Casa Artemio — Restaurant in Cabanes

The waiter forgot to put our order in, and ignored us several times while we asked for our food. We had to ask another young waiter twice, and people were arriving after us and leaving before we had even eaten our starters. If you come here, avoid the bearded waiter with glasses. He took our order and never came to own his mistakes, not even check if we were ok or needed something else. I have never been treated this badly at a restaurant. We were charged 12 euros for a very ordinary wine. We will not be...

La comida no estuvo del todo mal, eramos 17 pax, pedimos unas raciones de bravas, mejillones y calamares, las bravas buenas pero escasas para su precio y el alioli era un intento de ser casero, los mejillones estaban decentes los que no estaban podridos o sin abrir, algunos olían mal y los calamares caros pero decentes. Se me olvidaba comentar que estuvimos en el salón de la planta de arriba, y para nuestra sorpresa fuimos a pedir unos "tanques" y nos dice la camarera que arriba no se podía pedir cerveza de barril que era un esfuerzo de una destreza muy grandes subir las cervezas al piso de arriba que solo se podia pedir "tercios", lo que nos dejo a los presentes algo estupefactos. Paso ahora a comentar el tema de la paella, pedimos paella de marisco para 12, la verdad es que fue lo mejor de la comida, bien de cantidad ect... si que es verdad que notamos una perdida de calidad respecto a otras veces que fuimos imagino sería por que solemos pedir para 4, y claro lo suyo para 12 hubiera sido poner 2 paelleros y no todo en uno... Por último decir, que la experiencia la hubiera clasificado de positiva si no es que tras pagar una cuenta de mas de 400€, no se han dignado ni han tenido el detalle de invitar a tres miseros chupitos, segun nos dijo no lo tenía por cortesia, asi que yo por cortesia les escribo esta...

La decoración del sitio es bastante cutre, hay mesas vacías pero aún así tienes que llamar para reservar. La comida bastante regular, pedimos mejillones, la mitad venían vacíos y el resto eran minúsculos, la ración de ensaladilla cabía en un vaso de yogurt, el ali oli de las patatas bravas demasiado denso y pobre de sabor, las puntillas o chopitos demasiado rebozado la mitad del plato es “morralla” , la comida la salvó la ración de calamares, el resto decepcionante. La ubicación es muy buena, frente al mar, el servicio es rápido y los camareros son bastante simpáticos, es lo único bueno del sitio. Para ser un sitio de playa bastante concurrido y el único en Torre de la Sal, te cierran dos o tres días a la semana, lo cual quiere decir, que el turista o el cliente no les importa nada. Se adaptan a sus necesidades, no a las del cliente. El chiringuito “Dolce Vita” también es de ellos, te puedes encontrar a 5 ó 6 personas trabajando para un chiringuito de 10 ó 12 mesas, demasiado personal revoloteando. En general, es bastante caro, no lo recomiendo, pero no hay otra cosa. Mejor sitio “venta de Germán” pero hay que ir en coche, no está lejos de Torre de la sal, a 5 min. La diferencia es abismal en...