Meson Hnos. Jiménez — Restaurant in Calera y Chozas

Experiencia terriblemente mala. Comimos yo y mi pareja de menú del día, arroz caldoso y una “parrillada de carne” y digo “parrilada” porque no estaba hecha en parrilla. Además de que el arroz caldoso sabía a cámara y una mezcla de sabores increíble, pasadísimo y servido en cazuela de barro lo cual está prohibido por normativa. La parrillada sin si quiera estar hecha a la parrilla muy mala, ni siquiera llevaba sal la carne, totalmente dura como un zapato y ni en un mal supermercado tienes esa calidad tan mala de carne, tenía una guarnición de patatas “panaderas” patatas totalmente pasadas y reventadas sin ninguna consistencia. Lo mejor de todo el postre, que eran tartas de menú que ni siquiera hacen ellos, normal que fuera lo único que estaba bueno porque si fuera por el personal de el restaurante... Además de esto añadir que a un cliente sentado en la barra le ponían coca-colas de lata y los que estábamos sentados en las mesas de botellín, me imagino que era para que pidiéramos más. Voces en el “comedor”. Resumiendo una atención pésima. Añado también que desde donde estaba sentado podía ver como uno de los camareros bebía vino en la cocina y comía cuando supuestamente estaba trabajando. Tardaron muchísimo en darnos de comer y eso que no había mucha gente. Pero bueno se comprende cuando en vez de trabajar te dedicas a comer y beber vino.

Resumiendo un muy mal sitio en el que no pararse, mala comida , cara y pésima atención nada que agradecer salvo el que nos hayan atendido así...

No volveré jamás. Me han cobrado 12'80€ por un plato de salmorejo, caña de cerveza sin alcohol y un café con leche. 12'80€ no bastan para hablar de estafa, pero la idea es la misma. Tras tomar una caña de cerveza sin alcohol y un plato (enorme, eso sí) de un salmorejo líquido como un gazpacho, sin más aderezo que un cuarto de huevo cocido despedazado en el centro, un chorro de aceite y pimentón, tan aguado e insípido que ni lo terminé, atendida por un camarero chuloplayas que trataba con enorme desprecio a su compañera, decidí que ya era suficiente y pedí un café con leche. Quería tomarlo fuera de aquel comedor aunque fuese en aquella cutre terraza achicharrante frente a la autovía, así que me dijeron que lo pidiese en la barra del bar al pagar y lo llevase yo misma.

La nota que le pasó el camarero chuloplayas al encargado de la caja en el bar era tan escandalosa que, tras preguntarme si sólo había tomado la caña y el gazpacho, el que atendía el bar (por cierto el único amable) se fue a preguntar al comedor. Salió un hombre malhumorado al que supongo el dueño y le dijo que aquello era un menú del día. La explicación fue que el salmorejo no estaba en la carta (en efecto, no estaba; él mismo me lo había ofrecido cuando le pregunté si tenían) y que por lo tanto aquello era un menú. Así, con dos cjones Hacía calor, había moscas, la barra estaba pegajosa de tanta grasa y yo tenía tantas ganas de irme que sólo dije algo así como: "madre miaa..." Y me fui...

MUY IMPORTANTE PARA CLIENTES HABITUALES Uno de mis restaurantes favoritos, hasta que ha cambiado de dueño... Llego con mi familia y notamos ya que el ambiente ha cambiado. El trato con el cliente horrible, eramos 6 y nos pusieron en una mesa redonda y otra cuadrada anexa, parecíamos que estábamos separados. A la hora de pedir nos sirvieron el agua en botella de plástico (los vasos sucios), no existía carta por escrito, ni sabíamos precios de ningún alimento o bebida, pedimos a ojos cerrados ya que el camarero lo decía todo de boca, y nos quedamos porque nos dio vergüenza levantarnos. No había apenas carne asada, un restaurante famoso por su horno de leña, no hacen nada ya, y apenas carne. Un familiar pidió un chuletón, y le pusieron entrecot chamuscado, nos vendieron secreto ibérico, y nos pusieron secreto blanco. Nos vendieron un surtido de ibéricos y quesos, en la foto se aprecia que no son ibéricos, son sacados de una tabla envasada del DIA o MERCADONA. Postres, arroz con leche, natillas y flan. El flan muy rico, las natillas y el arroz con leche caliente, aparte nos les quedaban y tuvimos que compartir natillas...ni las comimos. A parte, las moscas campan a sus anchas. y la broma buena es cuando llega la cuenta, 20 euros por persona....20 EUROS sin calidad del producto, ni asado ni nada. VERGONZOSO me parece que este restaurante haya cambiado...