Bodega Jerezana — Restaurant in El Puerto de Santa María

Una experiencia para olvidar y no repetir. Anoche fue mi última visita a la Bodega Jerezana, que ha acabado con malestar, a pesar de que los productos consumidos estuvieran correctos y apetitosos. ¿Por qué? Siga leyendo quien quiera saberlo (en esto demostrará más interés que los camareros del local). Para empezar, la reserva era para ocho personas, pero nos colocaron diez cubiertos en una mesa enorme del fondo parecida por tamaño a una mesa de ping-pong, donde era más fácil lanzar una pelota que seguir una conversación audible. Y este hecho fue agravado durante toda la velada por una machacona música instrumental demasiado elevada de volumen (de un tipo entre música de ascensor y música de fiesta "rave") por la que en múltiples ocasiones me quejé a los tres o cuatro camareros que aparecieron por la mesa (todos los cuales me respondieron con su absoluta indiferencia, menos uno, que queriendo hacer una broma -que tampoco me agradó- comentó que mejor sería poner flamenco...). Otro presagio inicial fue la ridícula rebanada de pan de baguette colocada con parsimonia y pinzas sobre un platito, que era inadecuada para el caché del establecimiento, y por la que luego nos cobraron nada menos que 1,40 euros, de lo cual también me quejé al camarero que me trajo la cuenta, quien se limitó a resoplar en señal de desaprobación de mi comentario y a sugerir con su lenguaje no verbal que él era solo un "mandao". Además, a pesar de que la temperatura ambiente en el exterior no era nada elevada, dentro del local hacia un frío excesivo. Teníamos las toberas del aire acondicionado apuntando a la mesa. Una sobrina mía pidió amablemente que si podían apagarlo, pero en vista de que no le hacían ni caso tuvo que repetirlo múltiples veces a todos los que aparecían por la mesa. Es cierto que en alguna ocasión el aire dejó de soplar, pero durante muy pocos instantes, pues luego proseguía la mortificante sesión de criogenización. Para colmo mientras cenábamos vimos una enorme cucaracha portuense (quien las conozca sabe que son grandes y vuelan con gran facilidad) paseándose por el marco de una puerta contigua. Se lo advertimos a un camarero, que se llevó las manos a la cabeza y volvió con una servilleta de papel con la que aplastó al pobre animal. Para rematar, al traernos la cuenta vimos que además de la clavada del pan nos cobraron una copa de vino distinta a la consumida (se pidió al principio una copa más cara, de 3,50 €, aunque no quedaba ese vino y finalmente se sirvió otra, cuyo precio de carta era 3 €, y sin embargo pasaron a la factura el primer vino ordenado y no servido). Me faltó muy poco para pedir una hija de reclamaciones, pero finalmente no lo hice, tal vez porque teníamos más ganas de salir del local que de permanecer en él. Eso sí, mostramos nuestro malestar por lo sucedido. Igual que ahora lo comento aquí para aviso de ...

Es una lástima que la falta de 2 camareros ensombrezca la labor del resto de personal. Me explico.

El restaurante está en primera línea de playa, localización inmejorable, con una decoración muy cuidada, una separación entre mesas digna de restaurantes de alto nivel, y un ambiente de lo más agradable.

La carta es razonablemente amplia pero muy bien pensada, con propuestas para satisfacer a todos los gustos. El producto es excelente, y la cocina lo trabaja con maestría y mucho oficio. Muchísimo nivel en todos los platos probados, ninguna pega. Ninguna.

Sin embargo, todo ese grandísimo trabajo se echa por tierra por la falta de 2 camareros más que puedan servir bebida sin tener que esperar diez minutos y verte obligado a levantar el brazo 2 veces porque los camareros están sobrepasados. Es inconcebible que, a este nivel, un comensal espere 10 minutos a una bebida para seguir comiendo, o un cuarto de hora para que le levanten los platos y pedir postre.

Señores propietarios, no es la primera visita y siempre ha pasado lo mismo. Saben perfectamente cuándo van a llenar, contraten 2 extras más. Y no es excusa que no haya gente que quiera trabajar. Paguen más y lo encontrarán, que el beneficio de la bebida pagará con creces su sueldo, y hará que la experiencia esté al nivel de la cuenta, que entonces volveré a...

I had a wonderful experience! The staff was so friendly and respectful,we didn’t have to wait a long time for out food, the menu had a lot of great choices and, when the food came, it was beautifully presented. The most impressive part was the bathroom which was very clean and had a wonderful design that completely impressed me. Overall, i had an amazing dinner and my family and i had a great time! Definitely worth...