" Quiero y no puedo "
Quizás lo malo de ir a sitios de este tipo es las expectativas que uno se crea previamente. En mi caso fue un regalo para mí pareja, y fue nefasto. A destacar eso sí la amabilidad del camarero que nos atendió, se tiene que decir todo. Para empezar pienso que en un sitio donde te sirven comida de autor con una media de 20-30€ por plato, en la mesa tiene que haber un mantel, y el baño no puede estar abierto justo al lado de las neveras dónde se encuentra la comida, por lo menos des de mi punto de vista es antihigiénico. Entiendo que a veces el espacio es reducido, pero siempre hay opciones para " salvar " un poco la situación. Voy a por la comida... de 4 platos que pedimos 2 no los tenían, se puede llegar a entender si, ¿ pero se suele avisar previamente de lo que no tienes de la carta, o se te ha acabado no? De primero pedimos un ceviche, sin nada a destacar, buen gusto tenía porque estaba bien aliñado, pero sin más, los he probado mejores. Seguimos con un canelón XXL, a la vista de 10, en boca si queréis probar una pasta seca cómo tal, os lo recomiendo. Luego el "lobster roll" un pan con mantequilla ahumada, sin más, con carne de bogavante (fría) sin ningún tipo de gracia en boca. Estaba quemado por encima, nos quejamos y reiteradas veces nos dijeron que lo hacían siempre así... no creo que sea la respuesta más conveniente pero por lo menos nos lo restaron de la cuenta. Por último un arroz negro, este si en su punto y no era una exquisitez pero estaba bien, presentado en lata y de gusto estaba bueno. De postres pedimos un coulant de pantera rosa que estaba bien. En definitiva no lo recomendaría, y a ellos les diría que a veces a pesar de que la presentación sea importante hay que profundizar en muchos más aspectos cuándo hablamos de cocina.
PD: no añado fotos porque os puede pasar como a mí, había visto muchas y me imaginaba algo totalmente distinto, así que no os...
Read moreEste Domingo mi cuñado me invito a comer, sabía que era en Canovelles, pero no sabía que Rte, al llegar a una terraza de bar me dijo, es aquí, BAR BAENA y me dije este hombre se ha equivocado; tenia a la vista el clásico bar de barrio de chatos de vino y cañas de cerveza. Luego me enteré por el chico (nieto de los fundadores) que nos atendió (muy agradable) que precisamente querían mantener la esencia del Bar Baena que durante muchos años fue de los abuelos de los nietos que hoy en día llevan el restaurante. Desde luego antes de sentarme en la mesa que habían reservado para nosotros, no me podía imaginar que estaba a punto de gozar de un verdadero festival gastronómico. Nos dejamos aconsejar a la hora de elegir lo que íbamos a comer y bueno no sé muy bien como expresar lo que llegamos a gozar tras un continuo de platillos para compartir que haría cada uno de ellos una escalada a mejor con cada uno de esos platos. Cacahuetes que confirmaba mi visión y ratificaba mi paladar, pero en realidad no era una cacahuete, luego unas nubes de algodón que mezclaba la textura de una nube de azúcar con un extraordinario sabor de foie que se ocultaba en su interior, luego no recuerdo si en este orden llego el canelón de pintada en el interior de un hueso de res que contenía su tuétano, donut de morcilla , xuxo dulce con relleno salado y una galta con setas , para acabar con una paella del señorito. Los postres espectaculares también, escogimos la pantera rosa, la tarta de queso y la esplendía tarta Baena. En fin que hasta los cafés estaban buenos. Ni que decir que el trato del personal fue como sentir que habías llegado el Domingo a comer con los abuelos. Muy bien en serio. Volveremos muy pronto. Gracias por hacérnoslo pasar tan bien...
Read moreHi vaig anar a sopar i l'experiència em va decebre. D'entrada van tarda força a demanar-nos beguda i oferir-nos la carta. Vam demanar pel menú gastronòmic i la primera sorpresa va ser que el menú és precisament, sorpresa. Ens vam decidir per provar-ho ja que essent la primera vegada que veniem un menú gastronòmic generalment conté alguns dels plats més emblemàtics del restaurant. Vam suggerir un canvi a la carta afegint un plat i no ens van comentar per quin plan el vescanviarien. El concepte sorpresa és molt arriscat perquè el començal té dret a saber perquè està pagant. El resultat del menú molt decebedor, pràcticament tots els plats són vegetarians excepte dos (sóc amant de plats vegetarians), alguns amb la sensació que han fet servir les mateixes salses de fons, i un "lobster roll" on el llamàntol és inexistent. La sensació d'aquest menú és que et posen els plats que han de sortir de cuina i no ho han fet per alguna raó. 70 euros ho trobo una exageració pels plats que he provat. Hi ha bona intenció per part de l'equip però, tot i copiar plats de restaurants amb estrella que ja són un èxit, tenen molt de marge de millora. Els postres realment el més decebedor de tot. Esperant coulants d'avellana, no n'hi havia i la proposta que ens van servir no ens va agradar. L'intent de trangredir en la rebosteria no és gens encertat. Ens sap molt de greu perquè teniem moltes espectatives vers...
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