Meson Los Monteros — Restaurant in Cortes de la Frontera

Estuvimos ayer por la tarde allí porque íbamos recomendados desde el hotel donde nos hospedamos. Al pedirle la carta nos comentaron que era muy temprano, y lo era, como mi niño estaba impertinente por cenar le dimos las gracias y le comentamos que al día siguiente volveríamos. Así fue, llegamos sobre las 12.30, muy temprano tb, le comentamos que nos diera la carta para ir viendo, nos dijeron que la cocina estaba cerrada y no nos la dieron, lo entendimos. A la 1.30 le volvimos a pedir la carta y nos volvieron a comunicar que aún no estaba la cocina pero que cuando estuviera vendría alguien a cantarla. De acuerdo, vengo de chiclana y se como va eso. Mientras nos cantaba la carta vemos que sacan carta a los que están fuera, una carta que habíamos pedido 3 veces pero nunca nos dieron. Pedimos para el niño, pero no podía quitarme de la cabeza porque a nosotros no nos daba carta. Es un mesón, íbamos a comer carne a la barbacoa o parrilla. Así que le pregunto a la que nos ha cantado la carta que porque fuera le han dado carta y a nosotros no, nos dice que la carta hay que pedirla, algo que hicimos 3 veces. Las tapas frías buenas porque las otras parece ser que no nos permitieron probarlas. Me he sentido muy indignada...

Good food for very reasonable prices and nice outdoor sitting get area. We came here several days in a row. Recommended. Did not get a menu, but the waiter told us ehat they had in ok english. Several spanish people (I guess locals) in the the restaurant, which we take as a...

La reseña va dirigida al trato por parte de la camarera del restaurante.

Hemos llegado, y, puesto que no teníamos reserva lo primero que hemos preguntado es si tenían sitio fuera, a lo que nos han dicho que si, nos hemos dispuesto a salir del coche para sentarnos en el sitio que nos indicaba la camarera (hemos tardado un total de 30 segundos), pues en el tiempo en que hemos bajado del coche otra persona se ha sentado en esa mesa.

Obviamente nos hemos tenido que ir, pero previamente le he dicho a la camarera que no me parecía bien que nos dijera que había una mesa y que no nos la guardara el tiempo de llegar desde el coche (repito 30 segundos), en este instante a la camarera se le han inyectado los ojos en sangre, y, acompañado de varios aspavientos, ha comenzado a gritarme e insultarme.

Conclusión: menos mal que nos han...