La Taberna Del Tío Caraco — Restaurant in Consuegra

Viernes Santo, mesa reservada a las 14.30. Nos presentamos y decimos el nombre de la reserva y parece que no tienen la reserva, nos dicen que adelante y nos sientan en la terraza. Mesa sin limpiar, pedimos en varias ocasiones que nos pongan al menos un mantel (de papel) y a regañadientes nos lo ponen. Pedimos las bebidas (tardan) pedimos la comida y eran las 15.45 y todavía no nos habían servido ningún plato. Les decimos que hace ya más de una hora que pedidos nuestra comida y la contestación es que "es lo hay". Viene el hijo del jefe, y nos dice que nos preocupemos. A los 10 min, viene con un plato mediocre de asadillo, pedimos que nos den la bebida y el camarero desbordado nos dice que nos pongamos nosotros el delantal, que él no da para más. A los 5 min, la otra hija del jefe y de muy malos modales se dirige a nosotros con chulería y prepotencia. Decidimos irnos. 25€ por un menú degustación, 25€!!!!! Con entrantes para compartir y segundos mediocres, rogando que nos pongan un mísero mantel de papel. Señores hosteleros del lugar, si no tienen capacidad y profesionalidad para abordar un día festivo, por favor cierren el restaurante para sus familiares y amigos. Pero casi dos horas para comer en lugar de la mancha donde cuyo nombre no quiero acordarme, es inadmisible. Por supuesto,...

Cuando estás viendo estas reseñas es porque necesitas saber que no te equivocas a la hora de elegir un lugar donde comer bien, donde te atiendan bien, que puedas comer con tranquilidad y que puedas saborear un buen producto.... Y si además es a buen precio mejor que mejor. Pues si visitas Consuegra no dudes en ir a la Taberna del Tío Caraco. El dueño, José Luis Y su hijo, David, dos enormes profesionales que te tratan con una mezcla de completo respeto y de familiaridad. La esposa y madre es la encargada de los fogones. Todo éĺlo hace que te sientes, te dejes llevar por sus consejos, te deleites con su MENÚ DEGUSTACIÓN, y disfrutes. Yo lo hice y prometo volver; porque me han dicho que empieza la temporada de cocido, lechales y cochinillo. Mil gracias José Luis "tío Caraco" y familia por habernos hecho tan placentera...

El servicio nefasto tardaron una hora en empezar a traer los platos y uno hora y media más en terminar,. Toda la comida amenizada con una música estridente que no permitía mantener la más mínima conversación con los compañeros de mesa. La comida no estuvo mál, pedimos el menú degustación algo escaso para 4 personas quizá fuera porque al tardar tanto hacíamos la digestión entre un plato y otro, para terminar la pluma ibérica y el secreto estaban casi crudos pero no los devolvimos a cocina por no esperar más y por último el postre después de casi 20 minutos después de pedirlo con insistencia lo trajeron sin cucharillas. En fin un auténtico desastre todo justificado por el camarero y la propietaria porque estaban de ferias. Resumen un sitio...