uno lo que habíamos pedido sin preguntar e incluso pusieron la carne junta en un plato grande, ya que era para compartir.

Los postres entran dentro de lo esperado. Tenía ganas de probar la sopa de queso con helado de manzana y volvería a pedirla sin duda. El sabor suave del queso contrasta con la acidez del helado de manzana granny smith. La tartaleta de manzana estaba recién horneada, pero no deja de ser un postre sencillo.

Aunque no tengo duda de valorarlo con 5 estrellas, me gustaría sugerir la elaboración de una carta de postres. Está bien que te los enumeren, pero no sabes el precio de cada uno ni te permite...

Una auténtica joya gastronómica. Nuestra experiencia en el restaurante María Eugenia ha sido excelente de principio a fin. Comenzamos con unos entrantes que ya auguraban lo que vendría después: los nachos "Ignacios", acompañados de zamburiñas y vieiras, estaban sencillamente espectaculares. El sabor, la presentación y la frescura del producto nos conquistaron desde el primer bocado.

En los platos principales se mantuvo el nivel, e incluso lo superó. Probamos el rape, las carrilleras al vino tinto y un bacalao a la brasa que merece una mención especial por su sabor y punto de cocción perfectos. Todos los platos se distinguían no solo por su cuidada elaboración, sino también por la excelente calidad del producto, fresco y tratado con mimo.

Los postres, todos caseros, pusieron el broche final con su sabor auténtico y delicioso, dejando claro que en María Eugenia se cuida cada detalle.

El servicio fue otro de los puntos fuertes: atento, amable y eficaz, contribuyendo a una experiencia aún más agradable. Todo esto, junto a una decoración cuidada y acogedora, convierte a este restaurante en un lugar de 10. Sin duda, un sitio al que volver y recomendar...

We had late lunch here while walking the Camino. We received a very warm welcome, and were allocated a table on the terrace with beautiful view over the ocean. As vegetarians, we were happy with the many veggie options available. We both had the vegetarian hamburger which was delicious. On the top it off, we were offered a beautiful stamp for our...