El Golfo Food & Drinks — Restaurant in Castell d'Aro, Platja d'Aro i s'Agaró

Estuvimos mas de media hora esperando para ser atendidos y pedir nuestra comanda para beber una copa y todo que la terraza estaba vacía los camareros pasaban de atender. Solamente al llegar antes de sentarnos a la mesa antes de acompañarnos el supuesto camarero que nos iba a atender escuchamos como un chico le dice que ya no sirven cócteles y otro chico que estaba en la barra dijo en voz alta que sean los últimos clientes. Al ver que no nos atendían nos hemos dirigido a la barra principal para manifestarle nuestra inquietud y entonces la compañera del barman no ha echo caso y ha seguido a la suya ignorando de mala manera encima mirándote desafinadamente con mala cara. Al ver que nadie me hacía caso he vuelto a insistir con toda la educación y entonces el barman (con septum y dilataciones, castaño claro y ojos claros y joven sin juzgar por las apariencias no está la intención de mi reseña) dice chillando “que quieres tío” “que quieres” y com malos gestos y con intención de empujarme entonces yo me he ido asustada a la mesa donde estaba mi pareja contándole lo sucedido y que no me lo podía creer el trato que había recibido. Dicho esto mi pareja con toda su buena intención se levantó hablar con el barman para saber que había sucedido pero de golpe el barman seguía reprochando chillando sin entrar en razón y faltando el respeto de una manera denigrante y seguida acercándose con intención de agradar físicamente diciendo “gil**as que quieres que haga”. Entonces pedimos para hablar con el responsable del local y el barman se ha puesto aún más nervioso al pedir que queríamos hablar con el responsable todo seguido el barman seguía poniéndose chulesco de forma desafiante entonces tuvieron que intervenir los demás camareros para apaciguar la situación tan desagradable que tuvimos que aguantar. Hasta que llegaron los dos responsables del local los cuales vieron la última parte del show con sus propios ojos protagonizado por el barman y le dijieron que se tranquilizara que se metería adentro de la barra. Entonces los dos responsables nos atendieron y dijieron que les explicáramos lo sucedido aunque el barman no paraba de provocar y no entraba en razón para ver la gravedad de la situación que ha provocado el mismo. Finalmente, los responsables nos han pedido disculpas y nos sirvieron una copa porque no teníamos ganas de que esto fuera a más porque nos hemos visto en una situación tan lamentable y vergonzosa que no nos queda otra que aceptar las disculpas de los dos responsables. Sinceramente debo de decir que personas como el barman no deberían de estar de cara al público jamás en ningún puesto porque da muy mala imagen al local y que quizás se habrá metido con otros clientes en otras ocasiones y da una imagen que da...

Fui invitada a comer debido al festival "Desemboca". La sala donde era el concierto estaba muy mal preparada, tipo comedor y con unas mesas largas en fila ya que, además, se celebraban dos cumpleaños. No comento más acerca del concierto aunque añado que había muchos camareros "interesados" en coger pedidos y cuando finalizó el concierto todos esos camareros "desaparecieron" ya que estuvimos esperando bastante rato hasta que se acercó un camarero y nos dijo que pensaba que ya habíamos pedido... La comida mediocre, (no sabían muy bien cómo era la invitación y nos dijeron que cogiéramos el menú pero que la bebida la teníamos que pagar)... Aceptamos pero si llego a imaginarme el mal servicio y la mala calidad de la comida, no hubiera hecho 100 km de ida y otros 100 km de vuelta para acabar decepcionada y estafada. No sé si es lo habitual o porque fué una invitación pero mal servicio de mesas, golpes constantes en la silla al pasar la gente por la mala organización de la sala. La comida: zamburiñas pasadas de pimienta, sólo sabían a eso Escalivada, muy al dente y bastante fría, cero sabor. (Le podrían haber puesto la pimienta de las zamburiñas...) Entrecot lleno de nervios. El acompañamiento correcto, patata asada y pimientos. Rodaballo... Me pusieron un trocito de dos dedos lleno de gelatina, raspas y la espina central. (No comí apenas) El acompañamiento, unos "spaghetti" de calabacín horribles, mal cocinados y sin ningún sazonado ni gusto. El postre fue el broche de una "experiencia" para olvidar... "Crema catalana" lo pongo entre comillas porque eso no era crema catalana, con grumos, eran blancos y duros (quizás algún espesante mal usado) textura líquida, aspecto de estar "cortada"y sin caramelo, azúcar por encima y ya. Se quedó en la mesa. Debería haber reclamado pero al tratarse de un invitación y sumarse las decepciones tenía muchas ganas de irme del restaurante. Ni fotos tuve ganas de hacer. (Nadie se acercó a preguntar que tal todo y el porqué de la comida dejada en los platos) Ah, si os da por pedir un vermut, os aviso: en vaso bajo con dos bloques de hielo que al quitarlos había un dedo de vermut y al módico precio de 5,50€. Dejé que me robaran y "estropearan" el domingo, lo tengo claro, pero espero que leas esto y a...

TOSTADA DE DEDO

Escribo esta reseña para que a nadie le vuelva a suceder lo que me pasó el pasado domingo cuando fui a desayunar a este establecimiento. No era la primera vez que iba, pues en otra ocasión acudí simplemente para tomar una copa y la ambientación del local no era mala, todo hay que decirlo. Dicho lo cual, en esta ocasión fui con unos amigos y cada uno de nosotros pidió una tostada de aguacate con huevo o con salmón. Cabe mencionar, como podréis ver en la cuenta (foto adjunta), que cada tostada costaba 6 euros. En este caso que expongo hay dos expresiones que cobran todo el sentido. Por un lado, el que mucho abarca, poco aprieta, ya que cuando tratas de hacer de todo a modo lucrativo al máximo y sin profesionales que sepan realizar desayunos con unos mínimos, acabas haciéndolo mal. Por otro lado, una imagen vale más que mil palabras, debido a que en las fotos que adjunto veréis como nos sirvieron unas tostadas minúsculas que apenas alcanzaban la medida de mi dedo índice... una vergüenza...

Además, las tostaditas tampoco estaban muy buenas que digamos, es decir, el producto no era muy bueno y la cantidad que ponían, por ejemplo de salmón, era ínfima (apenas unos 10-20 gramos en una tostadita).

Cabe destacar, que primero nos trajeron las tostaditas totalmente quemadas y nos las tuvieron que volver a repetir, pero bueno ese es otro tema en el que no he querido entrar.

Concluyentemente, espero que os sirva de ayuda la aportación y la conclusión a extraer es que no es el mejor sitio para ir a...