Hostal la Muntanya — Restaurant in Castellar de n'Hug

Fuimos a comer por los buenos comentarios que tiene y porque leí en redes que eran muy agradables con los perros, incluso dejándolos entrar en el comedor, cosa que pude comprobar cuando reserve ya que les dije que en terraza puesto que llevaba perro y me dijeron que donde quisiera, así que me encantó ese detalle e íbamos encantados. Llegamos al pueblo a tiempo, pero debido a lo complejo de aparcar tuvimos que esperar un poco hasta encontrar uno. Esto hizo que llegásemos unos 10-15 minutos más tarde de la reserva, cosa de la que me disculpe al llegar pero me pareció que no sería un problema ya que no habían mesas libres, hasta que al momento se levantaron de una (de haber llegado a mi hora hubiera tenido que esperar). Bueno, la comida bien, buenísima, aunque notamos que nos traían todo muy de golpe, sin esperar a que acabemos, aún y así no nos molestó y seguimos comiendo. El dato oscuro para mi y que nos arruinó la visita fue que cuando mi marido aún estaba comiendo (por problemas médicos que no vienen al caso come algo lento, aún y así eran las 15:00 no me parece que llevásemos un tiempo exagerado) pues el camarero nos pregunta si queremos postre o café, yo ingenua tratando de ser simpática le digo que se espere que mi marido come muy lento y me suelta: ya pero es que también habéis venido tarde. Nos quedamos alucinando con esa respuesta, desconozco si hay tiempos para estar en la mesa, si es así que se avise al cliente cuando reserva y por otro lado la mesa se liberó cuando llegamos, no antes, y también tardaron 10 minutos en montarla para nosotros así que esa frase nos precio de mal gusto, pedimos café, trajeron la cuenta sin pedirla, pagamos y nos fuimos. Total, la comida está bien pero ese suceso nos la amargó, subiremos en breve al pueblo pero...

La verdad es que fuimos para desconectar y estar alojados en el típico sitio de postal y en vez de esto nos encontramos con… La cena: No pudimos cenar por tema de alérgenos… total menos mal que siempre llevamos comida y pudimos cenar en la habitación. Nos hubiera gustado cenar en el restaurante. La habitación: Al entrar olía a cerrado(humedad), estaban las paredes desconchadas y el techo agrietado, se oía todo y con la ventana cerrada. Para colmo no avisaron de que tenían el térmico de la calefacción desconectado ( imagino que será para ahorrar en gastos..) nos pasamos la noche buscando donde se conectaba con un frío horrible y sin poder dormir….hasta que a las cuatro de la mañana que ya no pudimos más, llamamos a recepción y nos dijeron que los térmicos estaban fuera de la habitación justo en la entrada de la puerta de la calle, quien lo iba a decir… pero que había edredones para taparse… !!la temperatura era de 10 grados dentro de la habitación!! Nos levantamos por la mañana con mal cuerpo y con dolor del frío. Mira que no suelo reseñar mal porque vemos siempre la parte positiva pero es que…. Vaya con el servicio. El pueblo muy bonito y el paisaje espectacular, el río, montañas, caminos, rutas… Recomiendo otro lugar donde...

😊: Nice views and nice experience in a traditional house in alpine landscape. The room is warm and the dinner wonderful.The landlord takes care of his guests,although you should be prepared for a cultural shock.. 😢: Just avoid going to the Montgrony monastery,as there is a big hole in the road and if you fall in, your tyre will be broken and your day(s) will be destroyed as no one really...