Mas La Rovira Restaurant — Restaurant in Espinelves

1.-Reservamos mesa para 3 a las 14:00, ellos reservaron mesa para 2 a las 13:30.Comimos 3 en una mesa de 2. 2.-35 minutos de reloj para que nos tomaran nota. En ese espacio de tiempo, ni pan ni olivas ni bebidas ni nada de nada. Eso si, camareros haciendo viajes de vacio y conversando con otras mesas continuamente. 3.- Tuve que reclamar servilleta y plato para uno de los comensales. 4.-Pido pan con tomate y lo sirven sin sal ni aceite, lo tengo que reclamar, obtengo el pack completo pasados 10 minutos. 5.-Mas de 30 minutos entre platos. Opto por salir del comedor a pasar el rato. 6.-Cuando llegan los segundos lo hacen sin cubiertos. Finalmente me tengo que levantar yo a buscarlos. Se me ocurre volver a pedir pan. Llega cuando ya hemos comido, pido que se lo lleven. 7.-Pedimos postre para 3, aciertan 2.

Vaya por delante que la comida nos gustó, y mucho. Tambien se puede entender que alguien tenga un mal dia. Después de pagar la cuenta sin hacer objeciones, pido hablar con el responsable de sala, el Sr Robert, a quien le transmito lo bien que hemos comido, pero que desde el cariño le tengo que hacer saber que tiene un problema en la sala. Mi intención es hacerle saber en privado que no está bien el servicio que estan dando, no se corresponde al precio que cobran. El Sr Robert, al que no conozco de nada, me tutea, cosa que no comprendo. Me dice que le estoy haciendo perder el tiempo, con una actitud soberbia, sin escucharme, ni pedir ningun tipo de disculpas por el pésimo servicio ofrecido. Alguien que ha demostrado TOTAL incapacidad para liderar a SU equipo y de tener los conocimientos mas elementales para atender a los clientes con la educación y el respeto que se merecen, ausencia de conocimiento de los protocolos que cualquier profesional de la hosteleria deberia conocer antes de ponerse al frente de un negocio. (el A-B-C de la hosteleria) Una disculpa hubiera bastado, pero el Sr Robert consideró que no procedia. Sr Robert, yo no trabajo en su reataurante, usted si. Es por tanto SU RESPONSABILIDAD Y LA DE SU EQUIPO, que para eso me cobran, atenderme debidamente, vestir la mesa como es debido, asegurarse de que los comensales tienen todo lo que deben tener en un tiempo razonable, y si no son capaces de hacerlo, tienen la obligación de disculparse y como mínimo escuchar a quien le acaba de pagar la cuenta. Un absoluto desastre y una respuesta poco...

Molt mala experiència. Sóc celíac. Només arribar demano si tenen cervesa sense gluten. El cambrer, un noi jove, em diu que no en tenen perquè se'ls hi caduquen. Fins aquí correcte i/o comprensible. Li demano un vermut però el noi es recrea i segueix dient que la gent de ciutat (cal dir que jo sóc de poble de tota la vida) venen els caps de setmana al restaurant i són uns maniàtics. "Que si coses sense gluten, que si llet d'avena... Aquí la gent de poble no tenim tantes tonteries i etc etc". Tot plegat, molt ofensiu davant de tot un grup de persones que es van quedar ben parades. Òbviament està clar que no sap que la celiaquia no és quelcom que puguis escollir o no... El menjador, plagat d'insectes verds tipus "cochinilla" que van volant per sobre els plats. I també una ratapinyada.... Increïble. Si no fos per això, per l'estil rústic i les vistes, el lloc tindria encant. Tanmateix, el menjar no destaca... Però va acord amb el preu del menú (24 eur, sense begudes que potser és una mica massa però per ser un dissabte, acceptable). Abans d'anar-hi es va informar que hi havia un celíac que havia triat hamburguesa i gelat de postre: l'hamburguesa servida amb un bon tou de pa de motlle... El gelat no em poden assegurar que no tingui gluten. Tanmateix cal dir que la cambrera de sala, a diferència de l'altre, va ser amable. En resum: mala atenció inicial, menjar que no destaca, plaga d'insectes al seu interior. No el recomanaria.

PD: veient la resposta del propietari, queda palesa la realitat que ja es comenta a moltes altres ressenyes sobre la supèrbia i la manca de bon tracte del cambrer (i segurament propietari). La bona fe es demostra, no es predica. Era suficient un "em sap greu pels desafortunats comentaris sobre la teva malaltia" que ni tan sols pretenien ser graciosos. Què serà el següent: dir-li a un minusvàlid que no sigui gandul i s'alci de la cadira de...

Una pequeña joya en medio del Montseny

Tuvimos la suerte de descubrir este encantador restaurante durante nuestro viaje por el Montseny. Lo elegimos para cenar porque buscábamos un lugar auténtico y acogedor, y no podríamos haber tomado mejor decisión.

El trato fue simplemente inmejorable. Robert, el anfitrión, es todo un espectáculo de amabilidad y hospitalidad. No solo nos atendió con dedicación, sino que también nos ofreció una pequeña inmersión en la cultura local, compartiendo detalles únicos del lugar, como la famosa Fira de l'Avet que se celebra en diciembre y atrae a unos 100.000 visitantes.

La comida fue una delicia, llena de autenticidad y atención al detalle. Optamos por el menú de 24€ y cada plato nos sorprendió gratamente: Entrantes: Una ensalada de cabra con garrapiñada, que adaptaron especialmente para mí debido a mi intolerancia a la lactosa (¡un detalle que agradecí muchísimo!), y el queso brie rebozado acompañado de una exquisita mermelada casera. Platos principales: Probamos el filete de ternera y el rape, ambos cocinados a la perfección y con sabores que reflejaban la calidad de los ingredientes. Postres: El mil hojas de frutos rojos para completar la cena, mientras que yo disfruté de un poleo menta en lugar de postre.

La experiencia nos encantó tanto que, al pernoctar cerca, decidimos volver a la mañana siguiente para desayunar en este pequeño rincón mágico.

En resumen, este restaurante es mucho más que un lugar para comer: es una experiencia auténtica, llena de calidez y sabor en medio de un entorno espectacular. Si estás en el Montseny, no te lo puedes perder....