Estuvimos el otro dia comiendo un menú y parecia bastante bien la relación la calidad precio, dejando de lado el trato de nuestra camarera Lizi por supuesto…. Pedí en mi menu de primero callos con garbanzos y de segundo rosada. Cuando llegan mis callos noté que estaban muy salados y cuando se lo dije a la señorita Lizi su respuesta fue exactamente “y qué quieres que haga”? claro, me quedé un poco en blanco y repetí que no los podia comer de los salados que estaban que algo se podrá hacer, los retiró muy a desgana y me dijo que me traería otros. Al final nunca llegaron y vino mi trucha de segundo plato por lo que procedí a comerla. La sorpresa llegó cuando viene la cuenta y aparece mi menu a precio completo con los callos (los cuales nunca aparecieron) y cuando se lo dije a la camarera me comenta que claro que ya no los iba a traer porque ya tenía el segundo plato, y nunca me volvio a preguntar si los seguia queriendo. Le pedí que debía pagar medio menú ya que nunca vino el primer plato y su soberbia se disparó, discutiendo ahora que si habia comido parte de los primeros. Hice llamar a su “encargada” y la única solución que me dio fue pagar el único plato que comi por separado. Me salió por 0,80centimos menos, de vergüenza. Ya no solo la actitud de dicha camarera y la irónica solución de la “supuesta” encargada sino el despotismo que mostraron delante de todos mis compañeros haciendome quedar como mentirosa. Vergonzoso y de verdad por el precio que pagas puedes encontrar lugares mucho mejor, en los que por lo menos te vas a sentir como un cliente más y no como el payaso de turno. Gracias por el descuento de 0,80centimos, me...
Read moreEn un entorno tranquilo y sin artificios, donde la sencillez es virtud y el aroma a leña todavía parece flotar en el aire, Paella de Cualedro se presenta como uno de esos templos cotidianos del buen comer. De esos que no necesitan etiquetas modernas para defender lo que mejor saben hacer: cocina casera con alma.
Tuve el placer de disfrutar su menú del día, una fórmula que aquí no se interpreta como un trámite, sino como una oportunidad de cuidar al comensal con producto, mimo y sabor. El primer plato, huevos al plato, fue una grata sorpresa: servidos en cazuela de barro, con una base de tomate casero que aún chisporroteaba al llegar a la mesa, y coronados por un par de huevos que pedían pan para no dejar rastro. La yema, melosa; el conjunto, reconfortante y honesto.
El solomillo de cerdo que siguió, tierno y bien marcado a la plancha, llegó acompañado de patatas doradas, con esa textura entre crujiente y mantecosa que solo se consigue cuando se fríe sin prisa. La carne estaba en su punto, jugosa y con un leve toque de ajo y perejil que realzaba su sabor sin disfrazarlo.
El servicio, familiar y eficiente, aporta un valor añadido: aquí uno se siente bienvenido, no como cliente, sino como parte del lugar. El menú se acompaña de bebida y postre o café, y por un precio más que razonable, uno sale de allí satisfecho, tanto en el estómago como en el espíritu.
Paella de Cualedro es uno de esos sitios que mantienen viva la tradición del menú del día como debe ser: sin complicaciones, pero con toda la dignidad del buen hacer diario.
⭐ Valoración: 8,5/10 💸 Menú del día: relación calidad-precio excelente. 📍...
Read moreLlamé toda una mañana para reservar y no me cogieron el teléfono ninguna de las 20 veces que lo prové (des de números distintos pero nada), tuve que personarme allí y me dijeron que no reservaban, que fuera y que si había sitio bien y sino otro día, pero que me apuntaban y que fuera a la 1. Fuimos a la 1 tenían mesas libres y me preguntaron si tenía reserva, perdona, como? No era que no reservaban? Además me habían apuntado pero parece ser que era otra chica y tuvimos que esperar, al final nos sentamos, nos traen la carta y cuando vamos a pedir nos dicen que esto no hay, eso tampoco,... Pedimos lo que pudimos y lo comimos, la comida digamos que bien, sin más. La experiencia fue un poco nefasta en general però había ido antes y no lo recordaba tan "mal". He de decir que nos dijeron que habían tenido un problema con el que les trae la carne, pero el lío de lo de la reserva si/reserva no, y el hecho de que no se dignara nadie en 20 llamadas a coger el teléfono me molestó, suerte que no era ninguna...
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