Our expectations were high given the ratings here, the Michelin guide 3 years in a row, etc, and the fact that they are truly farm-to-table. And...they are quite ok! Staff are as friendly as elsewhere in the Benasque region, but better trained and attentive; the atmosphere is lively and yet not too noisy; and while their meat dishes are the true speciaities, they are willing to try other things which sometimes are very good too (i had a porchetta and scallop dish appetiser). Wine-guiding was great too. And the village, truly in the middle of nowhere, is surprisingly neat and tidy when you arrive. We agree, the best in the Benasque valley, we will return...
Read moreDesde el momento en que llegamos, la sensación fue increíble: un entorno de montaña que ya anticipa algo especial, y un restaurante familiar de decoración sencilla, acogedora pero con mucho encanto 🏔️.
La atención del equipo fue sobresaliente: cálida, cercana y muy eficaz, adaptándose incluso a intolerancias alimenticias con toda la amabilidad. Nos sentíamos como en casa.
La materia prima es excepcional: carne de su propia ganadería, verduras del huerto, setas de temporada y pescados del entorno son protagonistas de una propuesta tradicional, cuidada y muy sabrosa.
Entre los platos que disfrutamos en familia destacan: • Entrantes memorables: croquetas caseras, huevos rotos con ceps y foie, alcachofas con jamón o carpaccio de manitas con trufa y pistachos. Todo un preludio perfecto. • Los guisos: albóndigas guisadas, civet de jabalí, manitas o carnes estofadas, elaborados con tradición y cocción lenta, llenos de sabor auténtico. • La carne a la brasa: el chuletón de ternera o buey es simplemente sublime, con un nivel de ternura y sabor que apenas necesita aderezos. Un destino para cualquier amante de la brasa.
Los postres resultaron un broche impecable: crema de mango con helado de yogur, panna cotta con frutos rojos o la famosa tarta de queso son extremadamente delicados y caseros.
La relación calidad‑precio es impresionante: platos elaborados, ingredientes de alta calidad y raciones generosas dentro de un rango medio de precios (entre 35 € y 60 € por persona según Guía Repsol).
Otros puntos a destacar: • Es un restaurante pequeño y muy solicitado, recomendable reservar con antelación, especialmente en fines de...
Read moreHemos pasado unos días en Chia un precioso pueblecito del Pirineo. Nos ha sorprendido el restaurante por el trato y calidad de la cocina tanto que hemos repetido para probar varios platos. Las alcachofas las mejores que he probado, el sashimi de trucha un platazo, el entrecot espectacular, el guiso de jabalí muy rico y el meloso de ternera delicioso. La carne es de su ganadería y al lado del restaurante tienen una pequeña carnicería y venden embutidos caseros y su deliciosa carne, hacía años que no probamos una carne así.
Tienen una buena carta de vinos con mucho vino de la zona y con una parte que llaman vignerons que son vinos de proximidad de poca producción y muy cuidados.
Los niños también disfrutaron de la comida. Tienen una sopa que les encantó, la carne tan rica y blandita la comieron muy bien y la guinda fue el trato tan cariñoso con ellos y la bola de helado de frambuesa.
Las mesas están muy separadas, las ventanas abiertas por lo que nos sentimos cómodos comiendo allí. Antes de reservar la primera vez entramos y vimos que estaba muy bien organizado tienen un buen protocolo de covid19. Nosotros nos sentimos muy bien comiendo allí y eso que evitamos ir a restaurantes porque en general no vemos que sea seguro. En Chongastan vimos que se podía ir sin problema.
En la plaza del pueblo hay un bar con terraza donde se puede tomar alguna bebida, algo de picar o cafés y como es un pueblo pequeño y no había casi gente estábamos sólos en la terraza.
Un lujo Chía. Un descubrimiento su...
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